Era el día del cumpleaños de Jared y yo estaba que no me aguantaba.
Había parado las cosas con Liz antes que llegaran a mas, pero eso no quitaba que me sintiera culpable. Sabía que èl no se merecía lo que yo había hecho y aun a sabiendas que podrías perderlo de confesar mi desliz, pensaba en decirle la verdad.
Sin embargo no arruinaría la fiesta y le contaría todo después.
Pase a su casa por el con la promesa de que lo llevaría a cenar y que seriamos solo el y yo.
- Llevas un par de días dispersa amor, ¿todo bien? Digo se que he estado trabajando de más estas semanas, pero…
- No es nada- le sonreí lo más sincera que pude- hoy no hablemos de mi, hoy es tu dia especial.
- Moyra…
- no me reproches por favor. Mira, hagamos algo, por hoy olvídate de esto y mañana lo hablamos.- me acerque a plantarle un suave beso.- ¿te parece bien?
- a ti no puedo decirte que no- sonrió de una manera completamente tierna antes de volver su atención al camino. - Entonces, me llevaras a cenar y después…
- Todo es una sorpresa, de hecho te hare estacionarte lejos del lugar.
- Es la primera vez que mi cumpleaños es algo tan especial.
Le lleve con los ojos vendados del estacionamiento hasta que llegamos a la terraza. Se notaba nervioso, pero a la vez estaba contento y no dejaba de sonreír. No estaba acostumbrado a ser el centro de atención y sin embargo, se veía que al menos esta vez así lo había deseado.
Retire la venda de sus ojos, una vez que habíamos llegado a la terraza y noté enseguida su entusiasmo al ver a sus amigos y familia, diciéndole “Feliz cumpleaños” se giró de manera sorpresiva, para darme un apasionado beso, de esos que él no daba en público.
- Eres la persona más increíble del mundo, este es sin duda el mejor cumpleaños que he tenido.
- Pero apenas está empezando la cena- le susurré sintiéndome azorada.
- y aun así ya es el mejor. - me tomo de la mano y comenzamos a saludar a los invitados.
Jared estaba irreconocible, pues no solo era la persona más sociables, si no que me sacó a bailar, se tomó unos tragos, estuvo cariñoso con su mamá y hasta con Lizz.
La música era agradable al oído y la noche nos había permitido alargar el evento un par de horas más, dejándonos solo con el círculo más cercano de amigos.
Me encontraba platicando con el mejor amigo de mi novio, Armando, quien me comentaba que Jared estaba irreconocible desde que estábamos saliendo.
- De verdad Moyra, estaba loquito por ti y cuando comenzaron a andar, se subió a una nube y no lo hemos visto aterrizar desde entonces. De hecho creo que de no haber organizado esta fiesta, aun lo tendrías a tus pies.
- Me alegra como no tienes idea el que él sea feliz, pues también ha sido increíble estar con él.
- me dijo que venias de una relación tormentosa o algo así. No lo creo. Eres tan dulce, que qué patán se atrevería a ser un barbaján contigo.
- Solo uno demasiado idiota para no notar la gran mujer que tiene a su lado.- dijo Liz a mis espaldas.
- Tu opinión no cuenta Lizz, ella es tu mejor amiga- le respondió Armando jugando.
- Si bueno, por ese mismo motivo la conozco mejor que mi hermano.- me abrazo de la cintura- Lo bueno que llego mi hermano en su dorada armadura y conquistó el corazón de Moyra.
- Ya has bebido de más- le susurre antes de soltarme.-Aunque Lizz tiene razón, la otra persona no valía la pena, ahora lo sé gracias a Jared.
- Ya me los imagino en unos años casándose en una boda de los más cursi.
- Así como tú con tu zorra esposa- soltó ácidamente Liz.- Aunque debo admitir que es un encanto en la cama.
Armando solo la veía entre molesto y sorprendido.
- No sé de que hablas Liz. Moyra tiene razón, ya te has pasado de copas.
- Podre estar borracha, pero nunca olvido a una mujer con la que me acuesto y tu esposa es una de ellas. Por cierto, gracias por las vacaciones en Canadá, no sabes cómo las disfrute.
Esta ocasión sí que estaba molesta y casi se le va encima a ella, de no ser porque yo me interpuse en su camino.
- Ella me dijo que se iría con un su hermana ese año que se fue a hacer su maestría.
- Se fue conmigo y por cierto, llevábamos un año ya de relación antes de irnos.
- No es momento para este tipo de espectáculos. Es la fiesta de Jared y no quiero que nada salga mal, Así que si seguirás exponiéndote Liz, será mejor que te pida un taxi y te vayas a casa.