Por Siempre

CAP. XXV

Un padre

Cuando por fin logre calmarme un poco, la señora del servicio social aun estaba esperando por mi respuesta.

-señor, si usted no conoce a la señora o no tiene nada que ver con eso solo debe decírmelo y haremos los trámites pertinentes para poner a la niña en adopción.

Inmediatamente reaccione a esas palabras.

-no, no, espere yo si conocí a angelique, ella era mi prometida pero desapareció hace más de un año, como entenderá aun no acabo de digerir el hecho de que el amor de mi vida ya no está ni estará conmigo nunca más, como quiere que también entienda que tengo una hija, que ahora soy un padre, nadie me preparo para esto, nunca ni en mis mas locas fantasías pensé que tendría una hija con mi ángel. Decir esas palabras fueron como una epifanía, YO ERA PADRE, TENIA UNA HIJA, PRODUCTO DE MI AMOR CON MI ANGEL… 

En ese momento llore, llore por el dolor de perder a mi amor, por la emoción de saber que aunque se fue tenía un pedacito de ella, por la alegría de convertirme en padre, si, yo en ese momento era padre.

Enseguida me recompuse de nuevo y pregunte a la del servicio social donde estaba mi bebe. Esta me explico los procedimientos a seguir para poder recuperar a mi pequeñita… llame a Manuel para que me ayudara con todo el papeleo, esa es su especialidad, para algo es mi abogado.

Después de una prueba de ADN para confirmar lo que ya sabía, arreglar los papeles de legalización, de acondicionar mi casa y mi vida para un nuevo integrante por fin llego el día. Fui con Manuel y mi nana a recoger a MI HIJA,  se me hincha el corazón ante el solo hecho de mencionar esa palabra, MI HIJA, mi mejor regalo, el regalo que me dejo mi ángel… mi angelique.

Junto a la bebe en el servicio social me entregaron una carta que me dejo angelique.

Fuimos a casa, mi nana estaba muy feliz por mí y súper emocionada con mí bebe. Esta criatura llego para convulsionar nuestras vidas de una manera caótica y hermosa. Después de unos meses cuando sol ángel cumplía su primer añito decidí que era tiempo de leer su carta. En ella me explicaba que fue lo que le ocurrió, porque me dejo, de que murió y cuanto me amo… mi corazón se arrugo, mis lagrimas cayeron por mis mejillas y suspire…

Mi hija era una bebe preciosa con mis ojos pero los demás rasgos de su madre… con una hermosa piel de durazno… suavecita y apapachable… toda una dulzura y aunque angelique la llamo angelina para mi es mi sol, la luz que ilumina mi vida por eso la llame SOL ANGELINA.  Y hoy se la entrego al hombre que escogió para compartir su vida y escribir su propia historia de amor…

En eso escucho que se abre la puerta. Por ella entra mi querida esposa, para avisarme que ya es hora, es momento de partir a la iglesia, dejo el vaso del que bebía y toco con cariño la foto que esta sobre mi escritorio, en un susurro digo. Es hora mi ángel, espero que nos acompañes como siempre. Mi esposa me mira y me sonríe diciendo…

-de seguro estará tan feliz y orgullosa de ella en este momento  como nosotros cariño, ahora vamos que nuestra hija nos espera.-

Mi vida definitivamente cambio gracias a mi ángel y su recuerdo vivirá conmigo para siempre

Fin



#17369 en Otros
#5019 en Relatos cortos
#27515 en Novela romántica

En el texto hay: separacion, dolor, amor

Editado: 04.02.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.