Creía que todo había pasado, pero estaba equivocada.
Un fuerte estruendo sonó desde la cocina y aunque sentí miedo, decidí que lo mejor sería ir al lugar y enfrentarlo.
ㅡ¿Quién anda ahí? ㅡ Exigí saber empleando voz firme, a pesar de sentirme asustada.
En la cocina la luz continuaba apagada. Nuevamente sentí el frio, pero no me dejé seguir intimidando.
Al encenderse la luz liberé un grito, yo no había prendido las luces.
Intenté calmar el ritmo de mis latidos una vez reparé en qué estaba ocurriendo realmente. No estaba sola, eso ya podía comprobarlo y afortunadamente no estaba con alguien que pudiera lastimarme, en teoría.
ㅡHunter...ㅡsusurré llamando su atención e intentando controlar mi respiración irregularㅡ Hunter... Me has asustado mucho, ¿qué pasa...? ¿por qué ahora estás aquí? ¿por qué te fuiste...?
Él bajó la mirada, de pronto tuve la impresión de que sus ojos habían desaparecido, pero eso no podía ser. Algo en mí debía estar fallando.
ㅡYo no soy Hunter...ㅡ¡claro que no! Esa no era la voz de Hunterㅡ A mí llámame Benㅡa medida que hablaba, su cuerpo comenzaba a desmoronarseㅡ Y tú sólo puedes amarme a mí...ㅡ Fue lo último que alcanzó a decir antes de volverse una masa negra y viscosa.
No esperé más y pronto salí de la cocina, pero al correr en dirección a la sala para alcanzar la salida algo acabó haciéndome tropezar.
Al cabo de un segundo las luces en la sala se apagaron y me vi asustada el oír ruidos de objetos cayéndose y quebrándose al estrellarse contra el suelo.
ㅡVoy a formar parte de tus recuerdosㅡoí nuevamente aquella escalofriante voz, pero no conseguí ver qué era lo que hablaba aunque sabía que se trataba de aquella cosa sin forma exacta.
Algo golpeó contra mí y seguido a eso sentí muchos golpeas más. Algunas zonas me ardían y sentí líquido correr por aquellas partes. Sangre, supuse.
ㅡFormaré pate de tu pasado, presente y seré tu futuroㅡ su voz era rasposa y me atemorizaba. Algo en él rozó mi mejilla y cuando lo hizo, sentí un horrible dolor, como si acaso su roce me pudiera quemar la piel.
ㅡ¡Déjame...! ㅡexclamé moviéndome torpemente en el piso, todavía habían cosas cayendo en mi dirección, intentando hacerme daño.
ㅡNo...ㅡ escuché su voz todavía más cerca, como si acaso su rostro estuviera pegado al mío y seguido a eso un olor desagradable se esparció a mi alrededor.ㅡJamás me marcharé.
"<<Tú tienes que matarla>> Me ha ordenado Ben, mi mejor y único amigo. Pero yo niego. No puedo, yo no quiero matar a nadie. Ben dice que sólo tengo que confiar en él, pero me asusta, su cara es muy fea... Él dice que no me hará daño, pero siempre que no quiero hacer lo que me pide, él me lastima."
Fue como tener un extraño vistazo al pasado, me vi a mí misma de pequeña, pero no podía ser cierto. Eso jamás había pasado.
"Maté a mamá. Yo no quería... yo no quería hacerlo. Ben me obligó."
No entendía de donde salía todo eso. Sentía mi cuerpo pesado y estaba cansada, no dejaba de tener esos raros recuerdos que no estaba segura de que me pertenecieran, pero quizás sí era cierto. No estaba segura de nada, aunque de algún modo todos esos recuerdos que no creía eran míos acabaron convenciéndome.
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ㅡEstá bien, Adam, ya está reaccionando.
Escuché murmullos a mi alrededor, apenas estaba despertando, o eso parecía.
ㅡLuce tan débil... ㅡsentí un suave toque a mi rostro, recordé entonces los últimos acontecimientos y totalmente asustada abrí los ojos intentando despertar e incorporarme.
ㅡ¡Derek! ㅡ exclamé al verle frente a mí. Me encontraba recostada en mi propia cama y con algo menos de ropa encima. Mis brazos y muñecas estaban vendados de una manera bastante bizarra, pero parecían estar bien.
ㅡTranquila, por favor no te muevas que justamente ahora no te encuentras del todo bien.
ㅡ¿Cómo llegué aquí? ㅡLos recuerdos mezclados empezaron a atacarme, no sabía qué había pasado exactamente.ㅡ ¿Qué está pasando?
ㅡCalma, nena... primero revisemos tu estado.
De pronto Adam apareció en mi campo de visión, luciendo bastante preocupado, se apresuró a acercarse a mí y sentándose en un hueco de la cama tomó una de mis manos y la cubrió con una de las suyas.ㅡ ¿Te sientes bien, amor? Digo, Abby... Perdona.
ㅡOh... Sí, estoy bien. Gracias.
Pasan unos segundos en los que nuestras miradas se conectan. La preocupación que sus ojos reflejaban me provoca un sentimiento extraño. Finalmente nuestra rara conexión finalizó con Derek haciendo sonar su garganta para llamar nuestra atención.
ㅡCuéntanos que fue lo que pasó, Abby, por favor.
Después de contarle a los chicos lo poco y el enredo de recuerdos que tengo ellos parecen estar conformes, pero no así yo. Hay muchas cosas que no tengo claras y que me gustaría poder preguntarles.