Ojos Rojos Libro Il : Vendetta

Capítulo X: "El Consejo de Aradia se reune"

Al llegar a casa, el primero en recibirnos fue Enoc, su rostro pasó de la inmensa alegría al horror al notar mi brazo cercenado. Lamec no se detuvo a dar explicaciones y yo solo atiné a sonreírle levemente, estaba exhausta, usar el poder nuevo que había obtenido me causaba agotamiento, sin mencionar todos los ataques que tuve que esquivar y la enorme cantidad de sangre que perdí. 
—Descansa Pandora, te llevaré a la cámara donde me recuperé yo, tú brazo regresará al igual que tú energía y fuerza  
Los ojos de mi amado hermano brillaban con tristeza, sin embargo, para mí ese preciso instante era perfecto, había vuelto a ver a Lamec, estaba otra vez en casa, en mi añorada Aradia y no era una prisionera, estaba en el castillo, mi hogar 
—Este nunca dejó de ser tu hogar —Enoc caminaba a nuestro lado, visiblemente consternado —Mi hermano puede ser muy severo a veces con sus correcciones, pero jamás dejó de amarte mi querida sobrina 
No sentí la presencia de mi padre cerca en ningún momento del trayecto hacia la cámara, di por hecho que no querría verme aún y pasaba del tema, al llegar Lamec me colocó con mucho cuidado dentro del extraño aparato  
—Pandora, esta máquina trabaja con la energía proveniente del núcleo de Aradia y su agua, los mares de nuestra tierra tienen propiedades curativas asombrosas, no tomará mucho para que estés completamente sana 
Asentí, tenía unas enormes ganas de dormir, los párpados me pesaban y vagamente percibí cuando Lamec se acercó hacia mí y besó mi frente, cerró la cabina y el agua comenzó a inundar el interior del artefacto, esto terminó por relajarme y caí en un profundo sueño. De vez en cuando podía escuchar voces, como si estuvieran muy lejos de mí, Enoc y Lamec hablaban sobre el daño que me había causado beber sangre refrigerada, mi hermano no escondía su descontento mientras Enoc intentaba calmarlo. 
—Si mi padre no la hubiera encerrado —se quejaba Lamec — ¡Pandora se habría alimentado como corresponde y su regeneración habría sido casi inmediata! 
—Lo importante es que su castigo ya fue levantado y ella está de vuelta con nosotros en el castillo, donde pertenece 
Mi buen Enoc, siempre buscando la forma de que haya paz entre todos los seres, lo que más deseaba era abrazarle cuando lograra recuperar su cuerpo. Luego de esa mini discusión que escuché, volvió el silencio, mi mente vagó por distintos recuerdos, momentos felices con mis padres humanos, de los pocos que alcanzamos a vivir, mi mamá cuidaba el pequeño jardín de la casa, mientras mi papá corría tras de mí, bajando su velocidad a propósito para no alcanzarme tan pronto, después de un rato él me tomaba por la cintura y me subía a sus hombros, ambos reíamos felices, agitaba mi mano y llamaba mi mamá para que voltease a vernos pero en el momento que lo hacía, su rostro se deformaba, abría la boca de una manera sobre humana y de esta sobresalían unos largos colmillos, abrí los ojos angustiada, aún estaba dentro de la máquina, mi brazo había vuelto a la normalidad y ya no tenía heridas en ninguna parte de mi cuerpo. A través del cristal, pude ver a Enoc y Lamec sonriéndome, a su lado se encontraba mi padre, sentí deseos de llorar, mi familia, la existencia me permitió tener una nueva y había comprendido que lo único que deseaba era mantenerla unida. El liquido de la cápsula comenzó a ser drenado, me maravilló el ver mi brazo renovado y sentir mi cuerpo con la energía restablecida a tope, la puerta se abrió y Lamec me ofreció su mano para ayudarme a salir, ver su rostro me hizo sentir una gran sensación de calidez en mi pecho, iba más allá de mi cuerpo físico, se podría decir que venía de mi alma.  
