Capitulo 5

Un nuevo día

Todos son despertados por gritos que provienen de afuera, se alarmaron por aquello y rápidamente investigan de que se trataba, al mirar los alrededores se dan cuenta que es una joven de aproximadamente 18 a 20 años, que está tratando de entrar en el conjunto cerrado que se encuentra cerca en la zona.

— ¡Ayúdenme!  ¡Auxilio! —Gritaba, — ¡Abran por favor! —Estaba desesperada.

Johan apunta con el rifle y con la mira se da cuenta que en el horizonte se ven figuras humanas, al observar detenidamente se da cuenta que son tres zombies los que vienen…

Johan— Andrés vaya por ella, vienen unos zombies, tratare de matarlos…

Andrés— Felipe, Bryan, vamos por ella.

Salen rápidamente a ayudarla.

Bryan— ¡Hey! aquí estamos —hace señas mientras se acercan a ella.

Johan se dispone a disparar, pero se da cuenta que se van asomando más siluetas hasta perder la cuenta…

Johan— Zaira dígales que se escondan allá, ¡es una oleada!...

Zaira se acerca a la reja y comienza a gritarles

Zaira— ¡Felipe! ¡Andrés! ¡Bryan! Escóndanse rápido ¡es una oleada!

Ellos al escucharla se sorprenden y comienzan a mirar donde resguardarse

Felipe— Rápido subamos la reja del conjunto, aquí no podrán alcanzarnos.

Joven— ¿Quiénes son ustedes?

Bryan— Oye si quieres seguir viva, solo te diré que te apresures a subir esa reja ¡ahora!

Se suben y la ayudan a pasar la reja, Zaira cierra las puertas para refugiarse también… la oleada no tarda mucho en llegar al punto en donde se encontraban y comienzan a acumularse en la entrada del conjunto.

Felipe— Esto no es bueno…

Andrés— Esa es nuestra única salida, a menos que trepemos y salgamos por otro lado... 

Bryan— No se ve más salidas... estamos encerrados...

Andrés—debemos pensar en algo pronto, pero habrá que esperar, si estos no se van estaremos en serios problemas, alejémonos de aquí, busquemos donde escondernos...

Comienzan a mirar a su alrededor

Bryan— Oigan me pareció ver una niña es esa ventana…

Felipe— ¿Una qué?

Bryan— Una niña...

Felipe— ¡¿Donde?! No sea una zombie y nos sorprenda

Andrés— Es verdad, revisemos el lugar, no sea que aquí estemos también en peligro.

Felipe— Entonces dividámonos y si alguien ve algo que llame a los demás.

Joven— ¿no me dejaran sola aquí?

Todos se miran entre si y Felipe mira a Andrés con mirada maliciosa…

Felipe— Bien pueda, Andrés la cuidara… —suelta una leve sonrisa.

Andrés queda pensativo y en silencio.

Joven— y…  ¿Quién es Andrés?

Todos ríen…

Bryan— Verdad que no nos conocemos… mi nombre es Bryan…

Felipe— yo Felipe...

Andrés— y yo soy…

Ella lo interrumpe

Joven— Andrés, el que me cuidara… —sonríe.

Andrés— ¿y tú eres?...

Joven— mi nombre es Camila…

Bryan— yo iré a revisar las casas de allá y en unos 15 minutos nos reunimos aquí de nuevo para mirar que hacemos…

Felipe— yo iré por este lado, buscare algo con que defendernos.

Andrés— Buscare comida, no creo salgamos de aqui tan pronto...

Camila— Si, yo ayudare con ello...

Todos se dividen y empiezan a entrar en las casas que son accesibles, la mayoría de ellas están cerradas y no hay manera que algo entre o salga de ellas, pasados los minutos vuelven a reunirse…

Felipe— No logre entrar a ninguna casa, todas estaban cerradas… la unica forma seria romper las ventanas.

Andrés— eso mismo pasó con nosotros y las ventanas también estaban cerradas, solo hubo una a la que logre entrar, pero se veía que los que vivían allí salieron rápidamente y estaba todo desordenado… pero no había nada raro…

Camila— Miren ¿esa no es una niña? —Señala con el dedo —, En esa ventana…

Todos ven a la niña y quedan pasmados, sorprendidos…

Bryan— Esa fue la que vi hace rato, ¿nadie reviso esa casa?

Felipe— Entonces vamos allá…

Todos van a la casa, estaba cerrada la puerta y las ventanas trabadas.

Bryan— Voy a romper la ventana, háganse a un lado

Todos se retiran, toma una piedra del suelo cerca de allí y la lanza rompiendo una de las ventanas.

Andrés— cuidado con los vidrios.

Felipe se quita la camisa y se la entrega a Bryan