Capítulo 13.2

Capítulo 13.2

Cambio

He intentado de mil maneras volver a hablar con Amy de las cosas, arreglarnos y poder superar esto… Pero es simplemente imposible…

Hace unos días me dirigí a su casa para ver si la encontraba…

~*~

Llegue a su puerta, estaba nervioso y ansioso por que fuera ella quien me abriera… Pero no fue así, fue su hermano…

–Buenas tardes… ¿Se encuentra Amy?

–Hola Patrick, No, no se encuentra pero pasa, no creo tarde en hacerlo…

–Gracias…

Nos dirigimos a la sala, su hermano es muy formal y siempre le agrade, o bueno siempre fue así si aún no sabe lo que hice…

–Cuénteme, ¿cómo van las cosas?

–Bien, todo tranquilo…

–Amy me ha dicho que pinta.

–Sí, a eso me dedico…

–Oh que chévere, es bueno hacer lo que a uno le gusta.

–Sí, las cosas dejan de llamarse trabajo.

–Sí, es verdad…

Pasaron varios minutos y la charla con él continuó y continuó, fue agradable pero… Amy nunca llegó…

–Bueno… Ya se me hizo un poco tarde…

–Qué pena que Amy no llegara…

–Sí… Pero no hay problema…

– ¿Quiere le deje alguna razón?

–Oh no, muchas gracias por todo…

–Bueno, Nos vemos…

Salí de su casa algo decepcionado, sentí que esta era la última oportunidad que tenía para poder arreglarme con ella o simplemente… Ya comenzar a olvidarla… Y al parecer deberé tomar el camino que no quería…

Ya cuando me encontraba en mi casa recibí un mensaje… No había notado que deje el celular en el desespero por salir corriendo para poder hablar con ella…

El mensaje era de Amy…

–Patrick, mi hermano me contó que estuviste aquí en mi casa… No sé con qué fin has venido, tú y yo no tenemos nada de qué hablar.

Ese fue… El detonante… Abrí mis ojos en aquel momento y en vez de sentirme mal fue todo lo contrario con una variación… Sentí odio…

–Sí, tiene razón Amy, usted y yo no tenemos nada de qué hablar, espero tenga un excelente día, por mi parte no volverá a saber nada de mí, y si así es, será porque la vida nos puso en el mismo camino como casualidad… Muchas gracias por todo, cuídate.

Esas palabras salieron sin pensarlo, pero con el sentimiento vivo… Sé que me equivoque, sé que soy el villano en esta historia… Pero también intente de una u otra forma compensar el daño, un plato no se puede arreglar luego que se haya rato, eso es cierto… Pero tampoco no se puede desechar cuando se tiene un valor sentimental con el mismo…

La cultura oriental es muy diferente a la nuestra, nosotros las cosas se hacen reemplazables, desechables… En cualquier ámbito incluyendo las personas…

Los orientales por el contrario buscan como reparar o mejorar las cosas, no las desechan, y eso hace que se creen vínculos muy fuertes…

Intenté usar ese pensamiento con Amy, arreglar el daño, mejorar nuestra relación… Pero, simplemente ahora ya no importa porque de la manera más cruel y despiadada he arrancado lo que sentía por ella y lo he dejado en la basura… Ahora mi vida se enfocará en otras cosas… Dejare a un lado los amoríos y me concentrare en lo que realmente debe importarme, pintar es más que mi profesión una pasión, me deleitó creando obras maravillosas llenas de sentimientos, emociones que las personas pueden percibir aunque sólo contemplen con su mirada, poder expresar tanto en un cuadro me llena y por concentrar todo mi tiempo en el amor… Por intentar comprenderlo, vivirlo… he salido lastimado y he lastimado…

De ahora en adelante mi pensamiento ha cambiado… Sí llega una mujer no me concentrare tanto en estar con ella más que un rato, tengo otras cosas en mi cabeza… Dicen que los hombres perros nacen, otros se hacen… Yo no seré ese tipo de hombre, porque no las buscaré simplemente estaré disponible a las cosas sin tanto tapujos ni complicaciones, dejando a un lado el tema de las relaciones… No sé cómo me funcione esto, si me haga más daño del que me he hecho… Pero la verdad no importa… Ya es momento de ser quien tome el mando y juegue con ellas… En vez de ser el controlado… ¿Y mis cuadros? Bueno… Mis cuadros seguirán llenos de emociones, pero con un toque de satisfacción en ellos…

Tengo frustración con la vida, la vida amorosa que me ha tocado…

“Cada mujer tiene exactamente la vida amorosa que quiere…” decía una frase que escuché en algún lado y hay verdad en esas palabras, porque ellas deciden con quien estar y como ser tratadas… Y la de los hombres… ¿Cuál sería?