—Me alegra verte bien, querida hija  
Mi padre mostraba una sonrisa, pero no pude mantenerle la mirada, sentía vergüenza por escapar y haber pasado por encima de su autoridad  
—No te preocupes, Pandora —dijo —entiendo los motivos de tu huida y me siento orgulloso que demostraras esa convicción en enfrentarte a quien lastimó a un miembro de tu familia, pude ver la pelea que tuviste contra Thomas y me hierve la sangre pensar en las heridas que te causó, sin embargo, Lamec me puso al corriente más en detalles que, al parecer él actúa fuera de su voluntad  
—Así es —asentí tristemente —Tom está siendo forzado, por lo poco que vi en ese momento, él no está ni siquiera al tanto de en lo que fue convertido ni de lo que está haciendo 
Mi padre llevó sus manos al pecho y comenzó a caminar por la habitación mientras analizaba la situación  
—Es verdad que ya de por sí, cuando un vampiro crea a otro, este tiene cierta conexión con el neófito, pero hay ciertos limites éticos a la hora de tomar control sobre la voluntad del ser 
—Entonces Roger van Euwen no solo transgredió las leyes de Caín al crear un vampiro sino que además, rompe las reglas de ética y abusa de su habilidad —acotó Lamec mientras seguía con la mirada fija a nuestro progenitor 
—Así es 
Los ojos de mi padre refulgían de un color rojo intenso, además el ambiente demostraba su creciente molestia  
—¿No puedes sacarte al demonio de tu mente, hermano?  
—No Enoc, no puedo, siento que Naberius está involucrado más allá de lo que creía y cuando lo vi riendo mientras masacraban a mi hija siendo que él pudo liberarse en cualquier momento y salvarla, me hacen desear tenerlo en frente y darle una golpiza para luego sellarlo en lo más oscuro y profundo de las raíces de Aradia, un lugar de donde jamás logrará salir  
—No eres el único que desea ponerle las manos encima a ese demonio traicionero querido Padre, pero ahora el tema es, ¿Qué haremos con Thomas Schechter y los van Euwen? 
—¿Qué opinas hermano? 
Mi padre se giró hacia Enoc, quien se mostró sorprendido de ser consultado sobre el tema  
—Pues, yo también tengo el presentimiento que tanto Naberius y toda esta historia está más conectada de lo que pensábamos, aunque aún no logro descifrar en qué, en cuanto a los van Euwen pues se que es el deseo de mi sobrina Pandora acabar con todos ellos, pero al no contar ya con la ayuda del Marqués a su lado y volviéndose más grave la situación, pienso que uno de los miembros del consejo debe ayudarla en su travesía y de esta manera se respetará la misión de vida que se impuso a si misma y se tomará cartas en el asunto que nos compete como líderes de Aradia, que es el ajusticiamiento de aquellos quienes osaron crear nuevos vampiros, sin autorización  
Lamec tomó la palabra rápidamente  
—¡Yo me ofrezco para acompañar a Pandora en su misión y borrar a los van Euwen de la  faz de esa tierra, de una vez por todas! 
Enoc y mi padre sonrieron irónicamente  
—No esperábamos otra cosa, querido hijo  
Ambos rompieron en carcajadas al ver el rostro avergonzado de Lamec, yo solo cubrí mi boca con la mano para esconder una risita insonora, en ese momento golpearon la puerta de la habitación  
—¡Adelante Haleth! —vociferó mi padre  
El general entró con sus pesados pasos e hizo una reverencia en nuestra dirección  
—Mi señor Dissaor, traigo reportes de los lindes de Aradia, los grupos de Faniel y Niët interceptaron nuevamente transmisiones usando el Dequim 
Enoc, Lamec y mi padre cambiaron sus rostros a una gran preocupación , yo sin embargo permanecí impávida, pues no entendía a que se refería  
—¿Están seguros de aquello? —Le interrogó Lamec notoriamente consternado  
—¡Afirmativo señor!  
—Muchas gracias Haleth, por favor manténganme informado de  cualquier eventual anomalía  
—¡Por su puesto mi señor Dissaor! 
Haleth dio media vuelta y salió de la habitación, cerrando la puerta  
—Ahm, lo siento padre, pero me perdí, ¿Qué es eso llamado Dequim? 
—Me disculpo hija mía, Lamec podrá ponerte al corriente de lo que ocurre, por ahora Enoc y yo, debemos dirigirnos a hablar con los mensajeros de los lindes de nuestra dimensión y tomar algunas contra medidas  
Enoc y mi padre salieron de la habitación, siguiendo el rumbo de Haleth, no sabía que era lo que ocurría pero parecía ser grave 
—Ven Pandora, acompañarme al mar, caminaremos por la orilla y te contaré los pormenores de esta situación  
Asentí dichosa, las costas de Aradia eran mi lugar favorito, las plantas marinas brillantes y el suave golpeteo de las olas lo hacían un lugar pacífico y acogedor. Caminamos rápidamente hasta llegar allí, automáticamente bajamos el ritmo al pisar el lugar y nos permitimos avanzar relajados por la costa albina  
—Bien, ¿Recuerdas que te mencioné que alguna vez Aradia estuvo en guerra? 
