Hay historias que nacen en medio del ruido.
Y otras, que florecen en el más profundo silencio.
Ella no sabía que aquel viaje cambiaría su vida.
Él no imaginaba que su mundo —perfectamente controlado— estaba a punto de temblar.
Ninguno buscaba al otro.
Y sin embargo…
El destino ya había escrito ese encuentro mucho antes de que sus miradas se cruzaran.
Entre luces de ciudad, secretos que duelen y oraciones susurradas al cielo, dos almas tan distintas encontrarán algo que no sabían que necesitaban.
Algo que no se puede explicar.
Solo sentir.