Capitulo 10: Lucy

Me observaba con interrogación y la verdad no le entiendo a su pregunta porque no sé a qué se debe, le respondo frunciendo el ceño.

-¿Por qué la pregunta? – al fin me sale la pregunta que tenía en mi mente molestándome desde que me pregunto eso.

-Porque estas sufriendo mucho con esos mensajes y… ahora esto – responde llevándose su mano a la cabeza para rascársela – creo que es algo muy difícil.

-Esto no es nada – es lo único que digo para seguir haciendo lo que deje por verlo.

Desde ahí la paso muy silencioso, comimos y vimos una película, no me gusto su pregunta, tampoco soy tan débil para no soportar unas cosas como estas, yo amo a Ethan y eso no cambiara aunque pase algo que lo dudo que pase.

Luego de comer nos dedicamos a lavar los trastes mientras que Enrique los limpia con una toalla, conversamos del estado de mi padre ya que me han comentado que ha estado débil y eso me aflige.

Hasta que escucho que la puerta de la entrada es abierta, se perfectamente que es mi novio quien acaba de venir.

-Creo que es Ethan – dice Enrique, asiento dándole la razón y nos encaminamos a la sala donde lo encontramos revisando la bolsa – creo que él se dará cuenta por su propia cuenta.

De repente ladea la cabeza para nuestra dirección, su rostro demuestra preocupación, veo cuando traga grueso, sin duda debe estar enojado por lo que acaba de ver.

-Hola Ethan – soy la primera en hablar, acercándome donde se encuentra, lo abrazo y le doy un pequeño beso en su mejilla - ¿Cómo te fue?

-Bien hermosa – dice fingiendo una sonrisa, luego dirige su mirada por donde se encuentra mi hermano – Hola Enrique, que alegría verte aquí.

-Me hubiera ido pero quería cuidar a Lucy por lo que he visto – dice señalando la bolsa – debemos de saber quién es el chistoso que hace esas cosas.

-Estoy de acuerdo – dice Ethan asintiendo – en seguida iré a ver las cámaras de vigilancias.

Ethan está serio y eso me preocupa, pone su mano en mi cintura para luego mirarme a mí con una sonrisa.

-Aparte de eso te sucede algo – afirmo cruzándome de brazos - ¿sucede algo?

-Bueno yo debo irme – interrumpe Enrique agarrando su saco, se pone en frente de nosotros para abrazarme a mí – adiós hermanita, adiós Ethan.

-Maneja con cuidado – le aconsejo.

-Descuida – dice sonriendo – me avisas si descubriste algo Ethan.

-No lo dudes – dice haciendo un gesto de capitán.

Enrique solo se retira dejándonos solos, observo a Ethan quien está mirando la puerta, pongo mis manos en cada mejilla, llamando su atención que en seguida me la da.

-Ahora cuéntame cariño – digo dándole un beso en los labios, lo quería hacer corto pero me atrae poniendo sus manos en mi cintura haciendo que por nada en el mundo me aleje de sus labios, me besa con deseo y llenándome de sensaciones únicas que solo él puede hacerlo, nadie más que solo Ethan Beckett.

-Te amo – dice entre mis labios para luego darle una pequeña mordida que me deja sin aliento – eso nunca lo olvides.

Es raro que me diga eso pero lo siento tan bien a mi lado que no quiero preguntarle, enredo mis manos en su cabello sedoso.

-Yo también te amo – confieso separándome de sus labios apenas por las ganas de tenerlo dentro de mí, pensaba que seguirá pero dejo de besarme para luego mirarme con decepción, algo le pasa y confió en el que me lo dirá.

-Debo contarte algo – dice llevando su mano a mi mejilla donde la acaricia – pase lo que pase…

-Lucy nuestro padre está en el hospital – dice entrando en la puerta desesperado, siento que el alma se me va al escuchar eso, me muevo con rapidez a mi cuarto donde agarro mi cartera, al salir veo a Ethan hablando con Enrique.

-¿Qué ha sucedido? – pregunto en un hilo de voz cuando unas lágrimas comienzan a descender por mis mejillas.

-Ha sufrido un colapso – dice Enrique serio – hay que ir en seguida dice mi madre.

Solo asiento y salimos los tres hacia el elevador donde intento secar mis lágrimas traicioneras, soy muy sensible en estos casos; Ethan pasa su brazo por mi hombro para abrazarme de lado.

-Todo estará bien cariño – dice para luego darme un beso suave en mi frente, siempre me siento bien en sus brazos.

Solo espero que mi padre este bien, no quiero perderlo no ahora ni nunca, desearía morir primero antes que mis padres, sobre todo para no sentir dolor alguno.

Al fin el ascensor llego a su destino, nos encaminamos a la salida donde está el auto de Ethan y Enrique.

-Tu ve por tu cuenta Enrique – dice Ethan agarrando mi mano – yo iré en el mío con Lucy.