—Sí, lo recuerdo perfectamente  
—Pues, la guerra que estalló en aquel entonces, fue liderada por clanes rebeldes de diferentes dimensiones, consiguieron organizarse enviando mensajes desde una dimensión a otra a través del “Dequim" 
—¿Eso es posible? 
—Así es, el Dequim es un lenguaje que ellos crearon exclusivamente para comunicarse, su composición es musical y tiene unas notas, cuyas frecuencias son capaces de atravesar la barreras entre las distintas dimensiones  
—¿Y cuál es la gravedad? 
—Que esa técnica no solo puede ser utilizada para comunicarse, también con el eco que forma entre el diferente espacio-tiempo, es posible que se convierta en dos cosas que podrían llega a ser una gran amenaza para nosotros, como un radar, mostrando la ubicación exacta de Aradia y como un arma de ataque, de entre los vampiros más de alguno tiene ciertas kinesis las cuales pueden manejar a voluntad el sonido, podrían enviar un ataque certero utilizando este método 
—Vaya, ahora comprendo la razón de su preocupación —asentí mientras observaba cuán magnífico era el paisaje de Aradia —Jamás quisiera que nada le pasara a nuestro bello hogar  
Lamec y yo nos quedamos en silencio, uno al lado del otro admirando cada textura , color y forma de la hermosa costa donde nos encontrábamos, ninguno se atrevía a romper tan bello momento, yo deseaba abrazarle y poder decirle abiertamente lo que sentía, pero…¿Y si él no me correspondía? Era verdad que su forma de ser conmigo era de ensueño, siempre tan caballero y atento, pero, ¿Qué pasaría si estaba sacando conclusiones apresuradas? Bajé la mirada, me sentía avergonzada y muchas dudas se agolpaban en mi mente 
—Siento que estás perturbada hermana, pero son tantas cosas que no logro hilar una sola, por lo que solo diré que si necesitas conversar con alguien sobre algún problema que tengas, aquí estaré siempre para ti 
Quise devolverle una sonrisa, sin embargo cerré los ojos y caí de rodillas en la blanca arena, una horrible sensación de sed vino a mí de golpe, tanto que apenas lograba mantener la consciencia y control de mis actos, apreté mi cuello con ambas manos, el dolor que venía desde mis entrañas era insoportable, como era de costumbre al abrir los ojos todo lo veía de color rojo intenso, y parecía que por la garganta pasara un horrible fuego. 
—¡Pandora! —Lamec se colocó a mi altura, acarició mi cabeza con su mano izquierda y mi rostro con la derecha —Ese encarcelamiento te privó de tu fuerza, estamos muy lejos de los portales y en  esta situación ni la sangre de 100 humanos te calmará, debe ser un alimento más potente, por favor, toma mi sangre mi amada hermana  
Como pude negué con la cabeza, el dolor era intenso pero jamás pensaría en lastimar a Lamec más de lo que por mí culpa ya había sido lastimado  
—¡Este no es momento para que te culpes por aquello, yo bajé la guardia frente a Thomas Schechter, tú no tuviste la culpa de eso! 
De los dorados ojos de mi hermano, comenzaron a caer lágrimas 
—¡Yo deseo protegerte Pandora, ahora y siempre juro que lo haré! 
Lamec convirtió en metal su mano izquierda y usando esta se abrió una herida en la muñeca derecha, de la cual comenzó a brotar el preciado líquido carmesí, mi garganta se apretó aún más, ya no podía tolerar el dolor así que no tuve otra opción, acerqué mis labios a su herida y comencé a beber su sangre, al principio con extrema cautela pero el delicioso festín fue dando paso poco a poco a la desesperación. La sangre de mi hermano era exquisita, su sabor, textura y la energía que me transmitía era tan fuerte, que por poco pierdo la noción, jamás pidió que me detuviera, simplemente me observaba con aquella ternura que solamente él poseía, cuando me sentí satisfecha me detuve y nuestros ojos se quedaron congelados en aquel momento, nuevamente nadie dijo nada, no había ya ninguna duda en mi corazón, estaba segura de lo que deseaba, alargué mis brazos y tomando su rostro entre mis manos me acerqué a él en un impulso y besé sus dulces labios. Esperaba un rechazo, por un momento Lamec abrió los ojos completamente sorprendido, pero nuevamente, jamás me detuvo, acercó su cuerpo hacia el mío y aumentó la pasión de aquello, pese a que Tom a veces dormía en mi cuarto, nunca pasó nada más allá aunque este diera pie a intentarlo, sin embargo con Lamec se dio de forma natural, el beso encendió nuestro deseo, desabroché su capa, su abrigo y camisa, él hizo lo mismo con mi ropa, sin parar de besarnos una y otra vez en un vaivén de sensaciones nuevas, suavemente me dejé caer sobre la arena, él observó mi torso desnudo con detenimiento, acercó su rostro a mi cuello y sintió mi aroma 
—Pandora, el aroma de tu cuerpo nubla mis sentidos  
Él comenzó a bajar hacia mis senos, mordisqueando mis pezones delicadamente, yo me mordía los labios, ahogando un grito de placer  
—Yo…pensé… 
No pude terminar la frase pues se me adelantó en la respuesta 
—Pensaste que los vampiros no tenían sensaciones ni podían tener relaciones, ¿cierto? 
