Capitulo 9: Ethan

Al llegar a la empresa quería no saber nada de Xenia pero fue la primera que me encontré en mi camino, ella me sonrió e hice lo mismo ya que no tiene la culpa, tengo que hablar con ella ante todo lo que pasó.

-Te veo en mi oficina – digo pasando a su lado, entro a mi oficina y hago lo que debo de hacer, trabajar por la empresa.

De repente la puerta la abre Xenia, en seguida la invito que se siente, cuando lo hace, sus piernas se dan a reconocer por su minifalda, en seguida doy mi vista a otro lado.

-Tenemos que aclarar este asunto Xenia – digo cruzándome de brazos – solo déjame decirte que nunca pensé que esto llegara a pasar.

-Si – dice mirando el suelo, me siento indignado – si hace esto para que no diga nada, no se preocupe.

-¿Puedo confiar en ti? – Pregunto enarcando una ceja, ella asiente algo dudosa – espero que sea Asi Xenia, te lo agradecería, no sé cómo lo tomes pero esto fue un error.

Xenia baja de nuevo la mirada con una mueca, sin duda se sintió pero no quiero que tome ilusiones de esto, solo fue una noche que no la disfrute porque ella no es Lucy, aunque no recuerdo nada.

-Entiendo Ethan – al fin pronuncia unas palabras, se levanta del asiento – yo no lo tomo como un error.

Dice antes de dirigirse a la puerta y cerrar, no entendí lo que quiso dar a entender, lo único que sé que saldré temprano de aquí para estar con Lucy, hoy iría con mi madre, Sofía y la señora White a comprar el vestido.

Me la imagino vestida de blanco con su cabello negro cayendo en su espalda, en sus manos un ramo de girasoles, su flor favorita.

Esos pensamientos hermosos se ven interrumpidos por mi celular que no deja de sonar, en seguida lo tomo y me doy cuenta que es Víctor, en seguida le contesto.

-Hola Víctor, ¿Qué te sirve?

-Hola Ethan, quisiera que vinieras arreglar un asunto.

-¿Qué clase de asunto?

-Pues… ven y lo sabrás.

-Iré en seguida.

Con eso cuelgo la llamada, me levanto de mi silla giratoria, al salir de mi oficina no veo a Xenia, me encojo de hombros y camino hacia el elevador, me dirijo al piso del estudio fotográfico.

Llego en menos de cinco minutos, busco con la mirada a Víctor hasta que al fin lo veo mirando una carpeta, lo que me detiene es ver a Nick, el causante de mis desgracias.

“La otra parte de tus desgracias es por tu culpa” – dice mi conciencia molestándome pero lo peor es que tiene razón, lo que no entiendo es que… ¿Por qué vine yo en vez de que Víctor fuera a mi oficina? No lo sé.

Me acerco donde están ellos dos, están hablando sin que se den cuenta de mi presencia, espero que se den cuenta pero no lo hace así que carraspeo para llamar la atención, Víctor en seguida ladea la cabeza hacia mí.

-Oh hola Ethan – dice sonriendo - ¿creo que ustedes ya se conocen?

Solo asiento sin dejar de mirar al encargado del foro, ya que no tengo ganas de ver la cara del hombre con que tuve muchos problemas.

-Bien porque él fue quien me dijo que te llamara – responde Víctor, dejándome sorprendido, ahora mi mirada está puesta en Nick quien esta seria – los dejo entonces.

Víctor se retira dejándonos solos a los dos, este pone sus manos en el bolsillo, luego me mira sonriéndome.

-Señor Ethan quiero disculparme por lo que paso hace mucho – dice haciéndome sentir mal porque la persona que debería disculparse soy yo – solo quería llevarme bien con la que será mi jefa.

-Si… eh lo siento yo también, no debí actuar de esa forma – digo incomodo por la situación – solo espero que no te metas con mi chica.

-Eso nunca señor Ethan – dice riéndose – solo la tomo como una amiga, espero que deje hacer ese vínculo.

-Ya lo veremos – digo ofreciéndole mi mano, que en seguida estrecha – este asunto está arreglado Nick.

-Gracias – responde sonriendo con toda libertad – espero nos veamos luego.

-Eso sin duda sucederá – digo sin dudar ya que si se hace amigo de Lucy lo tendré bien vigilado.

Aunque me siento el idiota más grande, no debería ser novio de Lucy, no tengo por qué, soy un infiel estúpido, cobarde y aparte manipulador porque si Xenia dice algo la despedía.

Me despido de Nick y vuelvo a mi oficina donde antes de entrar observo Xenia llorando en su escritorio, ¿le habré dañado sus emociones?

Solo le quería dejar  claro que lo que paso solo fue un accidente, uno espantoso de haberlo cometido en el momento menos indicado, bueno, en ningún momento de mi vida quiero que ocurra lo que paso.

-¿Qué tienes Xenia? – pregunto observándola, ella no se había dado cuenta de mi presencia y cuando se di cuenta en seguida intento quitarse las lágrimas que caían por sus mejillas, era demasiado tarde lo había visto todo.

-No es nada Ethan – dice nerviosa – estoy bien.

-No, no lo estas – digo preocupado, no quiero ser culpable de hacer llorar a cualquier mujer - ¿es por lo que hablamos?