Capítulo 29.2

Capítulo 29.2

Decisión

Desde aquel momento me he colocado la meta… De conquistarte… No sé cómo lo haré, no sé por dónde empezar… Pero lo haré, quiero hacerlo…

Me he dado cuenta que en el amor hay que jugar todas las cartas posibles, apostar aunque la victoria no sea segura… Ir de frente contra el abismo y caer en él… ¿Qué me ha de esperar abajo?

¿Acaso una muerta trágica o instantánea? O ¿Acaso un par de alas para ser libre?

La única forma de averiguarlo es ir con todo… Y no simplemente por una convicción del momento… Quiero ir por todo, porque tu lo eres todo… Lo vales todo…

Quiero poder llegar a esa cima inalcanzable a la que muchos le temen, quiero ser quien no se rinda aunque llueva o truene… Vales la pena, vales cada maldito segundo que he dedicado a tener paciencia, a esa larga espera que me ha marcado por tanto tiempo… Jamás había estado tan seguro de algo como lo estoy ahora… Y sí, sé que parece toda una película esta historia pero es que así es la vida, la vida es una película que tú mismo construyes a diario, la ciudad es el gran escenario y nosotros los actores… A veces somos espectadores de otras películas cercanas… Otras un poco más lejanas… algunas con sus efectos especiales, sus dramas, otras más de acción y otras les va mejor de comedia…

Cada momento de nuestra vida está siendo grabado en nuestra memoria, entonces disfruta de ese gran guion que no se ha escrito, porque aún no has vivido el mañana…

Y cuando menos lo esperemos podremos ser nosotros mismos nuestros propios espectadores, justo en esos segundos donde la obra está a punto de terminar, allí en los créditos, contemplaremos toda aquella gran película por unos cuantos segundos, antes de cerrar los ojos hasta la eternidad…

Volví a comunicarme con Peyton, desde aquel día en que le vi el gran cambio quede impactado, solo pensaba en cómo ser parte de él, en estar a su lado…

Quedamos de vernos nuevamente, me arregle y me dirigí a su casa, ya cuando me encontraba allí, una joven pasó y se quedó mirándome… No sé si le llame la atención o que era lo que me miraba, simplemente no preste mayor importancia… Porque estaba completamente concentrado en Peyton, quien ya sabía que había llegado y como era típico en ella, me hacía esperarla afuera un rato… Como si se retocara o algo parecido…

Luego de varios minutos salió… Y vaya… Sí que valía la pena esperarla… Me saludo y nos sentamos como de costumbre en aquel muro bajo… Tomo su celular y comenzó a escuchar música, hablamos un poco y cuando menos pensamos la joven de hace un momento salió hasta el lugar donde estábamos…

Era una vecina de ella y se sentó a nuestro lado…

Comenzó a hablar con Peyton y me quede algo extrañado, no me incomodaba, porque igual de vez en cuando metía cucharada y hacia comentarios…

Peyton le mostró que se había rapado un poco el cabello en la parte de atrás y al igual que ella también yo quedé sorprendido…

Molestamos un rato, y comencé a acariciarle aquella parte… Se sentía algo interesante, a ella no le gustaba mucho por un comentario que luego de varios minutos hizo…

–No, que eso me excita…

Me quede mirándola y volví a poner mi mano allí, ella me miro alzando su ceja y luego nos reímos un poco…

Luego de un largo rato y de que su amiga le contará las mil historias sobre el novio y demás… Se despidió y nos dejó solos… Pero en ese punto ya no tenía mayor cosa para hablar… Solo hice algunos comentarios de sus nuevos cambios y ya…

Coloco música y se recostó en mi hombro a escucharla… Tiene un interesante gusto musical, no es lo típico ni convencional pero tampoco lo extraño que solo escucha un grupo pequeño de personas que se creen las sofisticadas y únicas… Me gusta, me gusta esa colección pequeña de canciones que guarda allí… Luego comenzó a jugar un típico juego… Plantas versus zombis… Fue lindo verla como se entretenía… Solo me quedaba observarla… Y enamorarme cada vez más de ella…