Asentí mientras me mordía un debo para no gritar, Lamec jugaba con los suyos, deslizándolos suavemente por mi piel hacia abajo 
—Te equivocaste Pandorita, puede que muchos órganos de nuestro cuerpo “mueran" a la hora de recibir el abrazo, pero las terminaciones nerviosas no lo hacen, los vampiros de sexo masculino no necesitamos la irrigación sanguínea para tener relaciones, solo nos basta con sentir el placer para poder amar a una mujer 
Acto seguido intercambió sus dedos por su lengua, bajando lentamente hacia mi zona genital 
—Lamec, ¡Espera, no! 
Muy tarde, mis gemidos salieron sin control mientras él jugueteaba con su lengua en mi parte más íntima, me sorprendí al sentir como se humedecía allí, dándole una señal clara a mi hermano que estaba preparada para su entrada, se levantó y pasó suavemente sus dedos por la superficie, luego me los mostró empapados en mi líquido 
—Tus labios inferiores me dicen que me desean, pero te amo mi preciada Pandora, y es por esto por lo que solo proseguiré si tu boca me dice que quiere hacerlo  
La verdad odiaba que se detuviera, desconocía si me dolería siendo vampira, pero la verdad era que deseaba ser una con Lamec, con todo mi ser 
—Sí Lamec, te amo y deseo…que prosigamos  
Él sonrió, solo atiné a tocar su abdomen marcado, el físico de mi hermano era la perfección encarnada, parecía un sueño estar aquí junto a él consumando el amor que nos tenemos el uno por el otro. Fue así como en aquel lugar mi hermano y yo nos unimos en uno solo, amándonos de forma apasionada y sin frenos, ambos desnudos con el mar de testigo, grabando a fuego en nuestro ser este bello recuerdo vivido. 
No sabría decirles en tiempo humano cuanto duró, estimo que alrededor de uno a dos días, unidos sin parar, era mucho el amor y la pasión acumulada, una vez terminamos, aún nos quedamos tendidos en el suelo, yo coloqué mi cabeza en su pecho y él me rodeó con sus brazos 
—Si esto es un sueño, quisiera no despertar jamás  
—No Pandora, eso es lo maravilloso, que este amor es real, estoy contigo y tú estás conmigo, y te protegeré por siempre 
Nos besamos, sellando en ese preciso instante, una promesa de vida, que estaríamos juntos, sin ceremonias, ni testigos, simplemente con la convicción de estar con el ser amado, unidos. 



Capítulo X 
Una vez terminado el acto de nuestro amor, ambos sonreímos, tomamos nuestras ropas y nos vestimos, habíamos perdido la noción del paso del tiempo, mucho más de lo que normalmente ocurre en Aradia. Ya vestidos, Lamec me pidió que nos dirigiésemos al castillo para tener alguna noticia sobre los inquietantes acontecimientos que estaban ocurriendo en nuestro hogar, normalmente Aradia lucía desierta, las criaturas que allí residen prefieren estar cada quien en su hogar, a pesar que hay momentos en donde se hacen fiestas masivas, como el “Morwe" que es donde todos se bañan en las aguas de Aradia para renovar la fuerza de su espíritu y el “Haravié" que son las festividades de caza de los vampiros, un momento masivo donde nuestros hermanos se dirigen hacia las diferentes dimensiones y salen a saciar su sed de sangre, divididos en grupos comandados por un encargado al mando designado por el consejo, pero en esta ocasión no había ninguna razón para festejar, por lo cual se nos hizo extraño ver el frontis del castillo repleto de vampiros, algo había pasado en nuestra ausencia y era imperante averiguarlo. Cruzamos corriendo rápidamente entre las criaturas, a la distancia pudimos ver a Haleth, conversando con Faniel y Niët, Faniel era un vampiro alto, de aproximadamente un metro noventa de altura, ojos de un color verde esmeralda y cabello rubio corto, mientras que Niët era un poco más bajo, bordeando el metro ochenta y cinco de estatura, de ojos azules y cabello rojo como el fuego, ambos eran encargados de vigilar los portales e informar cualquier anomalía que pudiera verse entre dimensiones, Lamec tomó mi mano y me miró sonriendo picarescamente 
—Es hora de acelerar las cosas un poco  
Dicho esto y sin soltarme, aumentó la velocidad en al menos el triple de la normal, y en un parpadeo nos encontrábamos al lado de ellos tres 
—¿Alguna novedad? —Lamec interrumpió la plática que tenían —¿A qué se debe esta reunión masiva?  
