Primera parte: Nuestro comienzo

10 años antes

Corríamos entre risas, la profesora de gimnasia nos había descubierto salteando clases y huímos de sus gritos, bajo la amenaza de hacernos firmar y llamar a nuestros padres. Minutos antes de su interrupción, nos habíamos encontrado escondidos tras un roble, acurrucados contra su tronco grueso y arrugado, usando la sombra que nos ofrecía como protección contra el sol mañanero.

Teníamos las manos unidas mientras reíamos y compartimos los chismes que nos habíamos enterado en las horas que habíamos pasado separados.

Apenas llevábamos juntos unos meses, siempre nos habíamos visto desde lejos y si no hubiera sido por ti, Sylvain, quizás nunca me hubiera animado a asistir a esa fiesta. Si no fuera por tu amigo que nos hizo hablar por primera vez me hubiera perdido una de las mejores cosas que me pasó en la vida. Me hubiera perdido tu amor.