Mi Vida "Perfecta": Problemas y Amores Adolescentes

Un nuevo integrante

Capítulo Siete

Renata Ramírez

Lounie chillo al ver al culpable de los robos y corrio a abrazarlo.

- ¡Un perrito!- grito mientras lo abrazaba.

- Vaya m*erda- se me salio y mamá me dio un golpe en el brazo.

- ¡Renata!- me regaño.

- ¡Perdón, perdón: Se me salio!- me disculpe.

- ¿¡Qué hace ese perro en mi departamento!?- dijo alterado Steve y al momento siguiente cargó a su hija- No lo beses: No sabemos de quién es o si tiene alguna enfermedad- dejo a Lounie con nosotras y se acerco lentamente al perro.

El perro se veia como un bebé cachorro, era muy peludito, sacaba la lengua y parecia encantado de que finalmente viera otro ser vivo pero también parecia un poco maltratado.

Algo capto mi atención, algo brillante: Era un collar, el collar del perro.

- ¡Ahí tiene un collar!- dije, señalando el cuello del pequeño animal- Tal vez tenga un número o algo así- Steve acerco lentamente la mano al cuello del animal pero este se encogio y comenzó a gimotear.

Pobre pequeño pensé Debiste sufrir mucho para reaccionar de esa forma me puse triste.

- Tranquilo pequeño- le dijo Steve- Solo quiero devolverte con tus dueños- agarro el collar del perro y lo reviso.

- ¿Dice algún número o algo?- preguntó Nicholas pero Steve negó con la cabeza.

- Solo es un simple collar: No tiene ni nombre del animal, ni de los dueños, ni número y tampoco hay dirección- el perro se alejo y entro en la habitación del ático, sacando mi bolsa, rebusco en ella y saco la pelota con la bolsita: La misma pelota con la que moleste a Nathaniel. El perro dejo la pelota en el suelo, olisqueo algo, volvio a tomarla en su boca y se dirigio a mi, la puso nuevamente en el suelo, la empujo con la nariz y me hizo una miradita de perrito: Queria jugar.

- ¡Awww!- No podia resistirme a ese encanto, tome la pelota y se la tire, no muy lejos pero se la tire, el perro salio disparado a buscarla mientras yo tomaba mi bolso, volvio y al dejar la pelota en el suelo se puso a saltar de alegria.

- ¡Que lindo!- dijo mamá, acariciandolo y esa fue mi señal para acariciarlo también: Si mamá lo acaricia, esta bien que yo lo haga.

- ¿Podemos quedarnoslo? Será mi perrito- dijo Lounie, no me iba a quejar, era muy tierno este pequeño cachorro: era de color blanco pero se veia un poco gris por la suciedad.

- Hija: Tú ya tienes mascota- dijo Steve tranquilamente, Nicholas se arrodillo a mi lado y también acaricio al perro.

- ¿Y yo?- preguntó él.

- Hijo: Tú tienes a Raffa, ya tienes un perro- le dijo Steve.

- Pero es muy adorable, no parece mal perro- dijo mamá, Steve suspiró y pronto me di cuenta de que su mirada estaba centrada en mi.

- ¿Te gustaria tenerlo tú, Renata?- me preguntó, mire al perro y parecia estar emocionado, sonrei un poco.

- Si, si lo quiero- respondi.

Después de sacar las cosas "perdidas", fuimos donde el veterinario a que lo revisaran para ver si no tenia algún problema, era un macho así que lo llame Pol, lo llevamos también a un estilista canino que lo baño y le recorto un poco de pelaje. Llegamos a casa y ahora no se me despegaban ni Mamá, ni Pol ni Lounie.

- ¡Eres tan lindo!- le decia Lounie mientras lo apachurraba.

- Dejalo respirar- le dije.

- Cuidalo bien- me dijo mamá.

- Tranquila ma, lo voy a cuidar mucho- le aseguré para que este más tranquila.

Al día siguiente

- ¡Disney, Disney, Disney, Disney!- decia Lounie una y otra vez.

Tenia que admitir que me gustaba ser ahora yo la de la ventana y no en el medio. Estabamos en camino a Disney Orlando, Steve conducia tranquilamente con la mano de mamá en las marchas, Lounie cantaba "Disney, Disney, Disney", Nicholas escuchaba música y yo también pero tenia a Pol en mis piernas. Él estaba acostado, era pequeño así que cabia solo en mis piernas mientras yo lo acariciaba, Steve le había comprado un collar con su nombre grabado, mi nombre como la dueña y tres números de teléfono: El mío, el de Steve y el de Nicholas.

Si estaba emocionada ¿A quién no le gustaria ir a Disney? Pero como siempre digo: Ojalá y mi familia fuera la que me acompañara y no la familia de mi madre.

Llegamos y Lounie comenzo a saltar como loca.

- Vamos, Pol- le dije a mi perro.

- ¡Guaf!- fue lo que me respondio y bajamos del carro, le coloque la correa y fuimos a los controles de seguridad del parque, no esperamos mucho y fue muy fácil pasar ya que no teniamos nada sospechoso y ¡Oh Dios Mío! Era tan genial.

- ¿A dondé quieren ir primero?- pregunto Steve, mientras yo miraba asombrada todo, Pol se sento a lado mío como imitandome y mamá me abrazaba por los hombros.

- ¡Quiero ir a- dijo Lounie pero Steve le interrumpio.

- Lounie, cariño: Deja que Renata escoja esta vez, es la primera vez que viene- le dijo Steve y aún dandole la espalda podia sentir la ira de Lounie- ¿Qué les gustaria visitar primero?- nos pregunto Steve y mamá y yo revisamos las actividades que habian en un folleto informativo.

- ¿Te parece?- me dijo mamá, señalando el acuario de "Buscando a Nemo" y yo asentí.

La experiencia fue increible, fue demasiado genial, luego fuimos a otros juegos y atracciones, Mamá (que se llevo a Pol), Steve y Lounie fueron a una exposición de las princesas de Disney mientras que Nicholas y yo nos fuimos a The Twilight Zone Tower of Terror o la Torre de terror de Hollywood Studios. Usamos la atracción varias veces hasta que Nicholas casi vomita y nos fuimos a buscar a los demás pero algo llamo mi atención: Pol estaba viniendo a mi, lo abrazé e inmediatamente comence a buscar a mamá.

Lounie estaba en el "Marketplace Carousel" mientras saludaba a Steve, mamá se nos acerco en cuanto Pol se le fue de las manos.




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