Haleth y los otros dos, se mostraron extrañados cuando mi hermano me acercó a su cuerpo y me rodeó con su brazo por la cintura, pero no dijeron nada de aquello 
—Malas noticias —sentenció Haleth —Faniel y Niëth han vuelto a interceptar una comunicación entre dos dimensiones, fue entonces cuando decidieron investigar más y se dieron cuenta que eran muchas más de las que se habían visto jamás 
—Además logramos traducir algunas partes de aquellos mensajes y hay un nombre en particular que despertó la ira del señor Dissaor  —Niëth simplemente se unió a la conversación — Un demonio llamado Naberius, está ayudando a los clanes rebeldes y dándoles información  de Aradia 
—¡¿Naberius?! —exclamamos al unísono Lamec y yo  
—¿Están seguros? —pregunté exaltada  —¿En verdad es Naberius quién está detrás de todo esto? 

—No sabemos si detrás de todo, pero de que está filtrando información valiosa, lo hace —Niëth pasó la mirada por nosotros, con su expresión rígida— Señor Lamec, señorita Pandora, ustedes son parte importante del consejo, su padre los ha estado esperando durante un largo rato, si yo fuera ustedes, iría con él de inmediato  
Mi hermano se colocó entre el vampiro y yo, su expresión era tensa, denotando una molestia absoluta 
—Mi amada hermana y compañera Pandora, se encontraba junto a mí, y ella en su estatus de miembro del consejo tiene el mismo derecho que yo de estar presente en las reuniones y de saber todo lo que amerita, tiene el completo respaldo de nuestro padre Dissaor y su hermano Enoc, siquiera pensar en tratarla de traidora, insinuando que ha entregado información fuera de Aradia, puede tomarse como alta traición 
Los ojos de Lamec se colocaron de un rojo intenso, levantó su mano derecha y junto con esto Niëth se suspendió en aire, ante la mirada atónita de Haleth y Faniel  
—¡Bájenme! 
Comenzó a suplicar, pero Lamec no hizo caso y continuó elevándolo a la par que ahora apretaba su mano, como si estuviera aferrando algo con fuerza, grande fue mi sorpresa cuando Niëth empezó a moverse desesperadamente en el aire, mientras luchaba por quitarse una fuerza invisible del cuello  
—¡Mi señor Lamec! —Faniel se arrodilló ante mí hermano, suplicante —Por favor detenga su ataque, pido disculpas por lo que haya podido pensar mi compañero, yo mismo lo corregiré  por su error, solo por favor, perdónelo  
Mi amado bajó su brazo, haciendo que Niëth se desplomara en el suelo pesadamente, Faniel corrió a su encuentro, ayudó a levantarse al infortunado vampiro y haciendo una leve reverencia se lo llevó, lejos de nuestra presencia  
Haleth por su parte se mostró extrañado, pude sentir que deseaba preguntar que era lo que había ocurrido, pero por respeto y quizás también miedo a la reacción de Lamec, se abstuvo de hacerlo  
—Niëth pensó que tú eras sospechosa de traición, Pandora, y que deberías ser encerrada por ello 
Haleth hizo una reverencia y exclamó  
—Yo mismo me encargaré de darle un castigo propicio, ¡No debe quedar impune tamaña osadía! 
