CAPITULO 14

CAPÍTULO 14

VELORIO.

GRETA.

Mi vestido negro tiene una silueta que se ajusta a mi cintura, para luego expandirse en un falda con tul del mismo color. Lo inusual y escandaloso de esta creación es su abertura hasta el muslo en la pierna izquierda, un diseño que en estos tiempo es considerado algo inapropiado y un tanto pecaminoso. Estos diseños audaces y reveladores apenas están empezando a introducirse en los círculos de moda de Francia y los reinos más progresistas.

Mi padre, al verme casi le da un ataque al corazón, pues para él y la mayoría de la sociedad, este vestido es una provocación inaceptable. Representa una ruptura con las normas de recato y pudor que se esperan de una princesa, debido a poca su comprensión, de que el mundo esta evolucionando. No obstante, yo estoy adelantada en ese sentido, pues me di cuenta de este estilo por las constantes revistas que mis hermanos me traen de sus viajes. haciendo amante y fan de estos estilos.

Lo inusual es que, al momento de crearlo nunca llegó a mi mente que lo utilizaría en estas desafortunadas circunstancias, en realidad pensaba usarlo en mi presentación oficial, mostrado lo que esa práctica representaba para mi, la opresión y el arrebato de mi libertad.

Entramos a la capilla y como era de esperarse somos el centro de atención y no es para menos. Además de mi vestido extravagante, somos el reino que siempre han visto como enemigos, que estemos aquí representa más de lo que el mundo se podría imaginar.

Los rumores poco disimulados no pasan desapercibidos para mí, pues sé que soy la principal protagonista de todos ellos; "¿Ella no fue la quejó al príncipe con la mano estirada?, ¿Qué hace que con los monarcas Blackfhor? ¿Cómo osa en ponerse ese vestido? ¿Cómo vienen aquí después de su declaración de guerra?"

Porque si, continúan con su estúpido pensamiento de la declaración de guerra. Aun cuando el príncipe escribió explícitamente que mi reino no realizó la broma con intención de una declaración formal, aunque de recalcar, lo que escribió no fue de mi agrado, ya que se dedicó todo el artículo a mencionar que la broma había sido ejecutada por una malcriada que no sabía el significado del respeto y la autoridad, ¿Pueden creerlo?, me rebajo a sólo ser una niña malcriada, cuando mi impulsos eran muy válidos y razonables.

"No trates de justificar lo injustificable" "Fue un acto estúpido". Ruedo los ojos ante mi pensamiento, a veces odio a mi inconsciente, parece ser más mi enemigo que mi amigo.

Al velorio sólo decidimos venir tres de la familia real, tampoco somos tan irracionales para dejar el reino sin una autoridad, así que se decidió que mi madre se quedara haya y aunque no pensamos quedarnos más de 24 horas en el lugar, es fundamental nunca meter todos las manzanas en un saco, hoy sólo vinimos mi padre, mi hermano Mayor y mi persona.

Cada vez nos acercamos más al pódium, donde están la reina y el príncipe, pero con la poca disposición de armar un escándalo aquí, decido que lo mejor sería sentarnos, un poco alejados de la tarima principal, así que jalo el brazo de mi padre, cuando observo tres puestos vacíos.

— Deberíamos pasar desapercibidos y ahora sólo hacer acto de presencia, no sabemos cómo podría reaccionar el príncipe al vernos en un momento de lamentó — informó y mi padre asiente ante mi observación, nos ubicamos en los banquillos que no son nada cómodos y nos disponemos a escuchar el recital del obispo, miro a mi alrededor y me sorprendo cuando veo a los monarcas del reino Bolfhert, sabía que su política es no meterse en las discusiones y ser un reino pacifico, pero me genera curiosidad que los ha llevado a venir aquí.

Se encuentran dos escalones más debajo del príncipe, en la izquierda, nosotros estamos en la derecha, por eso se me hace más fácil hacer un recorrido de todo el salón. Aun sin quererlo mis ojos van a el, en la parte delantera, a su lado como lo suponía, estaba la reina, pero junto a ellos estaba dos personas mas que no había contemplado, estaba su primo y una chica que llora desconsolada, ¿Quién será esa chica?

Esa interrogante me hace pensar si acaso los reyes tuvieron otro hijo, pero así como llega se descarta, pues se que el príncipe es el único heredero, debido a que la reina no pude concebir mas, también llego a contemplar si puede ser hermana del primo de este, pero al ver su interacción algo me dice que no lo es, pero entonces ¿Quién es?, tiene que ser importante para que este en el pódium, pero sobre todo para que el pueblo Calferth la acepten en ese lugar, cansada de pensar sobre el asunto, solo respiro y cierro los ojos.

"¿Quien sea?, pronto lo averiguare".

Observo fijamente a el futuro rey y no es sorpresa para mi, que no haya una sola lagrima de tristeza en su rostro, se como debe ser la conducta de la realeza ante estos acontecimientos. Me lo han enseñando desde que soy niña, no podemos mostrar debilidad ante los demás y lastimosamente el llanto en mi mundo es relacionado a ello, la reina llora pero son pocas las lágrimas para lo que se esperan, cuando se pierde a tu compañero de vida, su primo también sólo está ahí, mirando al ataúd, sin una expresión que muestre qué pasa por su mente y mucho menos por su corazón.

La que se encuentra desconsolada es la chica, que llora en silencio mientras se aferra a la foto del rey, lo que me lleva a pensar que tal vez no es de la realeza, pues, aunque sea lo mas adecuado nunca se nos permitiría tal espectáculo, pero tiene que serlo para estar en el lugar que esta, entonces ¿Por qué se comporta así?. Lo mas raro es que nadie parece asombrarle su actuar, al menos no a sus súbditos que se encuentran en lágrimas al perder a su rey.

La reina se levanta un momento de la tarima principal, me imagino que para tomar aire o agua, según lo que tengo entendido el rey será velado por 9 días, hoy apenas van en el quinto, aunque fue enterrado al día siguiente de enterarnos, mi padre pensó mucho mi propuesta después de mencionarla en aquella cena.