<<Cada momento se sueña y se vive como si no hubiera un mañana, como si el pasado no existiera ya que un día no se sabe si podrás dar los Buenos días>>
Pasaron meses desde que decidí alejarme de todo, como si los demás no existieran, como si ella no existiera...
La veía de lejos, cada vez más decaída, más pálida y sin vida, quería acercarme pero no sabía si era lo mejor, porque no quería que cargará conmigo y mis problemas, no quería ser una carga para nadie.
Hasta que un día me atreví a buscarla, estaba algo lejos, pero eso no evito que su mirada se encontrará con la mía y es que sabía que si miraba a lo lejos podría encontrarla y así sonreír sin problema, me acerque lento como si temiera que se fuera a ir corriendo; ella me sonrió con ternura y sin poderlo evitar terminamos abrazadas por primera vez desde que la había conocido ella estaba llena de lágrimas mostrando lo rota que estaba y me destrozó su dolor, su agonía...
Me había dicho que tal vez un día no íbamos a volver a vernos y que si era así sería nuestro último día. Tristemente sus palabras se cumplieron unos meses después, la vi irse, vi como quedaba sin vida antes mis ojos y desde ese momento me prometí que las cosas cambiarían, por ella, por mí y por todo.
Quiero abrir los ojos un día y poder sentirme diferente.