—No hace falta —acoté nerviosa —él ya recibió un castigo, además no lo culpo por pensar eso, después de todo, Naberius venía a Aradia junto a mí, es entendible que nos vincule de esa manera 
—Aunque así sea, no se deben permitir esas insinuaciones hacia nadie, Aradia es una utopía creada por nuestro padre, para que todos aquellos que nos acogemos a cumplir el mandato de Caín y a cuidar que jamás despierte de su letargo, podamos vivir en paz, pensamientos como el de Niëth solo atentan contra esto, esta fue su advertencia, si difunde este pensamiento será expulsado, él junto a todos aquellos que validen estas acusaciones  
Entristecí, no quería ser la causa de discusiones en un lugar tan hermoso y Pacífico, pero Lamec sonriéndome me dijo  
—Que no nuble tu espíritu este impasse, es ahora cuando más tranquilos debemos estar, pues tendremos que velar por la seguridad de nuestro hogar  
Asentí, lo mejor era olvidarlo e ir junto a nuestro padre de inmediato, nos despedimos de Haleth y nuevamente aceleramos el paso hacia el lugar donde él se encontraba. Al llegar, lo vimos inquieto, nos clavó una mirada severa, la cual hizo que un escalofrío recorriera nuestra espalda  
—¿Dónde estaban?, les he estado buscando desde hace un buen rato, las noticias se han vuelto horriblemente inquietantes, Aradia corre peligro de ser localizada, los Decim van en aumento, el maldito de Naberius les dio indicaciones que podrían exponernos a un ataque de los clanes rebeldes de vampiros y ustedes, ¡Deciden perderse de la comunicación del consejo en un momento tan clave! 
—Lo lamento padre, he sido yo quien a desconectado la comunicación, Pandora y yo nos hemos confesado nuestros sentimientos, estamos juntos, ella bebió mi sangre y eso nos hace uno con el otro 
Nuestro padre se mostró un poco más calmado, por unos momentos el color de sus ojos retomó su tono normal y su semblante se volvió pacífico  
—¡Que buenas nuevas me informas Lamec! —Agregó conmovido, mientras se acercaba con los brazos abiertos y nos daba un fuerte abrazo —Debo decir que pensaba que este día jamás llegaría, te veía tan indeciso sobre si confesar o no tus sentimientos a tu hermana, que llegué a pensar que nunca los dirías  
Lamec bajó la vista, abiertamente apenado 
—Fue gracias a las palabras de Enoc, que me atreví a hacerlo y ahora soy el ser más afortunado, con la mujer que más amo a mi lado, sin embargo, sombríos son los hechos que nos traen aquí y deseo ser puesto al tanto de toda la información que me he perdido en nuestra ausencia  
—De acuerdo hijo, les mostraré los pormenores a ti y a tu hermana, pues el consejo de Aradia se encuentra por fin reunido, por favor, Pandora, Lamec y Enoc, tomen a siento alrededor de esta mesa  
Súbitamente cambiamos todos de habitación, ahora nos encontrábamos en una que parecía acondicionada para reuniones, de las paredes grisáceas brotaban pequeñas antorchas, varias sillas estaban dispuestas alrededor de una mesa larga y rectangular, sobre esta descansaban un montón de papeles y libros, y a su lado lo que parecía un tintero en donde reposaba una larga pluma, una ves nos sentamos, comenzaron a llegar otros vampiros, Haleth estaba entre ellos, a su lado se encontraba Robert, otro general cuya tarea era vigilar el plano entre realidades donde normalmente deambulaban otros humanos con capacidades especiales desarrolladas y alguna que otra monstruosidad, manteniendo la existencia de los seres no humanos en secreto.  
Una vez que ya no quedaban lugares en donde sentarse, mi padre se paró en el extremo de la mesa, y con voz autoritaria exclamó: 
“Mis queridos generales, centinelas y protectores de Aradia, es para mí un privilegio tenerlos a todos una vez más sentados a la mesa, pero lamentablemente, esta vez no los convoco para comunicarles buenas nuevas, puesto que estamos en una crisis que va más allá de todas las que alguna vez discutimos en esta misma sala. El anonimato de nuestro amado hogar se está viendo peligrado por causa de un demonio llamado Naberius, el cual ha estado pasando información sobre nosotros y nuestra tierra a los clanes rebeldes, que habitan en las distintas dimensiones y espacio-tiempos que hay en este vasto universo. Sin embargo, nosotros tampoco nos encontramos a ciegas ni mucho menos desprotegidos, los equipos que vigilan los lindes de Aradia a cargo de Faniel y Niëth, han logrado descifrar varios de estos mensajes codificados y entre ellos nos hemos enterado de varias cosas 
-No saben realmente dónde se encuentra Aradia ni como ingresar a ella  
-Se encuentran dispersos y aún sin una forma real de poder agruparse  
-Su cabeza es “Roger van Euwen”, un dhampir que ha roto de todas las formas posibles, los mandamientos de Caín, los cuales imperiosamnte resguardamos  
Esto significa que sabemos quien es la cabeza de esta reunión y que está usando a su peón Naberius, para investigar sobre nosotros y la forma de acceder a Aradia” 
Cuando mi padre mencionó a Roger van Euwen, Lamec y yo quedamos notablemente asombrados, jamás pensamos que esto podría estar tras los malignos planes de aquella maldita familia. Los demás vampiros parecían desconocer mi vínculo con ellos, algo que agradezco bastante, después del incidente que hubo con Niëth, no quisiera ser la causa de más peleas dentro del bando aliado. 
