Había llegado Héctor.
Valeria corrió a sus brazos, la cual tomo para darle muchos besos por todos lados.
- palino, te tlaje un duce. Le comenta mi hermosa hija.
Héctor me miro de reojo. Se acercó para darme un beso al cual esquive. Estaba molesta porque él quería controlar mi vida a sus antojos. Era una de las cosas que no me agradaba de un hombre. Mi madre al darse cuenta que la marea esta turbia, decidió llevarse a Valeria.
- tenemos que hablar Vi…. No sé qué pasa contigo, no nos hemos visto desde hace un mes.
-Esperaba que te quedara en la casa, pero no…. huyes de mí. Hasta cuando…. mujer….
- ya lo hemos hablado Héctor….
- nada Vi… hay que dejar claro esto que no sé qué tendremos. Yo quiero una mujer a mi lado…. Una que se case conmigo y tú no estás dispuesta hacerlo.
- por favor Héctor, entiéndame… no es fácil para mi tomar una decisión cuando tengo una hija que no es tuya.
- eres la primera mujer en este planeta que no le da a la oportunidad a tu hija de tener un padre.
- ella tiene su papa Héctor.
- lo se…. Vi, hasta eso eres egoísta, no darle a saber a su padre de la existencia de Valeria.
Héctor pasa por mi lado para irse, mis ojos estaban a punto de explotar.
- lo siento…Héctor.
Escucho cuando la puerta se sierra, me acurruco en el lugar empezando a llorar desconsoladamente, me ahogaba con mis propias lágrimas.
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Editado: 02.05.2022