Capítulo 10

Después de desayunar con mis amigos — aún se sentía irreal esa palabra para mí — me dirigí a mi habitación y quise empezar el proyecto que la maestra de español nos dejó, ya que se entrega la próxima semana.

Ahora venía lo difícil, escoger cuál libro leer para mi reseña.

Después de unos minutos, escogí uno de romance en la época de la regencia inglesa. Lo volvería a leer.

El romance en los libros era lo único que podía imaginar sobre el amor. Porque probablemente nunca sepa que es enamorarse de alguien, porque, ¿quién se fijaría en mí?, así que me imaginaba estar ahí y enamorarme de una persona que me acepte tal y como soy.

Antes era muy pequeña para saber eso y después, no me sentía lista para empezar a pensar sobre tener novio, lo extraño era que en ese momento, me sentía lista para yener una relación.

Tal vez si estaba mejorando.

Me puse los audífonos y empezó a sonar everybody wants to rule the world de tears for fears.

Cuando iba a mitad del libro, recibí una notificación de Instagram.

The Gang

Olive: Heyyy!!!! Estoy aburrida, hay que hacer algo.

Crawford: Por primera vez estoy de acuerdo con Olive.

Yo: ¡¿Qué te dije sobre ese nombre, Annabelle?!

Crawford: ¿Te llamas Annabelle? 😂😂😂😂

Olive: ¡Qué dije sobre ese nombre¡ 😡

Aparte, a la mayoría le gustó el nombre del grupo.

Crawford: ¿Pero si vamos a salir? 🤨

Yo: Lo siento, hoy no puedo :(

Olive: ¡¡¡¡¡Queeeeeeeeeé!!!!

Yo: Tengo que hacer el proyecto de la srta. Rodriguez.

Crawford: ¡Mierda! NO LO HE HECHO

Olive: ¿Había proyecto? 😰

Crawford: Se entrega la próxima semana. Hasta Isaac lo sabe.

Olive: Aún tengo tiempo

¿Quién es Isaac?.

Ya iba a cerrar la conversación cuando de repente…

Crawford: El que se sienta conmigo en la clase de español, al que le gustas.

Siempre hay tiempo para el chisme.

Olive: Ya se quien es

¡NO ME GUSTA!

Crawford: Sí claro.

Olive: Lo hablaremos en la comida 😑

* Olive salió del chat*

¿Así que eso era tener amigos?.

Al parecer si, no lo arruines.

Volví a ponerme mis audífonos y terminé de leer el libro.

Cuando llegué con mi bandeja de comida a nuestra banca, ya estaban Olive y Dylan en ella.

— Hola.

Me notaron al instante.

— ¡Zoey, ayúdame! Isaac viene para acá.

Ví a Dylan y tenía una sonrisa malvada.

— ¡¿Qué?! — dije con sorpresa.

— Isaac quiere conocerla.

— ¡CALLATE!.

Y justo en ese momento, el pelinegro llegó corriendo y se tropezó.

— ¡Dylan! — lo abrazó.

— Hey, Isaac, te quiero presentar a mis amigas.

Isaac se escondió detrás de él.

— Hola, ¿Cómo… — Olive empezó

—... ¿me llamo? Dylan ya lo dijo, por si no lo escuchaste, me llamo Isaac, tengo 16 años y me gusta la materia de historia.

— Ok, iba a preguntar que cómo…

— … ¿estoy?, algo nervioso, para ser sincero.

Olive enarcó una ceja.

Dylan le susurró algo en el oído. El se acomodó su bandana morada.

— Lo siento, a veces no puedo esperar turnos — agachó la mirada y se acercó a mi amiga — perdón — sus ojos azules se conectaron con los cafés de la rubia.

Se sonrojó un poco.

— E-esta bien, no te preocupes.

Se levantó de enseguida.

— Me tengo que ir, adiós ¨capi¨.

Y salió corriendo otra vez.

— Él está en el equipo de rugby.

— Que… lindo.

— Ha mejorado mucho con sus antihipertensivos.

— Creo que voy a tener que ser muy paciente con él.

Acaso dijo que…

— ¡TE GUSTA! — Dylan saltó de su lugar.

— Yo no… — sonó el timbre para las clases extraescolares.

— ¡Adiós!.

Olive gritó.

— Isaac no me gusta, solo se me hizo parecido a mí, años atrás— me abrazó.

— Dile.

Ella asintió.