Perdóname

3

Ambos siguieron conversando por horas hasta que se hizo algo tarde, mientras seguían conversando Becka recibe una llamada de su padre y responde

-Ven al auto ahora mismo- fue lo único que dijo su padre en un tono demasiado molestó y algo ebrio, la chica miro hacia el frente de donde se encontraban, estaba su padre dentro del auto y a este se le veía muy molestó, colgó y se despidió de Neo.

-Tengo que irme, nos vemos mañana- dijo algo nerviosa

-¿Estaras bien?-

-No te preocupes por mi, estaré bien- respondió y camino rápidamente hacia al auto, sabía que al llegar a casa le iría fatal, subió al auto y su padre avanzó casi de inmediato, el auto apestaba a alcohol, ambos no se dirigieron ni una sola palabra durante el camino.

Al entrar a su casa James se dirigió a la cocina tomo asiento y continuó bebiendo de la botella que dejo antes de salir por Becka, mientras Becka se dirigía a su habitación rezando porque su padre no le hablara.

-¿A dónde crees que vas? Ven aquí- dijo mientras escuchaba a la chica comenzar a subir las escaleras

-¡¿Qué hacías con ese imbécil?! ¡¿A caso tú también piensas abandonarme como lo hizo la puta de tú madre?!- grito en cuanto Becka entro a la cocina

Becka solo se queda en silencio mientras baja la mirada

-¡Contestame cuando te hablé!- gritó mientras le arrojaba la botella a Becka, está rosa solo un poco la cara de la chica y finalmente se rompe al chocar con la pared

La chica algo asustada responde -Papá, no es lo que piensas, es un amigo y sólo estábamos conversando-

-¿Me crees idiota? Conozco a las mujeres, todas son unas zorras- dijo mientras se acercaba a ella

-Para ti todas somos unas zorras, pero no es así- respondió Becka algo molesta

-¡Callate!- grito mientas abofeteaba a la chica

-Te odió papá-  dijo entre sollozos mientras tocaba su mejilla y se marchaba a su habitación

-¡¿Qué dijiste?!- grito James mientras tomaba a la chica del cabello

-¡Que te odió!- grito la chica con lágrimas en los ojos

James la jala del cabello con tanta fuerza que Becka cae al suelo, en cuanto está se encuentra en el suelo James comienza a golpearla y patearla fuertemente -¡Eres una chiquilla mal agradecida!- gritaba mientras la chica suplicaba que por favor se detuviera pero el no lo iba a hacer, el continuaría hasta cansarse y así lo hizo hasta que finalmente se marcho dejando a Becka en el suelo llena de golpes y un corte en la ceja que no dejaba de sangrar, el suelo estaba lleno de los vidrios de la botella y en ese estado no podía levantarse e irse así que con apenas unas pocas fuerzas para moverse se alejó un poco de los vidrios.

Pasado un poco más de una hora de estar en el suelo, Becka dejo de escuchar el ruido que hacia su padre, la casa se quedo en total silenció, esto solo significaba que su padre finalmente se había dormido, así que como pudo se levanto y se dirigió a su habitación, ya estando ahí cerro la puerta y recordó la carta de su madre, la sacó, se recostó en la cama y comenzó a leer.

Perdóname hija, de verdad perdóname pero no puedo seguir viviendo en ese infierno con tú padre, realmente no lo amo, nunca lo hice, fue un error estar con el y solamente me quede con el por ti pero ya no puedo, ¿Recuerdas a mi amigo William? Él es el hombre al que realmente amo y se que con él finalmente seré feliz, esta noche me iré con el a Tennessee, aún soy joven y quiero iniciar una nueva vida junto a William, me hubiera encantado traerte conmigo pero él quiere tener hijos propios y siendo realistas él no tiene porque hacerse cargo de ti, así que tú solo estorbarías y bueno ya no eres una niña pequeña que depende de mí y se que podrás arreglartelas sola para vivir con tu padre, por ahora se fuerte, se que podrás y en cuánto puedas aléjate, aléjate de él lo más pronto posible.
 


¿Pero que mierda? Al final mi padre tenía razón Fue lo primero que pensó al terminar de leer, después de ello arrugó la carta y no pudo evitar romper en llanto mientras en su cabeza sonaban las preguntas ¿Por qué madre?, ¿Por qué me haces esto?, ¿Por qué me dejas sola?¿A caso no ves que te necesito?.
Después de unas cuantas horas de maldecir su vida una y otra vez mientras lloraba  finalmente se quedó dormida.

A la mañana siguiente se despertó para ir al colegio, se vistió con ropa holgada para que sus golpes no la lastimaran más y sin importar que haya dormido solo un poco y que tuviese los ojos hinchados por tanto llorar, se vistió y se marchó. 
 


 

Camino al colegio no podía sacar de su pensamiento lo que decía la carta, a pesar de ello aún tenia la esperanza de que su madre se diera cuenta de su error y volviera.
 


Al encontrarse con Neo, Becka agacha un poco la cabeza pues no dejaría que Neo viera tan fácilmente la herida de su ceja la cual aún sangraba

-Joder Becka mira como vienes- fue lo primero que dijo Neo al verla
 


 

-No es nada- 
 


-No intentes mentirme, además mira como traes esa ceja-

Becka levanta la cabeza y responde -¿No es obvio? Fue mi padre, además mi madre me dejo una carta cuando se fue, no había podido leerla hasta ayer cuando mi padre se durmió, mira- dijo mientras le mostraba la carta


-¿Pero qué mierda?- fue lo primero que salio de la boca de Neo al terminar de leer
 


-Lo mismo pensé- dijo mientras nuevamente agachaba la cabeza

-Tú padre es un imbécil, como puede hacerle esto a su propia hija y por lo de tú madre, no te preocupes, yo estaré para ti, ¿Entendido?- dijo y comenzó a abrazaba

Becka no dijo nada y no pudo evitar el comenzar a llorar

-Venga, no llores, se como te sientes-

-Ahora solo quisiera morir- susurro la chica entre sollozos

Neo le susurra al oído -Te escuche y se que piensas que quieres morir pero en realidad simplemente quieres que te salven pero te niegas a buscar ayuda, ¿Por qué? Porque piensas que a nadie le importas- después de ello deja de abrazarla -Pero te equívocas, a mi me importas- dijo mientras limpiaba las lágrimas de Becka




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.