Mi padre prosiguió: 
“Es por esto que los he llamado, para idear contramedidas y repeler cualquier intento de rastreo y/o ataque hacia nuestro hogar, escucho sugerencias” 
El vampiro llamado Robert levantó la mano, pidiendo la palabra  
—Pienso que, si ya sabemos quién es la cabeza, está hilando los planes y dirigiendo a los rebeldes, deberíamos ir y atacar todos de inmediato, cortamos la cabeza y terminamos con su nexo 
Haleth tomó la palabra de forma intempestiva  
—Me perdonarás querido Robert, pero no estoy de acuerdo contigo, he visto lo que se me ha mostrado de la familia van Euwen, su líder Roger, aún siendo un dhampir, tiene una inteligencia abismal, es capaz de prever los distintos escenarios posibles y obviamente si me atrevo a pensar como él, lo primero que barajará es que al enterarnos, lo atacaremos por lo que dudo que esté en su lugar habitual de residencia y de ser así, probablemente esté protegido, los rebeldes, por lo que hemos estado investigando, nos superan en número y por mucho, atacarlos sabiendo que probablemente nos estén esperando trampas y un contraataque de su parte, sería sobreexponernos a la merma de nuestros propios números, algo que en el escenario actual, no podemos darnos el lujo  
Robert dirigió la mirada hacia mi padre, esperando su respuesta, mientras tanto él meditaba sobre los argumentos y conversaba con Enoc quien se encontraba de pie a su lado, por último le asintió y sentándose de frente a todos nuevamente respondió 
—Tu idea es muy buena Robert, yo mismo llegué a pensar en esa posibilidad, pero afortunadamente tenemos a las voces de la calma, Haleth y a mi hermano Enoc, para hacernos ver, que nuestras bajas por rebeldía y asesinatos cometidos por los cazadores de la maldita organización “Alas de Luz", han sido considerables y aunque es obvio que yo encabezaría con mi propio ser esa batalla, no puedo asegurar que las bajas serían mínimas y es verdad que tampoco deseo ver morir a ninguno de los habitantes de este lugar, Aradia somos nosotros, sus habitantes, podríamos crear una nueva ciudad en otro punto del tiempo y seguiríamos en Aradia, porque nosotros portamos su existencia, ¿Defender  esta dimensión a costa de sus vidas? No me parece justo, ni sensato, esta existe para la vida tranquila de nuestro pueblo, y es eso lo que me interesa proteger  
Lamec aplaudió vigorosamente, poco a poco se le fueron uniendo todos los presentes en la sala, yo misma también lo hice, mi padre tenía razón, Aradia es hermosa, pero, no seria aquella bella tierra, sin su gente. Lamec pidió la palabra y se puso de pie 
—Un hermoso discurso sin duda padre, y es que tomando en cuenta lo que usted menciona, las capacidades que poseemos, tanto de número como de habilidades, considero que lo mejor que podemos hacer, es blindar el campo de protección de Aradia con un nuevo hechizo, doblar la guardia e intentar interceptar el máximo posible de mensajes, impidiendo de esta forma que lleguen a su destino, pero debemos tener muchísima cautela, Haleth ya nos ha advertido de la forma que piensa Roger van Euwen, es probable que varios mensajes sean falsos, enviados para confundir y en ese caso habrá que usar un criterio perfeccionista a la hora de discernir cuáles son reales y cuáles no 
—¡Estoy de acuerdo contigo Lamec!, bueno, en casi todo —Una mujer alta de tez morena, figura curvilínea y ojos color índigo, se encontraba de pie en el marco de la entrada, vestía completamente de dorado, con un vestido que se le ajustaba al cuerpo, sus largos cabellos caían como cascadas sobre sus pechos, debo admitirlo, era hermosa— Ustedes los vampiros son muy herméticos, Aradia, la dimensión que levantamos Enoc, Dissaor yo, se encuentra en ataque, pero ustedes llaman a reunirse solo a los de su especie, siendo que esto nos concierne a todos 
—Aradia, diosa madre, tan deslumbrante como siempre—Mi padre se evaporó en una nube oscura y apareció al lado de la misteriosa dama, acto seguido tomó la mano derecha de esta y haciendo una leve reverencia la besó —Lamento no haberte convocado, pero hace tanto que no aparecías por este lugar, que pensé que ya no te interesaban los asuntos de este “mundano" lugar  
—Ja, ja, ja, puedo leer entre líneas, el sarcasmo que destilan tus palabras, pero si he venido es por algo y es que aquí no solo moran aquellos vampiros que desean vivir e paz, Bien conviven con criaturas de la oscuridad y ellos son mi responsabilidad 
—Pues bien, ¿Qué es lo que puedes aportar en esta situación?  
