꧁ Adalyn ꧂
—No puedo estar seguro aún, pero cabe la posibilidad debido al dolor que ha descrito que usted ha sufrido principio de aborto… —Esa palabra me deja helada.
Miró al doctor, siento mi pecho oprimirse.
—Mi bebé —susurró.
—Tranquilícese por favor, además su presión está demasiado elevada, le haré una ecografía para ver en qué estado está el bebé —mi corazón late desbocado.
Mi bebé no tiene culpa de nada, no quiero perderlo como sea él está aquí, llego a mi vida para que no me sienta tan sola, quiero pensar eso.
—Mandaré que te tomen unas muestras, por ahora te vas a mantener canalizada —Continúa. —mantente relajada de acuerdo ya vengo a hacerte el ultrasonido —el doctor sale de la habitación.
No debí alterarme por nada, debí dejar que Celineth hiciera de la suya en mi matrimonio falso.
Miro a mi alrededor siento que todo me da vuelta. Cierro mis ojos y suelto un suspiro, debo mantener la calma y relajarme, por mi bien y el de mi bebe.
Escucho la puerta abrirse, abro los ojos, él doctor entra con un carrito y detrás de él viene Giovanni y una enfermera.
¿Qué hace él aquí? Lo miro, camina hacia mí, se inclina y deposita un beso en mi frente.
—Sentirás algo frío en tu vientre —anuncia el doctor sentándose, lleva la botella con lo que sea eso y lo coloca en mi vientre, el líquido pegajoso me hace estremecer.
Empieza a mover el aparato por mi vientre, Giovanni toma mi mano, lo miró pero el permanece serio como siempre.
—Es escurridizo, aquí estás, ¿has tenido sangrado en estos días? —niego.
—¿Pasa algo con mi bebé, doctor? —preguntó.
El sonido de un corazón latiendo inunda la habitación, miro a Giovanni, en su rostro se puede percibir una leve sonrisa.
—Su corazón está alterado, pero se mantiene en el ritmo estipulado para un feto de tres meses.
—¿Va a estar bien, verdad?
—Sí, te dejaré puesto el ecógrafo para monitorear al feto, de acuerdo. La enfermera te tomará las muestras —De sólo ver la aguja quedó fría, cierro mis ojos para no ver.
Aprieto mis labios al igual que la mano de Giovanni.
—Listo —informa la enfermera.
—¿Por qué no me dijiste que te sentías mal? —dice Giovanni al salir la enfermera.
—No pensé que era tan grave.
—Se trata de tu hijo Adalyn —me regaña. —¿fue por la boda verdad?
—No, fue por verte con Celineth, ¡trató de besarte! —me mira.
—¿Cómo lo sabes?
—Fui a hablar contigo y me encontré con esa escena tan indeseada, te imaginas si hubiera sido la abuela, ¿qué crees que hubiera pensado ella?
—No es culpa mía, he tratado de alejar a tu hermana desde que la conocí, pero ella sigue ahí insistente.
—Y se que estará detrás de ti más seguido, como si ya no tuviera bastante ahora tengo que lidiar con ella —Se que no dejará a Giovanni en paz y menos ahora que nos casamos.
No se que es lo que tiene en mi contra, todo lo que tengo lo quiere, desde pequeña ha sido así. Inhalo y exhalo no quiero volver a alterarme.
—Conmigo se equivoca, si sigue con su jueguito no voy a tener compasión, por más que sea tu hermana y aprecie a tu padre no voy a ser dócil con ella.
—No me interesa como la trates, lo único que quiero es que la mantengas lejos de ti.
—Ya no te preocupes, tu honor como mi esposa estará intacto —sonrió.
—Te lo agradezco —digo no muy convencida. —lo malo es que no tendremos luna de miel en el mediterraneo, ahora tendremos luna miel en el hospital —suelto un suspiro.
—Si quieres luna de miel en el mediterráneo podremos tenerla después —me tenso al escucharlo decir esas palabras.
—¿Qué? —lo miro espantada. —solo lo digo por molestar.
—Lo sé Adalyn, pero tu abuela se enojara si no te llevó de luna de miel.
—No le des importancia.
—Como digas —toma asiento en el pequeño sillón que está al lado de la cama.
No decimos más nada, solo quiero calmarme para que mi bebe se calme, todo esto pasó por mi culpa. Cierro mis ojos, no escucho nada más que el latir del corazón de mi hijo.
❀✿❃✿❃✿❀
—Adalyn —escucho a lo lejos, abro mis ojos. —disculpa que te despierte, te comunico que te quedaras esta noche bajo observación, todo está bien pero si me preocupa tu presión.
—Aun sigue elevada, por eso mi bebe está alterado.
—Sí, algunos dicen que eso no influye pero es todo lo contrario, la alimentación, el estrés todo eso influye, así que debes cuidar más de ti por el bien de tu bebé y de ti.
—Se lo agradezco mucho doctor.
—Si la presión se regula de aquí a mañana te podrás ir a casa pero eso sí con algunos cuidados.
—Está bien doctor.
—Tu familia está afuera, te daré cinco minutos con ellos —miro a Giovanni y él a mí.
—Te daré un momento a solas con ellos.
—Ni se te ocurra —lo miró severamente.
—¡Princesa como estas! ¿Cómo te sientes? —pregunta papá.
—Estoy bien papá.
—¡Que susto nos pegaste niña! —exclama la abuela.
—Lo siento…
—Nada de lo siento princesa, lo importante es que estés bien y tu bebé también —miro a Giovanni.
—Sí —acarició mi vientre.
—Está todo bien.
—Sí Gabriel, todo está bien, solo fue un susto