✰✰ CAPÍTULO 26 ✰ Hablando de nuestro pasado✰

✰✰ Giovanni ✰✰

El beso es muy diferente al del día de la boda, es un beso electrizante lleno de sentimiento, siento que remueve todos aquellas emociones y sensaciones que sentía que estaban muertas. La pegó más a mi cuerpo y la beso con ansiedad.

Al separarme de ella pego mi frente a la suya.

—¡Adalyn! —susurro sin aliento sobre sus labios.

—¡Gio! —susurra.

Mi cuerpo se estremece al escucharla llamarme así, vuelvo a tomar sus labios, son una tentación que ya no puedo resistir más y es que no quiero resistir más.

Saboreo sus labios como si fuera el néctar más delicioso que jamás haya probado.

—Giovanni —dice al separarnos. —Esto está mal —alega, su cuerpo está tenso.

Sigue acariciando mi espalda baja.

—¿Por qué está mal? —preguntó.

—Esta mal Giovanni —intenta separarse de mí.

La atraigo hacia mí y la miro a los ojos.

—Dame un motivo y no vuelvo a besarte. 

—No tengo ningún motivo, y no debe haber, solo digo que está mal. 

—Sí no me dices algo coherente no voy a dejar de besar tus labios —tomó su barbilla. 

Acercó mis labios a los suyos, espero alguna bofetada de su parte, pero no llega, no hay ningún impedimento para que no continúe con el beso, es más su labios se mueven al compás con los míos.

—Sí hay algo que nos impide besarnos dímelo —la miro a los ojos. —Se sincera conmigo, es por el padre de tu hija —niega. —¿Entonces dime porque está mal no lo entiendo? 

—Tenemos un convenio —sonrió y niego. 

—Adalyn, ese no es el problema, no quieras alegar algo que no es, nuestro convenio no tiene nada que ver.

—Quiero seguir con el paseo por favor —dice evadiendo mi comentario.

—Está bien como desees —su cuerpo sigue tenso. 

Se que no es por nuestro trato, hay algo más, tal vez sea lo mismo que yo siento, temor, también tengo miedo a sentir algo más por ella. 

Tomo su mano y empezamos con el recorrido por el parque, no pienso soltarla en ningún momento, ella no objeta, solo camina a mi lado en silencio, algunas veces aprieta mi mano, pero es por lo tensa qué está. 

❀✿❃✿❃✿❀

Regresamos a casa me siento en el sillón y ella sube a la habitación, suelto un suspiro pesado, tal vez debí reprimir mi deseo de besarla, debí apartar todo sentimiento que estaba despertando en mí, debí resistir más. Me levantó y subo las gradas, desde hoy voy a reprimir todo sentimiento que nazca por Adalyn Maxwell.

Me cambio y me siento en la cama, tocan la puerta de mi habitación, levantó la vista hacia ella. Adalyn está de pie.

—Lo siento mucho Gio, si hay algo, pero no es por ningún hombre y mucho menos es por el padre de mi hijo.

—Ya no importa Adalyn, disculpa por dejarme llevar y ser impulsivo, descansa —digo poniéndome de pie.

—No me voy a ir hasta que aclaremos nuestra diferencia —objeta cruzándose de brazo. 

—Quieres que te escuche, esta bien, te voy a escuchar.

—Sabes que olvídalo, no mereces una explicación, eres un terco y un.. 

Se gira para marcharse, camino hacia a ella y la tomó de la mano.

—No te vas a ir hasta que digas lo que venias a decir.

—¡Oblígame! —me reta con la mirada.

—Eso quieres, te voy a besar y no dejaré de hacerlo hasta que saques eso lo que llevas atorado en tu pecho.

—Quiero ver que lo intentes —me está retando.

La tomó de la cintura y con cuidado la pegó a mi cuerpo, acercó mis labios a los suyos.

—Deseas que lo haga, verdad —digo sin separar mis labios.

—No lo..

No la dejó continuar, empiezo a mover mis labios de forma agresiva, sus movimientos también son agresivos, una corriente recorre mi cuerpo, tomó su labio inferior y la muerdo, vuelvo a besarla de la misma manera, en ningún momento ella ha hecho el intento de detenerme. Me separo de ella, su respiración es agitada.

—Dime que es Adalyn —me mira a los ojos.

—Tengo miedo, tengo miedo a sentir, tengo miedo a sufrir —la abrazo.

—Crees que yo no tengo miedo —le digo, la guió hacia la cama y la siento. —yo también tengo miedo a sentir, a enamorarme, a abrir mi corazón y terminar rotó —me inclino. —Sé lo que se siente amar a alguien y terminar desecho por dentro, yo también lo viví una vez, tal vez no sean casos similares, pero estoy seguro que nuestras experiencias son simultáneas —tomo sus manos. —Si quieres contarmelo yo te escucharé, pero si no está bien, yo entiendo.

—Es difícil hablar de ello, abrir esas viejas heridas —algunas lágrimas rueda por su  mejilla. —Pero lo más difícil es volver a recordar que tu propia sangre te traicionó —la miró. 

—No entiendo.

—Hace unos años salía con un chico, fue mi primer amor como le dicen algunos, fue mi todo, pero alguien se interpuso entre nosotros y no quedo en paz hasta acabar con lo nuestro, tal vez es como dicen y él nunca me amó como decía. Termine desecha porque yo si lo amaba, me tomó meses volver ser la Adalyn que era antes, pero lo logre —suelta un suspiro. —Desde ese entonces tomé la decisión de no volver a enamorarme, ni sentir nada por nadie, no quiero volver a pasar por ese sufrimiento. Si seguimos así esto va terminar mal Giovanni, para los dos terminará mal. 

—¿Por qué terminará mal? Somos dos adultos, no somos adolescentes.

—Es que no lo estás viendo verdad, primero vienen los besos, luego sin pensarlo terminaremos enamorados, luego algo ocurrirá y nos llevará a separarnos —niego.