Quédate Conmigo

CAPÍTULO 11

Max

 

Desperté y ví la hora en mi teléfono eran las 7am era viernes, hoy no iré a la oficina, es lo bueno de ser el jefe significa que puedes tomarte el día sin rendirle cuentas a nadie.

Aparte las sabanas de mi cuerpo y mi querido amigo ya estaba despierto y como no estarlo sí anoche no dejaba de pensar en esos ojos verdes y labios carnosos. Fui al baño a darme una ducha para relajarme sin embargo aún seguía erecto, es que esa mujer me va a matar sino la tengo conmigo pronto, por lo que no me quedo otra hacer yo mismo el trabajo con mi mano.

Una vez relajado, bañado y vestido con un BlueJens y una camisa de vestir, cuando no voy a trabajar me gusta vestir sencillo. Salí del Penthouse en busca de mi auto para ir a esa cafetería a desayunar.. esta bien! También para verla a ella, no sé lo que me pasa pero tengo que verla. Al entrar en la cafetería me senté en la misma mesa del día anterior cuando vine con Becca.

- Buen día, soy Kate. - Dice una chica con una sonrisa pícara en su rostro, es bonita tenía el cabello rubio y unos ojos marrones. Pero no nena, hoy no estoy disponible hoy quiero a Jen. - Desea algo del menú?

- Buenos días. - le respondí. - Si, quiero unos panqueques y un capuchino por favor.

- Muy bien, desea algo más? - dice luego de anotar y subir sus pechos. Si, ya sabía que es lo que insinúa.

- Si - le dije, ella prestó atención con una sonrisa. - Quisiera saber si la otra camarera está disponible - mire al mi alrededor pero no ví a Jen, regrese mi vista a la chica con el delantal.

- Otra camarera? - pregunto con sus cejas fruncidas y yo asentí- en este turno no hay otra camarera sólo yo. - dijo aumentando su sonrisa, sí sigue así se va a parecer al Guasón.

- Si, si lo hay. Ayer me atendió otra chica. - le dije ahora serio, no me iba a mentir.

- Ahh - dijo ahora con cara de decepción. - buscas a Jenny - asentí - ella no es camarera - ahora fui yo el que ha fruncido el ceño confuso - ayer ella hizo del puesto porque no había una, al parecer la otra chica renunció inesperadamente y no tuvo de otra que atender ella. Yo comencé hoy. - me explicó.

- Ok. Pero.. Si trabaja aquí entonces? - le pregunté ya desesperado.

- Eh si, es la encargada del lugar.

- Bien, necesito hablar con ella puedes llamarla por favor? - le pedí con una pequeña sonrisa.

- Si, claro. - dijo ahora sin ninguna sonrisa en su rostro. Sí, no me interesas tú sino Jenny. - y ya le traigo su pedido, con permiso. - ví que entró por una puerta que estaba a lado de Caja, quizás allí era donde se encontraba ella.

Después de unos minutos Kate salió y detrás de ella venía la mujer que me tiene loco. Nuestras miradas chocaron y no aparte la mía de ella hasta que estuvo frente a mi.

- Hola preciosa - Me levanté para saludarla, pero ella retrocedió un paso. - como estas?

- Qué quieres? - pregunto directo. No entendía su actitud, pero ya lo descubriría.

- Vaya, que bonita forma de saludar preciosa. - le dije con el ceño fruncido.

- Eh, lo siento. Es que me extraño que quisieras hablar conmigo - Me senté y le hice seña para que hiciera lo mismo, ella dudo pero al final se sentó al otro lado de la mesa frente a mi. - y bien, me dirás para que soy buena? - oh nena, espero que con esa boca y ese cuerpo seas buena en muchas cosas, pensé.

- Quería saludarte y saber cómo estas - le dije alzando la comisura de mis labios.

- Estoy bien Max.. Otra cosa?

- Que hice para que me trates así? - le pregunté.

- Dónde dejaste a la chica con la que viniste ayer? - dijo alzando la ceja y evadiendo mi pregunta pero luego se retractó- olvídalo, no me interesa.

- Rebecca? Que tiene que ver ella en esto? - pregunté confundido, porque me pregunta por mi hermana, no lo entiendo.

- Escucha Max, no quiero tener problemas con la pelinegra, agradecería que te alejaras de mi - dijo para levantarse.

- Espera - la tome de la mano, sentí una corriente al tocarla y al parecer ella también lo sintió por que retiro su mano inmediatamente y me miró y se volvió a sentar. Aguardamos silencio tras unos segundos, había llegado mi desayuno - has desayunado? Sí no es así quisiera invitarte a desayunar conmigo.

La camarera simplemente nos miraba a ambos y esperando respuesta de Jenny, quizás ya se le ha pasado el que no quize nada con ella.

- Ya desayune gracias. Pero podrías invitarme un café. - dijo finalmente. Kate lo anotó y se retiró, esperé a que dejaré el café y se marchará para seguir con la conversación.

- Ahora si. Puedes explicarme porque tendrías problemas con Becca y porque tendría que alejarme de ti?

- Si que eres descarado - dijo tomando el café y yo fruncí mi ceño, no entendía porque lo decía - de verdad me pones cara de tonta? Quizás te guste engañar a tu novia con otras mujeres, pero yo no quiero y no me interesa formar parte de esa lista.

No pude retener mi risa y ella me lanzó una mirada asesina, pero no me estaba burlando de ella sino de lo que dijo hace un momento. Becca mi novia?

- Lo siento - me disculpe después de parar mi risa - estas confundida. Primero Becca, Rebecca la chica "Pelinegra" No es mi novia es mi hermana menor y segundo no me voy a alejar de ti Jenny - le dije con una sonrisa - quiero saber más de ti, quiero que salgas conmigo esta noche.

Ella me miraba entre asombrada, confusa y avergonzada. Pero lo que respondió no me lo esperaba ningúna mujer me había rechazado, de hecho no le había pedido a una mujer salir conmigo ni me había interesado saber algo más allá de su nombre o a veces ni eso. Ellas llegaban y tan sólo con una mirada comprendían que quería.

- No, Max. No quiero salir contigo. 
 



#25473 en Novela romántica

En el texto hay: pasado, drama, amor

Editado: 13.01.2021

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