Mi Vida "Perfecta": Te odio Mamá

La Despedida y el inicio de una nueva y terrible vida

ADVERTENCIA: ESTE CAPÍTULO TIENE LENGUAJE ALGO INAPROPIADO NO APTO PARA ALGUNOS LECTORES, SI ERES MUY SENSIBLE TE SERÁ DIFICIL LEER EL CAPÍTULO

Capítulo Nueve

Renata Ramírez

Martes

Era el día. El día de mi perdición

Era el día de mi puta, jodida y maldita perdición.

De mala gana (o de caractér de puta madre) me levanté por orden de mi mamá, Belén también se levanto y desayuno con nosotras, el desayuno fue muy incómodo, desayunamos a las 06:13a.m por que a las 09:00a.m debíamos estar volando hacía el mismisimo infierno.

Guarde la pijama que use, me puse mi calentador gris con mi blusa gris y mis zapatos blancos. guarde todo en la maleta y mi mamá llamó a mi papá diciendole que estabamos en el aeropuerto a las 08:00a.m para que vaya ahí.

Nos fuimos con los papás de Belén y yo seguia llorando, recostada en el hombro de mi mejor amiga, ella también lloraba.

***

Al llegar al aeropuerto seguia llorando silenciosamente, mi prima me llamó diciendomé que no podía irme, qué ella no sabria que hacer sin mi, le dije que tampoco sabía como iba a sobrevivir pero que en cuanto cumpliera los 18 me largaría de Estados Unidos y dejaría a mi madre.

Me sentí rara, siempre imagine estár ahí solo que en mi imaginación si ibamos a Estados Unidos, pero de vacaciones los 5 o yendomé yo sola a Rusia para seguir mis sueños. Jamás se me pasó por la cabeza estar aquí en está situación, cuando llegó la hora de irme por 4 años solo lloraba. 

Estaba a punto de subirme pero regresó a ver atrás, mi papá estaba llorando, mis hermanas abrazaban llorando y mirandomé, mi mejor amiga estaba con sus padres llorando, los chicos del conjunto también estaban ahí, Krisley, Valery, Sara, hasta Martín y Jenni llorando. Corrí y abraze a mi padre por última vez, es verdad, mi papá no era un hombre perfecto, era hasta algo malo pero yo lo amabá, yo tenía esa conexión con él tan importante y solo pude llorar.

- Eres mi niña- me susurra mientras me abrazá - Eres mi hija y nada ni nadie va a cambiar eso, recuerdaló- me dice y solo lloro, me abrazé a mis hermanas sin dejar de llorar.

- Lamentó mucho haberte molestado tanto, te amo- me dice Gaby en el oído.

- Te amamos Renata, somos tus únicas hermanas, nada cambiará eso- dice Vicky y debo separarme de ellas para irme.

- Los quiero a todos- les digo mirandolos, subo al avión y por la ventana veo como me alzán la mano despidiendose de mi.

Cuando los miro no puedo seguir más.

- ¡¡PAPI SALVAMÉ!!- le grité a mi papá y veo como me mira con cara de: Ya no puedo amor

No paró de llorar, estoy echa un mar de lágrimas y nada me calma, parece que tuviera un ataque de ansiedad.

- Lo siento- dice mi mamá y se que dice la verdad. Ella solo quiere ser feliz conmigo, pero por tener su felicidad, apostó y cambió mi felicidad.

Eran 10 horas de viaje hasta California, osea que llegariamos a las 7 de la noche. Intenté calmarme pero fue en vano, pensaba en todo y solo una cosa en mi cabeza: No tener nada en Estados Unidos.

Ese era mi objetivo por ahora: Regresar a Ecuador cuando cumpla 18 años sin tener una vida en Estados Unidos

¿Lo lograré? Ni puta idea

Volví a intentar calmarme y me pude dormír, iba a dormir durante todo el viaje.

***

Cuando desperté aún había un sol muy calientito, muy diferente a lo frío de Quito. No entendí ¿En Estados Unidos a las 7 aún había sol?

Eres idiota Renata, muy idiota me dijo una voz interna y lo recordé.

Ah mierda, había diferencia de horario.

De Quito a California habían dos horas de diferencia, osea, que mientras en Quito son las 7 de la noche aquí en Estados Unidos eran las 5 de la tarde.

Bajamos del avión y cuando salimos al aeropuerto les juró que pensaba en ver a un hombre no muy joven ni muy guapo.

Ni una cosa ni la otra.

Cuando salimos mi mamá fue a los brazos de un hombre, y vaya que era guapo el hombre: Tenía el cabello negro y los ojos verdes, muy verdes, no se veía muy viejo, en realidad se veia de la edad de mi mamá, 43 años, no entendía ni puta mierda pero me acerqué a esa empalajosa pareja de idiotas enamorados.

El amante destruye hogares me vio y me dio una gran sonrisa, algo opuesto a mi cara de que quería meterle un disparo en la cabeza.

- Hola Renata, me llamó Steven, soy tu nuevo padrastro ¿Cómo estás?- dice con una sonrisa, suspiré y respondí.

- Primero, no eres mi padrastro por que ser padrastro es ocupar el lugar del papá y tú jamás ocuparas el lugar de mi papá y segundo no, no estoy bien, tengo 14 años, una vida adolecente que vivir en un lugar desconocido, con un desconocido, con padres separados y con un caractér de perros- me sinceré, mi madre me quedó veindo con cara de que estaba loca y Steve solo se calló.

- Veo que están cansadas por el viaje, son 10 horas, vamos a la casa- dice Steve cambiando de tema y lo miró con cara de "No te das cuenta de que no quiero nada de ti ni de tu vida, maldito huevon" 

- Si creo que es lo mejor- dice mi mamá hablando por las dos.

Ja, que echo verga, creo que no podre ni opinar en estos 4 años de mierda.

Nos fuimos al auto de ese hombre, mi mamá iba con el adelante y yo atrás con mi cara favorita, esa cara de "Si te atreves a mirarme te sacare la puta"

***

Después de media hora llegamos a la lujosa casa donde tendria que vivir el infierno de 4 años, Steve aparcó y entramos a la casa.

¡¡Hijo de su puta madre!! Esto es como un libro




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.