Perdóname por ser cobarde (2)

48-El tiempo dirá

Hope

El sonido bullicioso del lugar mientras caminaba sin saber a dónde ir, inundaba mis oídos. Me había separado de mis padres y no sabía dónde estaban, provocando que el miedo me embargara al verme totalmente perdida. La gente iba y venía en el parque de diversiones, pero ninguno era ni mi papá ni mi mamá ni mi hermana.

«¿Dónde están?»

Mis lágrimas empezaron a asomar, al no saber qué hacer. Estaba perdida en ese inmenso lugar. Sola con mi oso de peluche.

De repente la voz de alguien me llamo.

ꟷ¿pasa algo? ¿te perdiste?ꟷpreguntó un chico. Era alto con unos ojos marrones y su cabello era totalmente oscuro. Este puso de cuclillas para estar a la par mío. Su presencia pudo tranquilizarme un poco ya que me sentía totalmente desamparada

ꟷNo encuentro a mis papasꟷrespondí entre sollozos.

ꟷTranquila ¿Cómo te llamas?

ꟷEsperanza

ꟷ¿Sabés tu apellido?

ꟷTorresꟷrespondí intentando no llorar.

ꟷBien, ven, toma mi manoꟷdijo el chico dándome su manoꟷ. Vamos a alguien que nos ayude a buscar a tu familia.

ꟷMi mami dijo que no tengo que ir con nadie que no conozcaꟷrespondí mirando la mano que me ofrecía mientras me abrazaba más a mi oso.

ꟷTu mamá tiene mucha razónꟷ admitió con una sonrisaꟷ. Hagamos algo. No me des la mano porque puedo ser peligroso. Mira a las personas que hay a nuestro alrededor. ¿Quién te parece que no es peligroso?ꟷMiré hacia la personas y señale a unas señoras que estaban sentadas hablando en una mesa.

ꟷBien, entonces, ahora le diré a ellas que se quede con vos mientras voy a encontrar a tu familia ¿sí?ꟷasentí

Vi como el chico fue hacia las mujeres y estas miraron hacia mí. Asintieron y me hicieron señas para que me acercara a ellas.

Fui hacia ellas y una me dio una silla para que me sentara mientras las demás me preguntaban como se llamaban mis padres, les di toda la información que pude.

ꟷBien, ahora que estas con ellas que no son peligrosas, voy a buscar a tus papas.

El chico se fue y yo me quede con las señoras.

Al poco tiempo el chico volvió junto con mi mamá. Al verla fui hacia ella para buscar ese calor que me decía que ya todo estaba bien.

ꟷHija, Dios, casi me mueroꟷme dijo ella también entre lágrimas mientras se agachaba para abrazarme.

Habremos estado un buen rato abrazadas. Hasta que mi mamá se incorporó.

ꟷMuchas gracias por cuidar de mi hijaꟷle dijo a las señoras que me habían cuidado. Giró hacia el chico ꟷY gracias muchacho.

ꟷDe nada. Esperanza es muy inteligente, sabe bien que no tiene que ir con gente peligrosaꟷme dijo sonriendoꟷ. Bueno, nos vemos.

ꟷ¿Cómo es tu nombre?ꟷle pregunté antes que se vaya.

ꟷMe llamo Ezequiel.

ꟷAhora que trajiste a mi mami ya no sos peligrosoꟷle respondí y el chico solo me sonrió y asintió.

De repente una luz cegadora domino mis ojos. Al abrirlos note que no estaba en mi habitación, sino en una habitación blanca en donde reinaba el olor a desinfectante, típico de olor de un hospital. Aunque, al poco tiempo descubrí que estaba en uno.

ꟷYa despertasteꟷme dijo un hombre que no había notado que estaba ahí. Vestía de blanco así que supuse que era el doctor.

ꟷ¿Qué paso?ꟷpregunté intentando removerme de la cama pero me era imposible me pesaba todo el cuerpo y más específicamente la pierna.

ꟷParece que no miraste cuando cruzabas y un auto te atropello.

«¿Que?»

Me empecé analizar. Estaba vendada la cabeza, con un cuello ortopédico y una de mis piernas estaba enyesada.

ꟷPor suerte no fue grave solo te fracturaste la tibia, al caer al suelo te golpeaste la cabeza y te cortaste la frente en la zona parietal por ello tenés unos puntos que te lo quitaremos en unas semanas y no quedare huella además tu cabello lo cubre. Por suerte con tu cabeza parece que más allá de la cortada la contusión fue leveꟷ informo mirando su carpetaꟷ. En realidad, eso fue un milagro que no hayas salido peor. El auto te embistió a una velocidad alta.ꟷA pesar de que hablaba no estaba entendiendo de que me estaba diciendoꟷ. Ahora llamo a tu mamá que esta afuera para que te vea. Igualmente, no te muevas, solo descansa.

El hombre fue hacia la puerta y llamo a mi mamá quien a los pocos segundos ya estaba adentro de la habitación

ꟷAy, Dios, casi me mueroꟷme dijo mi mamá yendo abrazarme.

ꟷMamá, soltame que me dueleꟷpedí al sentir que su tacto me lastimaba

ꟷSeñora, por favor, con cuidadoꟷle dijo el doctor divertido mirando por la puerta.

ꟷDisculpe, ¿pueden ingresar mis demás hijos?ꟷle preguntó mi mamá al doctor soltándome

ꟷSí, claro. Ahora les digoꟷrespondió este dejando la habitación.

ꟷHija, Dios, ¿Cómo se te ocurre cruzar sin mirar?ꟷme preguntó mientras veía que sus ojos estaba rojos parece que había llorado.

«Buena pregunta»

Ahora que estaba más despierta podía recordar porque se me había ocurrido correr sin mirar. Y solo un nombre recorrido mi cabeza.

Marco.

ꟷAdemás,ꟷagregóꟷ¿no se supone que estabas con Sandra?




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