Capítulo 6

Ricardo salio furioso de la enfermería y volvió a su oficina, en eso llega su exnovia de sorpresa la última de sus conquista. Allí estaba ella parada frente a el, que acababa de llegar de todo el desastre que el mismo había propiciado. Fedora se acerca a él dándole un glamouroso beso en la mejilla.

— ¿Qué te pasa Ricardo? Esta rojo como la grana, ¿Qué te ocurre esta molesto?

Ricardo en ese momento estaba serio y molesto con lo que había ocurrido y ahora que Fedora estaba allí se enfureció más, entonce le dice.

— Nada Fedora, dime que estas haciendo aquí en la oficina. — ella le contesta queriéndolo abrazar.

— Venia a preguntarte si vas a la fiesta de tu empresa, se que esta reunión estarán grandes empresarios y también me entere que tu padre te dejara al mando de la empresa.

— Ahorita no estoy de humor para platicar Fedora, y por favor es mejor que te retires.

Fedora sale de la oficina enojada, por la manera como Ricardo la había tratado. Se paso las manos por el cabellos rubio platinado. Así que cambiaría de estrategia y buscaría la manera de volverlo a ver. En el momento que Fedora lo dejo a solas, este se encerró en su oficina. Se acerco al ventanal que estaba frente de el con un vaso de Whiskys en sus manos. Tomo un trago y luego se paso las manos por la cabeza y la rasco. Pensado en las horas antes cuando se había topado con Katty. Y dice en voz alta.

“Qué mujer más obstinante, es una criatura menuda, esa pequeña bruja del demonio”

En ese momento alguien abre la puerta y era su padre, quien estaba allí mirándolo de arriba a abajo. Cuando el volteó a mirar era su padre quien estaba allí para decirles sus cosas.

— ¿Qué pasa hijo porque esa conducta con la joven? —su hijo se paso una mano por su cara pensativo.

— Padre te dije que no quería mas ayudantes, otra secretaria más es un riesgo. Sabes que la última chica que estaba aquí, por poco los empresarios no hacen negocios con nosotros.

— Katherine no es así, ella ha trabajado en esta empresa por muchos tiempo por eso se eligió para que trabajara contigo. —su padre defendía a la chica y su hijo esta enervado por ello. — Ricardo hijo, esto no tiene que ver con tus sentimientos, sino que es la indicada para trabajar contigo. Después que yo me retire. Katherine desempeña un buen trabajo. Por eso quiero que ella trabaje contigo.

— Papá sabes que no quería hacerle daño, y se que quieres que me disculpe con ella. Pero no puedo, no puedo permitir que una mujer como ella me diga que tengo que hacer.

— Lucia había hablado conmigo, y creo que lo iba hacer contigo.

— Ya papá es mejor que dejemos las cosas como están.

— Pues te la aguantas porque ella trabajar contigo, codo con codo, Katherine es una joven inteligente, y ya conociste su carácter. Esa chica no se doblega por nadie, y menos contigo Ricardo. Así que lo siento mucho por ti pero ella se queda. Irá a casa a descansar y el lunes regresa a trabajar espero que le pidas disculpa por lo que paso entre los dos. Espero eso de ti hijo. —Ricardo se quedo pensativo, y le dice.

— No quiero que se acerque a mi, trabajara conmigo pero no la quiero que se inmiscuya en mis cosas personales. La quiero lejos de mi solo sera mi secretaría si veo algo extraño en ella que se insinúa la despido.

— No te preocupes ella solo estará a tu lado solo por trabajo mas nada hijo. Lucia la recomienda bien y la joven tiene buenas referencias. Así que espero que los dos se lleven bien y trabajan como debe ser. —Ricardo se queda pesando y contesta con una mueca en la cara.

— Eso espero padre porque no la quiero como la ultima secretaria que se desnudo en la oficina, sino fuera por la misma Lucia, los contratistas no confiarían en las empresas Montenegro como ya te lo he dicho anteriormente.

Mientras en la enfermería Lucia estaba con Katty. Esperando la dieran de alta, y ver cómo la podía ayudar, también hablar de lo ocurrido.

— Yo no voy a trabajar con una persona así, es un bárbaro, un cavernícola, es un hombre orgulloso, engreído, que se cree ese tipo.

— Es el segundo hijo de Alejandro y sé que es un prepotente, y orgulloso. Pero tú no puedes renunciar por eso.

— Eso Lucia es un cavernícola, es un hombre abusador, mira lo que hizo me zarandeo, y mira mis brazos están morados. Hasta se ven las marca y no solo eso me golpeé la cabeza y me agarraron sutura a causa de él y su salvajismo.

— Piénsalo Katherine, además otras personas no te permitirán que dejes el trabajo.

— Si el señor Alejandro es uno, y el señor Carlos del Monte, ese es otro arrogante y orgullo. —ella sonrió al recordar ese día en la oficina.

— Entonces hay dos razones para no dejar el trabajo.

— Umm… Ok Lucia está bien, pero no quiero estar cerca de ese trodolita, solo de manera profesional.

— Trato hecho mi niña, pero ahora vamos a esperar a la doctora para llevarte a casa.

— Gracias Lucía por todo lo que hace por mí, aunque en algunas no esté de acuerdo.

En eso llega la doctora y al igual Alejandro.

— Vaya mi pequeña, estarás bien.