Capítulo 25

Salimos de nuestra última clase del día, cuando oímos por medio de las bocinas, que Nick y Mariana tenían un anuncio importante que darnos a todos los estudiantes.

Estaba justo recorriendo el pasillo con Olive, cuando las dos nos volteamos a ver confundidas.

—¿Un anuncio importante en estas fechas?.

Sólo faltaban 5 días para Navidad y cada quién iba a ir a casa con sus familias, excepto yo.

Le respondí a mi mejor amiga con un encogimiento de hombros.

Caminamos hacia la tarima, donde había muchos estudiantes reunidos para escuchar las noticias.

Traté de localizar a Crawford, pero fue imposible con tanto gentío.

Pasaron unos minutos cuando Mariana agarró el micrófono y empezó a hablar.

— Gracias por reunirse aquí, para los que ya han estado con nosotros más tiempo, ya sospecharán de que se trata este anuncio, para los que son nuevos, voy a explicar lo siguiente.

—¿Será sobre navidad? — preguntó la peliverde que estaba poniendo mucha atención.

— Cada año, en la víspera de navidad realizamos un baile de invierno para que ustedes puedan convivir mejor y también pueden invitar a las personas que quieran, ya sea de forma amistosa a con alguna intención romántica.

Oh por dios…

Olive chilló de alegría.

Yo estaba pálida.

Un baile de invierno, ¿cómo en las películas?.

Desde que era una niña, siempre me imaginaba que iba a asistir a un baile con el amor de mi vida, vestida como una princesa y que él sería mi príncipe. Aunque eso no podía estar más alejado de la realidad.

Una parte de mí se preguntó si cierta personita me querría invitar al baile.

— Las propuestas para asistir al baile se hacen 3 días antes del evento, aunque recomendamos que ya empiecen a alistar los atuendos que se pondrán para ese día.

— ¿¡Un baile de invierno y no nos dijiste?!.

Estábamos en la hora de la comida, ahí estaba Crawford con cara de fastidio, y sorprendentemente Isaac.

— No es tan importante — rodó los ojos.

—¿¡QUÉ NO ES IMPORTANTE?!.

Isaac tranquilizó a Olive.

—¿Y cómo es?.

—¿El baile?.

Asentí.

—Pues el año pasado no fuí — se encogió de hombros.

Inconscientemente, Dylan lo miró cómo si recordara algo.

—¿Y por qué no fuiste? — preguntó Olive.

Ambos se dieron una mirada sospechosa.

—Estaba enfermo ese día.

—¿Y tú Isaac? — cambié de tema.

—Yo tampoco fuí.

Olive frunció el ceño.

—Tenía que cuidar a Dylan.

Algo dentro de mí, no creería esa historia, pero lo ignoré.

Estúpidamente lo ignoré.

—¿Y van a invitar a alguien?.

Fué mi turno de sonrojarme.

—Claro que no, eso es sólo para los que tienen pareja.

—Y ninguno de los dos tenemos — apoyó el pelinegro.

Fruncimos el ceño.

Ambos se removieron en su asiento incómodos.

—Dylan, se me olvidó algo en el salón, ¿me acompañas?.

—¡Vamos!.

Salieron corriendo hacia las aulas.

Olive se cambió de lugar para quedar enfrente mío.

—Te propongo algo Zoey.

—Interesante, Green.

—Yo estaba pensando en que si no tenemos pareja para el baile, podamos ir juntas.

—¡Eso sería genial!.

Sus ojitos se iluminaron con emoción.

—¡Lo sé! y quería proponerte que tú compraras mi traje y yo tú vestido.

—Eso es muy original.

—Estás hablando con Olive Green — sonrió orgullosa.

—Me parece bien, iré más tarde.

—Confió en que me elegirás un vestido muy bonito.

Fruncí el ceño.

—Olive…

—Está bien, Zoey, estoy bien.

—Elegiré con el que te sientas cómoda.

Al cabo de unos minutos, llegaron Crawford e Isaac, algo sudados por el recorrido, pero un tanto sospechosos.

—Debemos irnos, tenemos tarea de matemáticas.

—Pero si no dejaron.

—A nosotros sí, entonces, ¡nos vemos! .

Se sintió la incomodidad de ambos.

¿Qué estaban tramando?.

—¿Qué te parece si vamos juntas a la plaza?

—¿Pero como si se supone que es una sorpresa?.

—Nos separaremos cuando lleguemos al centro comercial y nos encontraremos en un punto.