Pétalos Blancos.

3° Pelusa Y El Amor.

Pelusa.

Perseguía a mi humano por toda la habitación mientras él iba de un lado al otro, yo solo quería comida no conocer más sobre esa humana que le rompió el corazón, lo sé; soy un gato pero sé que los humanos se enamoran y que se lastiman.

Día a día soporto a mi humano hablar y hablar sobre esa tal humana denominada "Aura", al principio cuando llegue con él no pasaba mucho tiempo por la casa, no entendía para que rayos me había adoptado si casi nunca estaba pero eso si nunca me falto la comida, salía temprano, regresaba para ducharse y luego en la noche desaparecía para regresar más tarde ahogado en alcohol... Así fueron los primeros meses con mi humano.

¿No me he presentado, verdad?

Soy pelusa, aquel gato gris y blanco, llegue aquí en otoño, mi humano es amigable algo agridulce pero amigable, soy gruñón y flojo tal vez por eso nos llevamos bien.

Siempre lo escucho; desde que cambio es mejor persona y el cariño que me da se lo agradezco escuchándolo cuando necesita hablar con alguien, soy su fiel compañero (mucho mejor que esos mugrosos perros), soy espectador de la relación toxica de mi humano desde la primera fila (¿Genial, verdad?).

Bien, ahora si ¿Por dónde iba?

Perseguía a mi humano, que extrañamente estaba de un humor muy muy bueno, soy paciente con él, lo escucho, pero en estos instantes solo quiero comida, tengo un hambre enorme, sería capaz de comerme un pavo enorme, eso me recuerda que se acerca navidad; significa comida y comida, comida muy rica.

-Pelusa, la vi, ella estaba hermosa, iba junto a su amiga Rose, mi mirada se conectó con la de ella; ¡Jamás, me había sentido así de nervioso!, ¿Sabes que hice?, la salude y ella me ignoro, me dolió pelusa, pero esto apenas comienza.

A la mitad de su historia me cargo y me hizo dar vueltas junto con él, le solté un gruñido, tengo hambre, vamos, vamos.

Mi humano a veces es muy, pero muy estúpido, solo quiero comida y prometo que lo escuchare, el amor te hace cometer muchas locuras, mi humano estaba borracho de amor, si eso era; por eso se comportaba tan tonto (Más de lo normal).

Y ahí iba otra vez, bien tendré paciencia y lo esperare, solo espero que al acabar me dé algo de comer.

-¿Puedes creerlo?, el tiempo hizo lo suyo con ella; si antes era hermosa ahora... ahora lo es mucho más no tengo palabras, ¡te lo juro, pelusa! Es como un ángel; pelusa su indiferencia no me dolió (bueno poquito) pero es su mirada pude ver una sombra de ese brillo con el que me veía antes, el brillo en la mirada de alguien que te ama.

Me deposito en la cama y como buen gato acompañante, me senté paciente a escucharlo....

Mi humano era extraño, bien sé que es atractivo, yo también soy atractivo, las gatas del vecindario mueren por mí; bueno mi humano es guapo y no sé por qué alguien como el sufre por una sola humana, pero eso es cosa del amor, mi humano está enamorado, lose mejor que nadie.

La sonrisa de mi humano era cada vez más grande conforme me contaba de aquella humana llamada "Aura".

La primera vez que vi una foto de ella, mi humano llego en la noche borracho y tiro de la mesita de alado de su cama, un portarretratos; la curiosidad me gano (Y no, no me mato) ellos estaban abrazados, mi humano escondía su cara en el cuello de ella y se notaba feliz (Fue cuando supe que él estaba muy lastimado, para terminar de ese modo, se habían lastimado tanto) cosa que no era en esos tiempos, llegar borracho cada noche no era ser feliz, ella sonreía y su cabello castaño la cubría, se podía notar a kilómetros cuanto ama a mi humano en esa foto.

Después de esa vez que vi la foto, comprendí a mi humano un poco más, al siguiente día se regañó el mismo por arruinar la foto pero ese día cambio, no hubo más noches que llagara borracho.

Y fue como me conto de ella.

Aquella humana era Aura, él la llama "su pequeña flor", me conto que una vez que la conoció no podía dejarla ir, también que cuando la beso se hizo adicto a ella y que muy, pero muy tarde se dio cuenta de que la amaba, él creía que un demonio como él no podía amar, pero ella le enseño que estaba muy equivocado y por estupideces de él la perdió. Ahora aquella humana estaba de regreso y estaba seguro de que volcaría el mundo de mi humano junto con el mío.

Fue cuando la vi, en otro portarretratos que saco de un cajón de aquella mesa al lado de la cama, se podía notar como aquella chica era tímida e insegura de sí misma, pero tenía aquel brillo en sus ojos de alguien enamorada. En esa foto su cabello era negro, pero sin duda era la misma humana de la otra foto y tenía una sonrisa enorme, de esas que das cuando está plenamente feliz.

-Pelusa, muy pronto conocerás a Aura, le encantan los animales; así que te amara tanto como yo lo hago.

"te amara tanto como yo lo hago." Mi humano dijo eso y entonces, ¿Dónde estaba mi comida?, dice que me ama y no veo por ningún lado mi pavo... no veo nada de comida, ni mis sobres, mis whiskas, definitivamente los humanos aman de una manera extraña.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.