CAPÍTULO 16- LA GRADUACIÓN

POV JESS

Por fin llegó el día de la graduación. El último día que pisaría el instituto había llegado y no me lo podía creer. Estaba esperando tanto para este momento que ni me lo creía. Mi madre me enseñó varios modelitos que creía que podrían irme bien, pero la verdad es que mi madre tiene un gusto un poco anticuado por lo que decidí ponerme el vestido que me prestó Liz. Mi padre se ofreció a llevarnos a Liz, Philip, Jacob y a mí al instituto para que no tuviéramos que ir andando. Ya en el instituto pudimos hablar más tranquilos.

-Estoy deseando que llegue el momento de recoger el diploma. –Dijo Liz que parecía estar super emocionada.

-Ya falta muy poco para ser libre. –Dijo Jacob sonriéndome.

-Venga chicos, iros al salón de actos. –Dijo el director que parecía tener prisa.

Llegamos al salón de actos y ya estaban muchos de los alumnos sentados. El director nos indicó a todos que cogiéramos asiento, acto seguido empezó el acto.

Una vez recogidos los diplomas, mis padres se acercaron para felicitarnos.

-¡Qué orgullosos estamos de ti cielo! –Dijo mi madre mientras me abrazaba.

-Felicidades a ti también Jacob. –Añadió mi padre estrechándole la mano. Cosa que Jacob agradeció.

-Bueno, nosotros nos vamos ya a casa. Pasadlo bien. –Dijo mi madre despidiéndose de nosotros.

Al irse mis padres, la madre de Jacob apareció en escena, iba vestida bastante elegante.

-Cariño, me alegro muchísimo por ti, ¡lo has conseguido! –Dijo la madre de Jacob.

-¡Gracias mamá! –Dijo Jacob mientras la abrazaba.

-Mamá, te presento a Jess. –Dijo con tono alegre.

-Encantada Jess, yo soy Emma. –Dijo dedicándome una gran sonrisa.

-Igualmente. –Le devolví mi mejor sonrisa.

 Después de hablar un rato, la madre de Jacob se despidió de nosotros. Liz propuso ir al bar para celebrar que éramos libres y que en este momento empezaba nuestro ansiado verano.

-¿Vais a ir al bar? –preguntó Dylan.

-Sí. –Dijo Jacob con cara seria.

-Pues me apunto. –Dijo Dylan guiñándole un ojo.

A Jacob no le gustó la idea de que Dylan fuera al bar y bueno, para ser sinceros a mí tampoco es que me encantara la idea.

Ya en el bar y junto con Liz pude relajarme un poco.

-¿Te vienes al baño? –preguntó Liz tendiendome la mano.

-Claro. –Le dije.

Nos fuimos juntas al baño pero yo decidí quedarme fuera.

-Jess. –Dijo Dylan haciendo que pegara un saltito del susto.

-Me asustaste. –Le miré nerviosa. 

-No pretendía asustarte preciosa. –Dijo sonriéndome.

-No empieces Dylan. –Dije un poco mosqueada. No tengo ganas de tus estupideces y tus buenas palabras.

-¿Que no empiece? ¿A qué te refieres? –Dijo sorprendido.

-A tontear conmigo, Jacob y yo estamos saliendo. –Dije mientras miraba a mi alrededor por si alguien nos estaba viendo o escuchando.

-Oh, no lo sabía. –Dijo con tono serio. Le cambió rápidamente la cara al saber la noticia y se fue sin decirme nada. Liz salió del baño y volvimos con los chicos, pero al parecer Dylan se había ido.

POV DYLAN

Después del acto escuché a Liz decir que iban a ir al bar y como tenía ganas de divertirme un poco, me apunté. Me dirigía al baño cuando en el pasillo vi a Jess. No sé por qué pero tenía la necesidad de molestarla asique le hablé pero me cortó el rollo diciéndome que Jacob y ella estaban saliendo. Al parecer el último en llegar se lleva la mejor parte. Debo de reconocer que me molestó bastante aquello, es un hecho que Jacob no me transmite mucha confianza. Al final decidí irme de allí.

Cuando llegué a casa mi madre y Ash no estaban, supuse que estarían con mi tía. Sin embargo mi padrastro si estaba.

-Dylan, tenemos que hablar. –Dijo mi padrastro. No pude evitar ponerme un poco nervioso ante su presencia.

-No tengo ganas de aguantarte. –Dije con tono bastante borde, realmente lo detestaba con todas mis fuerzas.

-Tengo un trabajo para ti. –dijo mi padrastro quedándose totalmente tranquilo. 

-Vas a hacer lo que yo te diga y lo vas a hacer bien sino quieres que tu madre pague por tus errores. –Añadió.

-¡Deja a mi madre en paz! –Le grité. No podía permitir que hiciera daño a mi madre.

-Solo te lo repetiré una vez más, mañana a las 2 de la mañana en el almacén 209. Si no lo haces, despídete de tu madre. –Dijo con frialdad. Se fue antes de que yo pudiera articular palabra.

No tuve más remedio que aceptar si no quería que mi madre resultara herida. Mi madre y Ash era lo único que me importaba en este momento, no podía permitir que sufrieran ni se involucrasen en todo esto.