Hoy día 23 de diciembre de 2023. Abigaíl que tiene varios días libres debido a las fiestas decembrinas, acude a un centro comercial con su pequeño hijo, están de compras, en una tienda especializada en ropa infantil, le prueba ropa a Ramsés y le compra un traje de gala con abrigo incluido y unos zapatos elegantes.
Después entran a una elegante boutique donde hay una gran variedad de vestidos rojos, escoge tres y se los prueba. ¿Cómo me veo?. Le pregunta al pequeño Ramsés. ¡Te ves muy linda, mami!. ¿Cuál crees que me luce mejor, este que tengo puesto o esté otro?. Todos te quedan bien, mami. Qué dilema. Dice Abi, sonriendo.
La vendedora que los escucha interviene. Dice la verdad, todos la hacen ver espléndida. Abi escoge un vestido que se pega a su cuerpo perfectamente, haciéndola ver elegante y sexy, el vestido viene con un abrigo en color negro, con brillos bordados en la solapa. Luego van al departamento de zapatería donde escoge unos zapatos rojos con tacón de aguja.
Ramsés da su opinión. Son bonitos, pero siempre dices, "esos zapatos altos, me matan". Jaja, jaja, jaja. Ella ríe con una carcajada contagiosa, la forma en que Ramsés imita su voz y su expresión la divierten mucho. Abi cancela la cuenta y salen a comer. Están sentados en un restaurante, ella le pregunta. ¿Qué regalo quieres para navidad?.
Ramsés responde luego de una pausa. No quiero nada. ¿Por qué, mi amor?, puedes pedir lo que quieras. Es que hable con Dios y le dije: no quiero regalos, solo quiero que mi papá regrese para esta navidad. Abigaíl voltea la cara para que su hijo no vea sus lágrimas, pero tiene un pequeño muy inteligente. ¿Qué te pasa mami?, no estés triste, por favor.
No estoy triste mi bebé, es que lo que dijiste me emocionó mucho, pero tú me haces estar muy feliz, siempre. Expresa mientras se seca las lágrimas y luego le pasa la mano por la mejilla con mucho amor. El almuerzo llega y se dedican a degustar la comida, ella corta en pedazos pequeños la carne del plato de Ramsés y él come con soltura.
Cuando regresan al edificio donde viven; Ramsés está dormido en su asiento especial. Abi lo toma en sus brazos y sube por el ascensor hasta el apartamento y lo acuesta. María, por favor, ¿puedes ir por los paquetes a mi auto?. Voy enseguida, doctora. Abi se da una ducha con agua tibia, al salir busca su móvil y realiza varias llamadas.
Para su tranquilidad, le marca a su peluquera para ratificar la cita ya concordada para navidad, después llama al hotel y les recuerda la reservación de la mesa. Al lado del gran pilar, en el salón El Cóndor. Los últimos años, en ese salón se reúne mucha gente para la celebración navideña y es común que hagan reservaciones. La mesa ha sido reservada para usted, señorita, no se preocupe. Contesta la recepcionista.
Al colgar, la recepcionista se dirige a las oficinas de publicidad del hotel. Hay un pequeño grupo reunido, están haciendo planes y repartiéndose el trabajo para el día de navidad. La chica de rojo, Abigaíl, llamó para ratificar la reservación de la mesa, para la nochebuena. Les informa con una gran sonrisa, todos gritan de alegría y aplauden.