C-15-

Pasaron dos días en los cuales esquivaba con la mirada en todo momento a Santiago, trataba de no toparme ni encontrarme con él, cuando lo veía prefería regresarme de donde venía solo para no verlo y no tener que explicarle sobre ese día, y algo bueno de eso es que no tuvimos sesión juntos en esos dos días, solo cuando Sara nos reunió a todos los internados para de informarnos que los problemas fiscales del centro de rehabilitación ya estaban solucionados por el incendio que hubo.

Alguien tocó la puerta, era Sara, le habían informado que no estaba en clase con el psicólogo, y no fui porque esta vez sí me tocaría junto a Santiago y no sé si era por vergüenza o porqué pero no quería verlo, ante la insistencia de Sara fui y bajé junto a ella, me dejó en la puerta y se fue, tuve mucho miedo de encontrar a Santiago y verlo a los ojos después de todo lo que había pasado, me di media vuelta y estaba a punto de irme, peeeeroo al psicólogo se le ocurre sacar a los alumnos al campo a un ''pequeño paseo fuera del centro de rehabilitación'' , primero salió el psicólogo y como era de esperarse me habló:

-¿Andrea? Qué bueno que llegas, iremos a dar un paseo a un parque cerca de aquí, obvio estás invitadísima, ¿vienes?- dijo mientras los internados salían del aula hacia la puerta principal-

-sí, claro –dije, lo dejé hablando cuando vi a Camila salir del aula.

-Andrea! Hola!- venía a mi encuentro-

-Camila hola!- me acerqué a ella agachándome un poco hasta llegar a sus hombros , le di un abrazo- ya te extrañaba-susurré

-¿vienes con nosotros?- preguntó mirándome sonriente-

-sí,, claro, vamos.- caminé a lado de Camila mientras Santiago empujaba su silla de ruedas-

Llegamos junto al resto en la puerta principal, yo seguía esquivando la mirada de Santiago y él permanecía callado en todo momento, aunque debería de estar agradecida con Camila por haber aparecido y evitarme estar sola.

-chicos suban en orden al auto por favor, hey! Dije en orden- dijo el psicólogo al ver como sus alumnos hacían desorden-

Para que pueda subir Camila esperamos unos segundos hasta que la suban, después que subieron alrededor de 20 internados me tocaba subir, pero ahí iba la torpe de Andrea, al subir el primer escalón tropecé al no colocar bien el pie casi cayendo y romperme la cara, pero alguien fue más rápido, sí Santiago, puso su brazo delante de mi cuerpo sosteniéndome, su hombro chocó con el mío evitando una caída mía.

Me miró y solo me dijo- cuidado- con una voz ronca y logró que mis mejillas se prendieran rojizas y en segundos me dejó, subí y esta vez sin casi caerme me senté atrás de Camila quien estaba al otro lado del chofer ya que ella no usaba asientos solo espacio, Santiago hablaba con el psicólogo quien parecía llamarle la atención, yo los observaba desde la ventana, el psicólogo le señaló con el dedo hacia el auto, Santiago levantó la mirada la cual chocó con la mía, dio media vuelta y subió al auto tomó asiento al frente del mío, sin mirarme sin decir una sola palabra solo se sentó y se colocó la capucha tapando su cabeza y mirando a la venta.

Y así tras unos 10 minutos llegamos a un parque, el cual yo lo conocía a la perfección era por el que siempre cruzaba con Jack para poder llegar a mi casa, bajamos en una esquina, el psicólogo nos reunió y empezó a hablar de los distintos tipos de dinámicas que íbamos hacer, yo miraba a un lado y otro recordando, hasta que mi mirada se detuvo en algo que me hizo quedar paralizada por completo entre miles de cosas que pasaban por mi cabeza escuchaba mi nombre salir de la boca del psicólogo, pero como hacerle caso si estaba mirando a Jack y a mi supuesta mejor amiga Nadia besándose a vista de todo el mundo, sentí tanta cólera decepción y odio que no pensé y solo actué, salí corriendo en medio de todos y fui contra ellos, jalé del hombro de Jack golpeándolo con puño en la cara, Nadia al verme se sorprendió mucho y gritó.

-Andrea! – se tapó la boca asombrada - ¿qué haces aquí, no estabas internada?-''mi ex mejor amiga'' dijo.

-ya vez que no- sonreí sarcásticamente- wau Jack excelente manera de vengarte- aplaudí- felicidades ¿novios? O ¿qué? ¿Qué son? Eh?- ellos solo me miraban, Jack agarrándose la cara donde le di el golpe, que aun me dolía la mano, pero mas me dolía lo que ellos me estaban haciendo.

-Andrea yo...- Nadia intervino, no la dejé terminar y hablé

-¿tú qué? ¿Qué me vas a decir? Eh?- di un paso hacia ella-

-se supone que tú debes estar internada porque estás loca- dijo dudosa-

Lo siento, pero a mí nadie me llama loca y mucho menos una falsa amiga

-mira lo que hace ésta loca a las falsas amigas como tú- dije mientras me acercaba a ella y le lancé una cachetada, a lo que sentí los brazos de Jack deteniéndome y diciéndome el típico ''cálmate''- 

-no me toques!-dije, en seguida llegó el psicólogo  junto a Santiago quienes me pidieron que me vaya con ellos, pero como aun no terminaba con los traidores empecé a gritarlos,

-son unos idiotas los dos, tu eres una sínica-miré a Nadia quien me dijo

-Andrea no es lo que crees-sus nervios eran evidentes-

-¿ah no? ¿Entonces que hacían, dándose consuelo? ¿O qué explicación tiene esto? Por Dios! ¿no se cansan de mentir?- Santiago se paró delante mío evitando que me lanzara a Nadia- suéltame! No le aré nada porque no valen nada! Absolutamente nada! – se me cayeron algunas lagrimas-

-Andrea no sigas, mira cómo te pones-dijo Jack fingiendo preocupación-

reí irónicamente- ¿a caso te importa como me pongo? Si no te importa hacerme esto no te debería importar lo que me pase! Eres un imbécil y tu una maldita traidora, hacerme esto no tiene perdón-seguían cayéndome las lágrimas- mientras yo muriéndome por dentro con una maldita crisis emocional, intentando recuperarme para ustedes! Carajo! Para estar bien con ustedes, con mi supuesta mejor amiga y mi supuesto novio- les gritaba muy molesta y con algunas lagrimas que salían como acto natural de dolor.