Rechazada Por El Alfa

Capitulo 17

La De cisión De Aylin.

El silencio se extendió entre ellos como una sombra densa. Aylin miró a Ethan, cuya mirada reflejaba una mezcla de preocupación y furia contenida, y luego volvió su atención a Damien, quien la observaba con una sonrisa paciente, como si ya supiera cuál sería su respuesta.

Su mente estaba en caos. Todo lo que creía saber sobre sí misma se estaba desmoronando. No era solo una humana. No era solo la chica rechazada por el Alfa. Era algo más. Algo poderoso.

Pero ¿qué significaba eso?

—No tienes que escucharlo —insistió Ethan, apretando su brazo con suavidad, como si temiera que si la soltaba, ella se perdería para siempre.

Aylin tragó saliva.

—¿Y si tiene razón? —susurró, más para sí misma que para los demás.

Ethan gruñó.

—No la tiene. Solo quiere manipularte.

Damien rió suavemente.

—Claro, claro. Porque yo soy el villano y tú el noble protector, ¿verdad, Ethan? —sus ojos centellearon con burla—. Pero dime, ¿qué has hecho por ella? La rechazaste. La apartaste. Y ahora esperas que confíe en ti ciegamente.

Ethan endureció la mandíbula, pero no respondió.

Aylin sintió un peso en el pecho. No podía negar que las palabras de Damien tenían algo de verdad. Ethan la había rechazado. La había hecho sentir insignificante.

Pero también la había protegido.

Y ahora… ahora la estaba eligiendo.

Aylin cerró los ojos un instante, tratando de calmar la tormenta en su interior. Cuando los abrió, ya sabía su respuesta.

—No voy a ninguna parte contigo, Damien —dijo con firmeza.

Damien la observó por un momento antes de soltar un suspiro resignado.

—Vaya, qué decepción —murmuró—. Pero no te preocupes, Aylin. Nos volveremos a ver.

Y en un parpadeo, desapareció entre los árboles.

Aylin sintió sus piernas temblar. Todo su cuerpo estaba en tensión, como si acabara de librar una batalla sin moverse del sitio.

Ethan la miró con intensidad.

—Hiciste lo correcto.

Aylin exhaló lentamente.

—No sé si fue lo correcto. Pero fue mi decisión.

Ethan asintió y, por primera vez, una chispa de orgullo brilló en sus ojos.

—Eso es lo que importa.

Aylin aún no sabía lo que significaba ser la última descendiente de la manada Luna Carmesí. No entendía el poder que supuestamente dormía dentro de ella.

Pero sí sabía una cosa.

Ya no era la chica asustada que necesitaba que la protegieran.

Y fuera lo que fuera lo que viniera después, lo enfrentaría con la cabeza en alto.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.