<<Valdrá la pena mil veces haber sufrido si al otro día se decide volver a levantarse y sacar una nueva sonrisa y, un nuevo comienzo>>
Después de tanto, al fin había tomado la valentía de comenzar en otro lugar y ser otra persona; lo había prometido, se lo había prometido y ella nunca rompía sus promesas.
Ella se iría; Scarlett lo había decidido y ahí estaba, sentada, esperando con un boleto en mano, uno que sería su viaje a un gran cambio, a un nuevo mundo y a sus propias maneras de sanarse, porque nunca había tenido tanta seguridad como ahora, necesitaba superar todo aunque ella sabía que el dolor de haber perdido a la única persona especial en su vida nunca se iría pero podía superarlo, podía disminuirlo.
Lo único que necesitaba Scarlett era alejarse de todo, pero alejarse de verdad y florecer. Necesitaba emprender sus alas y volar, como toda una luchadora, con toda valentía y como una gran guerrera.
Ella no lo sabía pero Celeste siempre tuvo fe en que haría grandes cosas, cosas que ella nunca pudo hacer; nadie pudo ni podría igualar la admiración y la fe que la chica de mirada azulada había tenido en Scarlett hasta su último respiro. Por eso esto solo era un comienzo.
Una nueva historia, nueva vida, pensamientos y emociones por los cuales pasaría la chica de un corazón roto.
<<Rendirse es solo una opción que muchos tendemos a elegir. Pero podemos buscar lo que perdemos, reparar lo que se rompe y esforzarse por lo que se necesita ya que uno con el corazón curado alza el vuelo. >>