Mis treinta instantes

Instante siete -Quiero un romance de esos antiguos con cartas y poesía...

Ha pasado una semana desde nuestro segundo encuentro… Solo pienso en lo mucho que hemos estado trabajando sin parar, desde entonces... Entonces mientras me hundo en mis pensamientos, inerte miro sin inmuntarme hacia la pantalla de mi portátil, como siempre solo pensaba, en esas cosas que aun continuo sin poder alcanzar, mi mente se siente agotada, mi cuerpo ya no es el mismo… Hay días en los que simplemente quisiera ser invisible y poner en pausa mi cerebro o quien sabe en silencio absoluto… ¡Tierra llamando a la lunática Aaliayh! He Despertado de mi coma mental y volviendo a mi realidad, esa que continua golpeandome sagazmente y sin parar… ¡Odio los lunes! grito...

Ting…Una notificación de correo me ha llegado… 

De: Thiago Madeira

Para: Aaliyah Rodriguez

Hola, Aaliayh Rodriguez con Z.

Espero que estés bien, quisiera que en esta semana comencemos a revisar las propuestas iniciales del proyecto de la casa. Si no es molestia para ti, podríamos vernos hoy en el proyecto.

Se despide:

Thiago Giannetti Madeira.

Qué esperas para responder… La verdad no tengo ganas de responder... musito... ¡Ya voy! digo mientras Mila vuelve a disiparse en mis pensamientos rumiando como un león en celo.

Aaliayh Rodriguez con Z... Pienso. Al recibir su respuesta, me quedo pensando en ella sobre lo particular que puede ella ser, la forma en la que mira la comida como si fueran obras de arte, tomándole fotos y analizando cada detalle dentro del contexto que nos rodeaba. Recuerdo a Danha comentarme que Aaliayh siempre esta absorta en sus pensamientos… ¿Sabes porque lo hace? Dice, siempre busca evadir su realidad… Es como si tiene un propio universo dentro de su cabeza, ella es muy perceptiva de los detalles en el trabajo pero cuando se trata de su vida es como si los bloqueara a propósito, otra cosa es que tiene un diario donde escribe las recetas de comidas pues es muy buena en ello. Franco siempre me pareció un poco frio pero realmente es una persona muy divertida, me paso su contacto ya que quedamos de juntarnos incluido Dante con quien es más cercano. Franco ayudo a Dante a encontrarse con Danha. En ese momento un pensamiento cruza por mi mente… Pareciese que todos los caminos me llevan a hacia ti…

Ya le escribiste el correo, dice Dante ¡No sé y no te daré la respuesta! Respondo. Note que ella no tiene ni la más remota idea de que eres el propietario de aquella casa, porque no lo has mencionado... Me quedo en silencio a lo que él me responde…Tú y tus misterios Thiago... ¿Podrias no mencionarle nada tampoco a Danha? ¡Okay! Su rápida respuesta realmente me preocupa, Dante siempre cuestiona mi vida pero últimamente el parece otra persona…

 ¡Pienso que ella te gusta! Murmura Dante, desde aquellas vez que la viste desde el balcón del restaurante donde celebramos la comida por tu llegada aunque no lo creas, si que me doy cuenta de las cosas ¡hu hu hu! ¿De qué hablas? Le cuestiono… vi como la observabas desde lo lejos y de paso ella nunca te miro. Sabes por poco sus amigas nos descubren pues esa noche Marie le escribió a Danha cuestionándole donde estaba y con quien… Aaliyah nos vio caminando por la plaza España aunque al parecer pensó que estaba confundida, ya que antes de la cena estuve con mi pequeña Danha… Ya veo, con razón no tenías ganas de comer, murmuro… Ahora entiendo porque se quedó mirándonos fijamente en la cena quizás esta vez sí nos reconoció. Danha no les había comentado a sus amigas acerca de nosotros, hasta que me aparecí en el viaje de último momento de Marie. Pensé que solo iba ella, pues me dijo que se iría de viaje por cinco días sin darme más explicaciones no se parece en nada a mi antigua Danha esta versión me gusta más.

Sonrió al ver como su mirada de lujuria aparece en este momento… Así que le grito Puedes dejar tus malos pensamientos, es hora de irnos.

¡Déjame terminar esta historia! Cuando Danha entro a la casa que habían rentado se puso de todos los colores, se quedó pasmada mientras Marie entra y solo se detuvo a observarnos luego me mira para decir ¡Quién eres tú! Dante mientras Danha sonríe nerviosamente. Soy su novio, el de Danha ¡lo sabía que eras tú!, sé que Liayh es ciega, lunática y que apenas sabe por dónde camina pero ese día no se equivocó, tu ropa combinaba perfectamente con la descripción.

Solo escríbele y ya, si no le hubiese escrito a Danha, no estaría conmigo. Eres tan lindo, bromea pero tan torpe cuando alguien te gusta. Pongo mi cara totalmente seria y digo pronto me mudare de aquí. ¡Sí, claro! Me amas… Ya lo envié hace más de siete minutos pero tu hoy tienes ganas de hablar… Y alardear sobre tu relación.

¡Ella es muy brillante! murmuro, Dante me mira y También te gusta. Si quieres información puedo conseguirla, sé que toma clases de judo como veras tiene una bonita figura, Dahna va con ella a esas clases. ¡Sí que te tienes todo el itinerario! Susurro mientras se dibuja una sonrisa en mí rostro al ver su cara de idiota de Dante.

Hoy ya es domingo, pienso… A través de mis sabanas de suave algodón de color amarillo pastel puedo ver la luz del amanecer asomándose en mi habitación por mis ventanas, he dormido quizás unas cuatro horas pues Danha y yo nos hemos pasado gran parte de este fin de semana en los preparativos de la fiesta de cumpleaños de Marie ¡Sera una fiesta increíble y muy emotiva¡ Me doy vuelta entre las sabanas y a través de ella comienzo a buscar mi teléfono en modo sonambulismo, es cuando todo lo haces con los ojos pegados con superglu, moviendo mi mano siento algo, pero en vez de encontrar mi teléfono siento un cuerpo a mi lado… Mi mente es invadida por los peores pensamientos ¡Si asi soy yo… Overthinking! Alzando mi sabana muy lentamente… ¡Marieeeeeeeeeeeeeeee del Carmen! Grito, ¿Cuándo llegaste? Ella sonríe con cierto descaro mientras Danha toca la puerta preguntando si estábamos bien ¡Parece que Marie se ha perdido de camino a su habitación!




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