Llegamos a la fiesta en un auto que tío Ben nos envió, ya que no se sabe nada de Luke.
Cuando la abuela llegó al departamento, nos contó, como si fuéramos niños, y se dio cuenta que el el otro rubio no estaba, fuimos a buscarlo en su habitación y tampoco, llamamos a su celular y nos mandó al buzón, le pregunte a Hades pero este tampoco tenía idea de dónde podría estar.
A la abuela casi le da un infarto y comenzó maldecir en español, francés e Italiano, en otras circunstancias eso me hubiera divertido pero en esa no. No es por la fiesta y quien nos lleve, es por el hecho de que Luke esta desaparecido y me preocupa, el siempre es puntual. Hades dijo que no me preocupara porque de seguro estaba con su novia, algo que me sorprendió totalmente porque no tenía ni la más mínima idea de que pudiera tener novia y menos de que fuera heterosexual.
—Llegamos —informó Logan, así que proseguí a bajar del auto.
Las personas entraba y salía del lugar, vi a Hades a mi lado un poco inquieto, lo que me tomó por sorpresa, él no debería de estarlo, después de todo solo era un invitado más, la atención no se dirigiría a él. Por otro lado nuestra familia, o lo que queda de ella, y la de la prometida del tío Ben será el estúpido centro de atención y más los gemelos, espero y a mi ni me noten.
Entramos en lugar y todos se veía elegante, perfectamente decorado, la personas vestían de igual forma para la ocasión sólo para demostrarle a los demás cuanto tienen para derrocharlo en cosas tan innecesaria como estas. La velada será la más aburrida de la historia, era evidente.
El plan sería presentarme, alejarme de todos y comer hasta aumentar unos 20 kilos, oh el licor también es importante, embriagarme para aguantar estar alrededor de estas personas, pero no embriagarme al nivel de decir más estupideces de las que normalmente digo, y los más importante; no embriagarme al nivel de ponerme sincera podría decir muchas verdades que aún ni siquiera yo acepto que lo sean. El plan estaba hecho sólo había que seguirlo.
—Allá esta Papá, vamos —anuncia Logan sacándome de mis pensamientos.
Miro donde a punta y efectivamente ahí esta mi tío con una mujer…!Ay no! Pero ¿Qué mierda? ¿Qué tiene la vida en mi contra?
Enserió la vida me odia tanto, es ella estoy casi segura, ¿ pero como? De tanta mujeres en el mundo tenía que ser ella.
Bien Brooke cálmate tal vez ella no sea su prometida y sólo sea su conocida.
Pero justo cuando esas palabras cruzaron por mi mete el se giro para darle un beso en los labios.
Oh maldita sea, si es ella, corre.
—Brooke —Logan trata de llamar mi atención, al ver mi cara de terror.
—Bien, vamos a darle la mejor impresión a esa zorra para hacer que se sienta… —Se calla al instante que la reconoce, a la “zorra” con la que mi tío se va a casar. —No puede ser ella.
—Si es ella —afirme mirando el rostro de la misma mujer que hace dos años atrás me atropello, y que por su culpa tuve que cargar un maldito yeso en mi pierna por tres meses, también la cual dejó cicatrices imborrables alrededor de mi cuerpo.
—Espera ¿es ella? —inquirió Logan al mirar bien a la mujer. Lo miro directo a los ojos y asiento. —Dios mío, mi futura madrasta es una asesina, me siento cenicienta —agrega y deja escapar un suspiro. La abuela lo golpea para que se calle, sabe que esto me afecta demasiado. Aunque no lo diga en voz alta.
Quizás al instante no vi las consecuencias y la magnitud del asunto, pero con los días los problemas fueron surgiendo. Mi pierna no quedó igual que antes, tuve que asistir a terapia por un año, aparte de ser operada, gracias a los efectos que eso provoco, sin contar el hecho de las cicatrices que quedaron grabadas en mi cuerpo por siempre, cada ves que las veía me encerraba en el baño a llorar, sin que nadie pudiera notarlo, al principio eran más horribles con el tiempo fueron disminuyendo pero nunca fueron borradas, nunca podrán serlo. Y la culpable de todo eso está allí sonriéndole a los invitados como si nada hubiera pasado, claro ella no debe ni de acordarse de mi, en cambio yo nunca podré olvidarla.
Sin perder más tiempos nos acercamos hacia ellos. No le arruinaría la fiesta a todos por algo que sólo me afecta a mi.