Ese día

Capítulo 30

1 semana después

Andrés me llamó hace unos minutos diciendo que vendría a casa, mis padres no se han ido, pero no veo problema y aprovechando que vendrá le contaré, le diré sobre nuestro bebé mostrándole las pruebas caseras junto con la del laboratorio.

Andrés: estoy a 5 min...

Alessandra: okey, amore

Alessandra: aquí te espero;)

Espere y espere ansiosa por su llegada, mentalmente repasaba mi discurso una y otra vez teniendo un buen final. Tocan el timbre sabiendo que es él.

–Hola, amore

–Hola - me besa - tenemos que hablar

–Si, eso mismo quiero yo - no dejo de sonreír 

–Lo que te diré es muy importante, Alessandra - dijo serio

–Lo mismo que te diré yo

Entra en la casa, pero no se sienta, solo se queda de pie paseando de un lado a otro moviendo su cabello con su mano, parecía nervioso

–Andrés, te amo mas que nada en el mundo, lo sabes bien - digo con voz temblorosa - nuestra relación es maravillosa, somos el complemento del otro aquí que creo que lo que vendrá seria lago que nos unirá mas a los dos porque...

–Amor, creo que es mejor que nos separemos - dijo él interrumpiéndome

–¿Qué dices? 

–Hay que terminar, Alessandra - dice sin más

–Pero... - me temblaba aun mas la voz - ¿Por qué?

–No soy lo que necesitas, lo que buscas - tomo aire, sus ojos eran rojos - tus padres nunca aceptaran esto que tenemos, no nos comprenden así que...

–No, yo se que los puedo convencer, tan solo ellos... - dije preocupada

Esto no debería de estar pasando, así no me imagine la situación y ni siquiera le había dicho sobre ello. No me puede dejar, lo necesito conmigo, como amigo, como pareja o lo que sea, pero él es mi sol, ilumina mi camino en la maldita oscuridad.

–Si no aceptaron nuestra relación desde un principio, ¿crees que lo hagan ahora? - grita soltando lagrimas sin parar

–Es que, yo se que... - comencé tomándolo de su cuello acercándolo a mi, pero él me interrumpió

Soltó un suspiro, cerro los ojos y unieron sus frentes 

–Te amo Alessandra, te amo como nunca amé a nadie, pero hay que aceptar que nuestros estilos de vida nos lo impiden. Tu estas acostumbrada a una vida llena de lujos y donde todo lo tienes a la mano, aunque no lo necesites y yo... yo estoy acostumbrado a siempre trabajar para obtener lo que tengo, visto y como, pero, y si seguimos juntos ¿de que vamos a vivir? - no puede estar hablando enserio, él no es así... desde cuando lo estará pensando 

–Yo puedo trabajar, no me importaría, si así puedo estar a tu lado como hasta ahora - solté cada cosa que pasaba por mi cabeza, pero no le importaba

–No debería de ser así, yo debería de preocuparme por ti. Debería de complacer tus necesidades sin problemas, no debería arrastrarte a mi estilo de vida cuando tu estas mas que cómoda y acostumbrada a la tuya. De amor no se vive Alessandra y para estar juntos necesito primero tener lo necesario para ti, para nosotros, ser alguien digno para ti.

>> Tan solo espera, espera a que yo llegue a ti y tenga las posibilidades para que estemos juntos sin preocupaciones, porque por mas que me duela admitirlo, tu padre tiene razón, yo en este momento no tengo y no puedo ofrecerte nada mas que todo mi ser, pero eso no es suficiente para estar a tu lado.

–Para mi si, no es necesario consigas nada, los dos trabajaremos, viviremos juntos en una casita lejos de todo y de todos, en un campo como dijimos ambos hace tiempo, lo que digan mis padre no importa y si me dejas hablar... 

–Mi decisión ya esta tomada Alessandra, iré en busca de un futuro digno para los dos y hasta que eso no pase – tomo un respiro y cerro sus ojos por un momento – no regresare a ti. 

–No me digas eso – no dejaba de soltar lagrimas, me separé un poco de él para mirarlo fijamente – no me dejes así, te lo pido, eres todo para mi, tu me ayudaste a salir de mi depresión, tu presencia me ayuda a no tenerla tan seguido y lo que haces ahora hará que regrese. 

>> Sin ti no podre subsistir Andrés, te necesito a mi lado, que calmes mis demonios, que me cuides cuando quiera cometer otra estupidez. Eres mi amigo, mi novio, mi confidentes, mi bastón para sostenerme y no caer en la maldita oscuridad en la que me quieres dejar por palabras idiotas que es mas obvio dijo mi padre 

–No pienso dejarte, tan solo espérame por favor – me tomo de las mejillas depositando un beso en mi frente – tan solo pienso en lo que es mejor para los dos. Regresare por ti, lo prometo. Te amo

–Yo también te amo, por eso te pido que no me dejes, yo necesito decirte... – lo sostuve del cuello de su playera

Él se soltó de mi agarre mirándome a los ojos dándome un beso lleno de amor que ya no iba a recibir por palabras y actos de mi padre, done el dinero quitándome una ves mas la felicidad que tenia hace unos días. El beso tenia sabor a lagrimas y desespero hasta que Andrés decidió que era suficiente para los dos, así que se separo de mi yendo de nuevo a la puerta. Voltea antes de irme mirándome fijamente con sus ojos rojos llenos de lagrimas. 

–Adiós, mi flor... 

Y lo vi irse, saliendo por esa puerta cerrando lentamente ese camino que había dejado para mi, no pude decirle, mi cuerpo que pasmado de un momento a otro. Caí de rodillas y tomando aire suelto un enorme grito desatando la ola de lagrima en mi, abrazo mi abdomen lamentando el no haberle dicho sobre nuestro hijo y no sabré si se lo podre decir, no hay una fecha exacta cuando vuelva, no sé si de verdad regresara.

Mi llanto fue demasiado que ni podía ver, solo sé que mi mente se apagó derrumbando mi cuerpo y escuchando voces a lo lejos. No sabia que había pasado pero sabia que si despertaba todo dolería de una manera tan inimaginable que no podría soportar, temiendo por mi vida y la de mi pequeña semillita.