Capitulo 44 "Nada nos podrá separar"

Ya estaba escrito, sabíamos que estábamos hechos el uno para el otro,

Solo era cuestion de tiempo para que nuestro amor no se pudiera ocultar mas,

Pues un amor como el nuestro es difícil de olvidar.
 

KEDAE
 

Narra Diego.

No pude evitar sentir temor al escuchar tales palabras del señor Monzalvo, pues uno como padre es capaz de hacer cualquier cosa por defender a nuestros hijos, sabia que sus palabras eran muy sinceras, por lo cual no puede evitar maldecirme mil veces mas por haber echo sufrir a Dalia, pero al ver que ella se enfrentaba a su padre, saque el coraje y valor que me hacia falta, pues si ella era capaz de luchar contra todos por nuestro amor, también yo lo haría.

Cuando mis padres y mi hermano me vieron, se alarmaron, como era de esperarse preguntaron que había sucedido, para ser sincero pensé mucho en decirles o no la verdad, pero si estaba decidido hacer las cosas bien, tenía que empezar desde ahora.

-Tuve una discusión con el señor Alberto Monzalvo-

-Pero porque hijo, que le pasa a ese señor, quieres que vallamos a levantar un acta ante el ministerio público, me cae muy bien esa familia, pero no permitire que le hagan daño a mi hijo-

La respuesta de mi madre era de esperarse, pero antes de que me siguiera abrumando, mi hermano Marco entro en escena.

-Pues yo creo mas bien que se quedo corto el señor Monzalvo ¿No Diego? Será mejor que le cuentas a mi mamá que es lo que esta sucediendo. –

-Si mamá, Marco tiene razón, el señor Alberto me pego por defender a su hija; Dalia. –

-Y esa mocosita que tiene que ver en todo esto Diego. –

- ¿Recuerdas cuando me separé de Sandra, y te dije que era por que estaba enomarado de alguien mas? –

- Claro, se me hizo una estupides pero que podía hacer. –

-Pues de la mujer que estoy enamorada es ella; Dalia Monzalvo... -

-Pero que tienes en la cabeza si es una niña apenas, estas mal, ¿Te haz puesto a pensar que van a decir nuestras amistades? - - Esto es solo un capricho que deseguro después que te la llevas a la cama se te pasara Diego, por favor no preocupes a tu madre solo por un capircho que se te metio entre ceja y ceja –

- Mamá, papá, con todo respeto lo que opinen sus amistades me tienen sin cuidado, y en relación a tu comentario fuera de lugar papá, debo decirte que no es un capricho de dos horas... ¡AMO A DALIA DESDE HACE 6 AÑOS! Su padre esta al tanto de todo lo que hemos vivido, y era de esperarse que reaccionara así, si me separa de ella fue por las intrigas de Sandra y la bruja de su hermana, pero en esta ocasión no pienso renunciar a ella, así que será mejor que se vallan a costumbrando, por que luchare con todo y contra todos por ella, así que si me permiten debo irme a dar un baño que tengo una cita con el señor Alberto. –

Mis padres solo quedaron callados, era muy molesto escuchar palabras tan machistas y repugnantes como el que diran... eran las 11:00 am y ya estaba listo, para ser sincero no había logrado dormir nada, una por los nervios de estar frente a la familia de Dalia, y otra por los golpes, me había tomado un analgésico, pero creo que su efecto estaba empazando a pasar nuevamente; ahora estaba mas que listo para acuidir a la casa de los Monzalvo, espero que Dalia este bien, tome mi carpeta, llaves y teléfono, pues quería ser puntual hoy mas que nunca necesitaba demostrar mi compromiso, responsabilidad, madures, etc, pues tendría que luchar por el amor de mi vida.

Narra Dalia

No había podido dormir para nada solo daba vueltas en mi cama, me dio un baño pensando que tal ves era por la adrenalina y el cansancio acumulado, pero no logre pegar el ojo en toda la noche, por no decir madrugada.

Mi tia había tocado a las 8:00 am mi puerta, ya que no me había querido salir de mi habitación, pues no escuche ruidos y no quise despertar a nadie.

Al parecer no era la única que no pudo dormir, pues se veía su carita demacrada, y con sueño, tenía en mis manos una de las flores que Diego había enviado, cuando ella entro.

-Hija ¿te desperté? -

-No tia que pasa, ¿Todo esta bien? -

-Eso es lo que queremos saber, fue imposible no escuchar la pelea de anoche que tenia tu padre, con alguien mas, no quisimos salir para no ser inoportunos, tengo mis teorías, pero me gustaría que fueras tu quien me contara por favor. -

- Tia, de verdad lo que menos quería era que esto sucediera, pero me enamore de la persona menos esperada, trate por años de luchar contra este sentimiento, pero es mas fuerte que yo, tengo miedo, miedo a pederlos, a perder el gran amor que me han dado, pero ya no puedo imaginar mi vida lejos de él; Diego Velazquez. –

El silencio que invadió la habitación era inquietante, pude ver la cara de mi tia, que no parecía nada sorprendida, por lo que solo hacia mas tenso el ambiente.

-Sabes hija, muchas veces tuve el presentimiento de que algo estaba pasando entre ustedes, pero quise creer que solo era mi imaginación, pero el día que llegaste de Guadalajara para a boda de Elena, los vi besándose, Elena quiso distraerme, pero pude ver lo suficiente, obvio lo mantuve en secreto, pues no quise ocasionar problemas, pensaba que tal vez era pasajero, una atracción, después de que regresaras por el tema de tu mamá y no accedieras a quedarte en la casa elevo mas mis sospechas, pero tampoco quise decirte nada, pensé que después de tu vieja a Barcelona todo regresaría a la normalidad, pero ayer cuando me pediste que abriera el sobre, todas mis dudas se diciparon, y solo me pregunte ¿que pude haber echo mal, para que te enamoraras de un hombre casado?-

-Tia lo siento mucho, ¡tu no hiciste nada!, me enomore de Diego desde antes de que el se casara, pero no tuvimos el valor de luchar por esto, ahora de verdad estamos dispuestos a luchar contra viento y marea, de verdad me gustaría contar con tu apoyo, pero se que no es fácil, por lo que sabré entender...-