Capítulo 24

Capítulo 24

Gimnasio

Ya nos hemos visto un par de veces más, el juego de las miradas aún a veces lo seguimos haciendo, me encanta cada vez que se pone nerviosa y comienza a decirme que no le mire, todo ha sido bonito hasta ahora… Pero es que no debo acercarme demasiado porque ella tiene pareja, y yo al hacerlo estoy dando pie para que pase algo, por más que lo quiera debo esperar… Pero y si por esperar pierdo para siempre… Esta duda me atormenta en mis noches… Dejare a que todo marche a su ritmo, así las cosas se darán cuando deban darse… No esperare tampoco, solo me moveré lo necesario y listo…

Me he vuelto a comunicar con Julián, había estado muy perdido, bueno, los dos lo estábamos, el con su nuevo matrimonio y yo con mis tormentas, se le metió la idea de ponerse en forma, tal vez no quiere convertirse en el esposo que hecha barriga, me da algo de risa pero también he estado muy quieto en ese aspecto, entonces me pareció una buena idea, así que nos metimos a un gimnasio… Sí… El típico plan, pero sé que no lo dejaremos a la primer semana…

~*~        

–Patrick, en unos 10 minutos paso por usted, esté listo.

–Sí, ya lo estoy esperando…

–Bueno, ya llego entonces…

Julián llego a recogerme para ir al gimnasio.

Al llegar dejamos las cosas y comenzamos con la rutina, ya llevamos una semana y nos hemos adaptado un poco a los ejercicios y las maquinas, no es tan fácil pero tampoco tan difícil, en el colegio considero que fuimos algo atletas, recuerdo esos tiempos donde todos los descanso alguna actividad estábamos haciendo, ya sea vóleibol, basquetbol… A veces hasta quedábamos con otros compañeros para reunirnos en las tardes a jugar, eran buenos tiempos…

En el gimnasio había una joven que comenzó a hacerse amiga de nosotros, pero claro como Julián era el casado… Entonces la batuta caía en mí, y la verdad ella me agradaba… Pero no pasaba de una simple amistad… O bueno eso creía yo…

Todos los días estábamos asistiendo al gimnasio en horas de la noche, muy pocas veces en la mañana, por el horario de trabajo de Julián, pero siempre íbamos juntos, algunas veces ella coincidía con nosotros y nos juntábamos los tres a hacer la rutina, ella nos ayudaba y nosotros a ella con las pesas y demás… Era buenos ratos…

Hacer ejercicio te libera, te quita todas las tensiones que llevas encima, es una especie de analgésico en cierta manera, aunque quedas cansado por la rutina, un buen baño, comida y dormida te hacen sentir como nuevo, me gusta hacerlo y más que así comparto tiempo con Julián y me abro, salgo, en vez de quedarme encerrado en mi casa…

–Y ¿Cómo van las cosas Patrick? –pregunto Julián mientras estábamos en las caminadoras.

–Bien, todo va bien…

– ¿Ha vuelto a saber algo de Amy?

–La verdad que no… Desde ese día no volví a verla, mucho menos escribirle, entonces la verdad no sé qué sea de su vida en este momento…

–Entiendo… Y ¿Qué ha pasado con la otra? ¿Cómo es que se llama?

– ¿Quién?

–Esa con la que se besó…

–Me reí–, ¿Cuál de tantas?...

–Se rio–, ah… Deje la bobada…

–Debe ser más específico –me reía.

–Pues ella, por la que Amy le peleo… La de la foto…

–Ah, Ximena…

–Sí, ella…

–Pues, la última que hablamos fue hace como tres días, le gusta que esté haciendo ejercicio y demás, pero no nos hemos vuelto a ver desde la exposición…

–Oh, entiendo, bueno pero al menos se hablan…

–Sí, a pesar de todo, somos buenos amigos…

–Que bien… Pero bueno, y ahora… Quien es la que lo tiene pensando en las noches, la que le inspira cuadros, la que…

–Sí, sí, ya entendí la idea… –le interrumpo.

–Se ríe–, Bueno, ¿quién es?

–Pues así como tal toda esa descripción que dio no es tan así… Pero si hay alguien que me interesa… Pero hay un pequeño problema…

– ¿Cuál?

–Ella tiene novio…

–Eso no es un pequeño problema, es un ¡gran problema! Bueno tampoco tan grande pero si es algo que afecta un poco…

–Sí, porqué siempre se debe mantener una distancia… Y más cuando uno va con otras intenciones más allá de solo amistad…

–Sí, lo sé… Pero bueno, si ella ha de ser… Será…

–Sí…