—Estoy conectada con los hijos de la oscuridad, los brujos de la noche, las gorgonas y todos los seres que manejan una amplia conexión con la magia, crearán un sigilo de protección alrededor de Aradia, la volveremos permeable, los sonidos que vengan desde el exterior no rebotaran en nosotros, sino que la atravesarán, haciendo que no pueda ser detectada de esa manera 
En todo el tiempo que he estado en esta tierra, jamás había visto a esta mujer y ahora se aparece en esta reunión sin más, y comienza a opinar a diestra y siniestra, confieso que me sentí extraña  
—Muy buena idea, Aradia —Lamec se levantó de su asiento e hizo una reverencia hacia la mujer —no esperaba menos de la diosa madre de la oscuridad  
La mujer se acercó hacia él, sin guardar las distancias y haciendo que mi incomodidad hacia ella se incrementara con creces, pues esta apegó su cuerpo al de Lamec, y jugueteó con su dedo índice de la mano derecha, sobre el rostro de mi amado, y pese a que este se mostraba enormemente incomodo, no la detuvo para nada. 
Nuestro padre Dissaor, emitió un carraspeo,  para llamar la atención de todos y le dirigió a la mujer una mirada seria y llena de reproche  
—Si vas a ser partícipe de esta reunión, permanece sentada y habla cuando te sea permitido, no por ser quien eres, tienes derecho a interrumpimos de esta manera  
—Lo aguafiestas lo has de haber sacado de tu padre 
Sentenció la mujer, mientras se acercaba a un asiento en la esquina de la habitación, sentándose rígida en esta. Ante esta frase, nuestro progenitor le clavó una mirada aún más fría y llena de desprecio, luego le pidió a Lamec que volviera a tomar asiento y continuó la reunión, les daré un resumen, ya que esta fue extensa en si misma  
1. Las criaturas de la oscuridad ayudarán a Aradia, haciendo que los sonidos no reboten en la barrera 
2. Se doblará la guardia en las fronteras  
3. Se intentará agilizar la interpretación de cada mensaje interceptado, con el propósito de devolver uno completamente diferente y así causar confusión entre los enemigos  
4. La salida y acceso a Aradia se disminuirá a un solo túnel, hasta que se termine el problema con los renegados  
5. Se enviarán centinelas en busca de los van Euwen, y con énfasis en Roger van Euwen  
La reunión estaba terminando cuando Faniel apareció en la sala, notoriamente consternado 
—¡Mi señor Dissaor, alguien está intentando abrir una brecha en el campo que protege Aradia! 
Haleth se levantó de inmediato de su asiento, y Robert siguió de forma rauda sus pasos 
—¡Guíanos! —gritó Haleth, tras de él ya estábamos mi padre, Lamec y yo —¡No hay tiempo que perder! 
Faniel usó su habilidad de teletransportación, y nos envolvió en una burbuja dorada a todos para llevarnos junto a él, la esférica forma se abrió camino a través de paredes, árboles, plantas e incluso otras criaturas, atravesándolas sin mayor dificultad  
—¿Cómo fue que descubriste esto? 
Preguntó mi padre, visiblemente perturbado 
—Regresaba con Niëth a su morada, cuando vi algo que parecía un hilo violeta, que rasgaba la existencia misma, era como si la dimensión de Aradia fuera un papel, y este hubiera sido roto en una parte aleatoria de la hoja  
No tardamos en llegar al lugar, se veía exactamente como Faniel lo describía, como si la realidad estuviera siendo quebrada o rota, desde alguna parte  
Mi padre lo observó unos segundos, luego de eso, su orden fue tajante  
—¡Vayan tras de quien sea responsable de este crimen!, y si es necesario, ¡Asesínenle! 
Lamec, Haleth, Faniel, Robert y otros dos vampiros saltaron hacia la grieta, dispuestos a defender nuestro hogar, sin saber si quiera si aquello lo producía un solo vampiro o si quiera, si en realidad….lo producía un vampiro. 
 




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