Capítulo 10: Un día difícil

Hoy es el gran día, todo debe salir perfecto, en un par de horas se hará el cambio delante de la mesa directiva, y por dicho motivo hoy decido esmerarme un poquito más en mi arreglo personal, siempre voy presentable pero hoy le doy un plus, elijo un vestido color azul marino que tiene un cinturón que define mi cintura, lo acompañe con un saco en blanco para tener un color diferente, y unas zapatillas también en blanco, en esta ocasión me maquillo con base y corrector, aunque no soy muy experta y o casi no me gusta, pero hoy la ocasión lo amerita, dejo mis ondas sueltas y bien acomodadas, me veo ante el espejo y no se si puedo decir que me agrada lo que veo, pero se nota que esto maquillada y arreglada, el espejo me dice que estoy muy delgada, mis piernas están muy flaquitas y siento que no tengo cintura o caderas, antes del accidente era un poco más rellenita, o mis piernas un poco diferentes, la pierna izquierda se fracturó sumado al tiempo en cama, quedaron mmmmm.... Diferentes

Tomo mis cosas y me dirijo a la salida de mi casa, es bastante temprano, pero hoy debo llegar mucho antes de lo usual, ya que el servicio de cátering estaran alrededor de las 7:30 o antes para traer los bcadillos y aperitivos que se serviran para los directivos, así como preparar carpetas y un sin fin de cosas pendietes más, y eso que apenas va comenznado el día, no imagino como sera lo que resta de este.

Ya que hoy sali miucho antes de lo usual, llego exactamente a las 7:00 am a la oficina, justo cuando recibo una llamada de Sofía.

-Evelyn, que bueno que contestas - exclama bastante agitada

-Sofía ¿que pasa? ¿estás bien? ¿ya estas por llegar? - es lo primero que pregunto por inercia - por favor dime

-Cuál de todas respondo primero si no me dejas hablar mujer - dice riendose un poco, entonces no es tan grave como pense - Yo estoy bien, no me paso nada malo, pero no, no estoy por llegar, ocurrio un incidente con el salón, me avisaron hace un rato y como yo soy la secretaria de presidencia a la primera que le informaron fue a mi, asi que voy de camino hacia alla - explica muy rápido, sin emabrgo le entiendo a la perfección - Ahora que si me preguntas que fue, no lo se exactamente, en cuanto llegue alla te infromo, pero honestamente no creo llegar a tiempo para la junta, pronto sera hora del tráfico matutino y eso me retrasa, ¿podrias encargarte de todo tu hoy? al menos hasta que llegue.

-Por supuesto que si Sofi, somos un equipo, yo por mi parte ya estoy aquí en la oficina para recibir al catering, pondre las carpetas y lo que resta, asi que tu ocupate allá y yo por aca - este día no podia empezar peor - por favor me mantienes al tanto, cuidate.

Sin mas colgamos la llamada y me dispongo a prender mi maquina, mi cafe matutino no puede faltar, prendo la cafetera y me espero ahi un par de minutos mientars tomo un vaso de agua para mis medicinas, cuando el café esta listo lo sirvo en una taza y lo preparo a mi gusto, estoy degustado mi taza de café y en verdad me tomo el tiempo para hacerlo ya que este día será emocionante como estresante, siento una presencia detrás de mi.

-Una café por favor - su voz... fuerte y ronca, que me gusta mucho pero a la vez me intimida, he aprendido a distinguirla en cualquier lado, giro sobre mis talones y lo veo justo a un paso de distancia mío, su loción invade mis fosas nasales - si ya terminó de estudiar me, sería muy amable en darme una taza de café.

-Sí, si señor, enseguida - me doy vuelta otra vez para abrir la alacena y sacar su taza personalizada, pero no la alcanzó ni de puntitas, Sofía es mucho más alta que yo.

-Yo te ayudo - susurró en mi oído haciendo que me asusté y provocando que tire un vaso que al impactar contra el lavatrastes se rompa en muchos pedacitos y yo retroceda por instinto empujándolo a él también y ahora es la taza la que corre la misma suerte que el vaso - En verdad eres torpe, tonta y descuidada - habla en voz baja, siento su mano alrededor de mi cintura.

-Lo..., lo lamento señor - me separó inmediatamente de él su cercanía, su mano, no sé, fue como si una corriente me atravesará el cuerpo - Me asusté, pero yo misma le repondre su taza - no se si fue imaginación mía tal vez no, pero creo alcance a ver una pequeña sonrisa.

-Dejalo así, yo me sirvo, vete a trabajar, espero que eso sí lo sepas y puedas hacer bien- vuelve a utilizar ese tono mordaz y grosero conmigo, salgo a toda prisa de la cocina para evitar otro accidente con mi torpeza.

Justo en ese momento me llaman del servicio de Cátering, ya están aquí así que me dispongo a recibirlos cuando se abren las puertas del ascensor, y los veo entrar con cajas y por el otro ascensor vienen con las mesas y lo demás, uno de esos jóvenes pasa y creo reconocerlo o al menos de que lo he visto en algún lugar. La chica encargada se presenta y me dice que se llama Marcela y es su equipo de staff, los llevo a la sala de juntas para que hagan su trabajo, mientras reviso mi teléfono y veo que Sofía me ha escrito diciendo que el problema es que se rompió una tubería que daño parte de las decoraciones así como la madera del salón, así que ni hay agua en los sanitarios y deben limpiar otra vez. ¡Genial! ¿Que más nos puede pasar?

De reojo veo que están trabajando y el Sr. Cristóbal sigue en la cocina, cuando una voz me saca de mi concentración en los mensajes de mi amiga.

-Sabía que te conocía - una voz varonil me saca de mis pensamientos y levanto la mirada - eres la chica de la tintorería, a la que le cedí mi lugar - dice en tono alegre y también me da gusto verlo, fue muy amable conmigo aquella ocasión.

-Hola, si, si te recuerdo - digo un poco apenada, Por Dios esto de casi no hablar con hombres fuera del trabajo trae consecuencias a veces - tu salvaste mi día aquella ocasión, es una verdadera coincidencia.

-Yo no lo llamaría así, mejor dicho penseria que es el destino - no se porque pero sentí el calor subir por mis mejillas - Ahora entiendo la prisa de ese día, trabajas en una importante empresa y estás en presidencia, yo hubiera estado igual si fuera tú.