TRAGARME LAS PALABRAS Y ACEPTAR LAS MARIPOSAS

Terminé de darle recomendación a Beatriz fui a mi habitación arreglar la maleta para salir temprano. Me quede pensando en la situación con Víctor, las cosas estaban un poco incomoda no podía quedarme aquí, debía alejarme para pensar un poco; esto no era como coger una manzana y comérmela. No…. Era de ver los pros y los contras, una relación no se basa de que tú me ame y yo no… se trata de que ambos estemos al mismo nivel para amar, para correspondernos y soportar las miles caídas que se presenten.

Empaque lo debido y fui a la pieza de mi princesa, me acosté un rato para darle el  calor de madre, miré el techo para acordar las palabras de mi padre, ya no era libre para tomar mis decisiones pensando en solo mí. Pero yo seré la que tendré que vivir a la sombra de otra persona y era lo que no cabía en mi cabeza ruda.

 Me salte cuando vi una sombra en la puerta.

- ¡oh por Dios! Me asustaste.

Escuche su risita, estaba cruzado de brazos, mirándome de pie a cabeza, me encontraba en un mini pijama.

- venía a darle un beso a mi princesa.

- que bien, yo… también pero que quede.

- eso veo….

Se acercó inclinándose sobre mí, apoyo su dorso sobre mi abdomen, para darle un beso a mi hija, luego se fue corriendo hasta quedar de frente mío, apoyo sus manos alrededor de mi cabeza para agacharse, yo lo mire fijamente su ojos y su seriedad ya conocía sus intenciones.

Siempre aprovechaba las oportunidades para atacarme. Hasta que sus labios chocaron con los míos, me quede quieta sin moverme no quería despertar a Valeria y nos encontrara en nuestro acto.

Su beso se hizo más intensos hasta sentirlo respirar con fuerza, se apartó de mi para mirarme.

- duerme conmigo esta noche, como en los viejos tiempo.

Lo mire, no sabía que decir tenía miedo hacerlo, porque sabía que si llegaba a su cama se convertiría una guerra de placer. Dude y dude miles de bese mirando la habitación, me mordí el labio cuando sentí que me ataco, le correspondí cruzando mis brazos por sus hombros.

Cuando menos pensé ya me tenía en sus brazos y me llevaba a su habitación depositándome en su cama. Fue a la puerta para cerrar con seguro.

Regreso quitándose todo lo que su cuerpo cubría, me recompuse en la cama  miré hacia otro lado sabiendo que se había dado cuenta que lo  observaba, no podía negar que mi estómago se removía como un avispero.

Sentí que la cama se hundía a mi lado me giré para verlo acostarse de lado jalándome y abrasándome. Nos quedamos quietos mientras lo sentía respirar en mi espalda.

Se movió para ajustarse más a mi espalda, empezó a besar mi cuello, hacerme miles de cosquillas unas de sus manos se colaban debajo de camisa de mi pijama para atacar mi seno y pellízcalo.

Jadeé…. sin querer queriendo lo hice, al escuchar que estaba perdiendo mi control se giró para quedar encima de mí. Nos miramos detenidamente hasta alcanzar mis labios.

- fue besando mi cara

- llego al cuello-

 fue bajando hasta detenerse en mi senos, los succiono hasta hacerme remover debajo de él. Mi cuerpo estaba pidiendo más, pero no debía hacérselo saber. Estaba reacia a demostrarle que era adicta a su tacto.

Bajo par llegar a mi obligo, allí jugo con su lengua mirándome, para ver cómo me sentía. Beso mis piernas una por una. Cuando menos me di cuenta beso mi parte sensible de mi cuerpo,

-Su caramelo-

- su mejor vista –

Se detuvo para mirar entre mis piernas, sentí que dudaba en tocarme, tomé su mano para llevarla allí. Me miro con deseo, sus ojos me hicieron recordarr aquellos tiempos cuando nos entregábamos constantemente.

 bajo el resto de mi pijama para palpa con dureza, acaricio cada parte de mí, estaba tan necesitado que se sumergido sin previo aviso. Empezó a moverse suavemente, se recostó sobre mi bailando a montar caballo, me beso mordiendo mis labios acaricio mi rostro, mientras yo tenía mis ojos cerrados, no quería que viera mi deseo y la necesidad que fuera rápido, había perdido la confianza de exigirle que tomara mi cuerpo totalmente, sentí que se detuve dentro de mí, sabía que me miraba,

- mi luz……. Mírame.

Abrí los ojos para verlo de frente a mí, empezó a moverse nuevamente, se levantó para acelerar sus movimientos. Tenía mi mirada en él mientras echaba su cuerpo hacia atrás. Sabía que estaba degustando su placer. Siempre soñé con cada momento que habíamos vivido hacía dos años atrás. Empecé a sentir una oleada de placer cunado sus dedos se fueron directo   a mis entre piernas y ejercía fuerza hacia mí. Hasta que alcanzamos nuestro orgasmo junto, se dejó caer sobre mí, nuestra respiración se encontraba,

Nos quedamos así, no salía dentro de mí.  sabía que debía tomar mis píldoras diarias, no quería otra sorpresa.

Se apartó de mi para caer sobre la cama. Lo escuchaba inhalar y exhalar.  Se giró de lado para mirarme y rozar sus dedos en mi brazo desnudo, tome la sabana para taparme.

- Gracias…. Por hacerme renacer esta noche.

Se paró de la cama para irse al baño, espere que saliera para yo hacer lo mismo. No me atrevía a entrar a la par con él.  Cuando Salí después de ducharme lo encontré abrazando una almohada, sonreí al verlo tan tierno e indefenso creo que dormido, pero no lo era…… me había demostrado que con él nadie jugaba. Estaba decidida ir a mi habitación, pero ya que había habia tenido sexo o echo el amor  no me costaba amanecer en su cama, me acomode sin hacer mucho movimiento. Cuando estaba a punto de cerrar los ojos sentí que me tomo por la cintura y me jalo hacia su cuerpo apretándome. Trate de relajarme porque no estaba acostumbrada a dormir de esta manera. Concentre mi sueño.