Regresé por ti

Un cuento modificado

Capítulo 39

 

ALESSANDRA ANTONELLI:

 

En el momento que entramos a casa, después de despedir a Andrés, ubico a Emir con Sebastián en la sala platicando de no sé que.

–Hola, hola, chicos

–Zio Sebas –corre a saludarlo

–Dulzura, ¿Cómo estas?

–Super duper ¿y tu?

–Igual, vengo a ver a tu mami por trabajo

Se ponen a platicar y yo me acerco a Emir sentándome a su lado y dándole un beso en los labios.

–Hola –me dice cerca de mis labios –¿Dónde estaban?

–Con Andrés 

Pone su cara de incomodidad y se aleja un poco, pero yo sujeto su rostro para que no me aparte de mirada. 

–Emir, no te enojes

–No me enojo –entrecierro los ojos –lo juro

–Aja –le doy un casto beso –quiso pasar un tiempo con Stella, así que fuimos a comer y platicamos un poco

–Que bien –me dice –enserio, que bueno que se integre a la vida de su hija –remarca el final –tengo que hacerme a la idea de que en algún momento ya no seré su padre ¿no?

–Emir Stevens, concéntrate nada mas en el ahora por favor y quiero que siempre tengas presente que fuiste, eres y serás su padre, la viste nacer, crecer y llamarte papá a ti y solo a ti

–Esta bien, es que mis nervios de que separen de ustedes

Me comienzo a reír por las tonterías que dice, antes era un chico atrevido y le valía cacahuate que tuviera novio invadiéndome a cada nada, y ahora veo a un hombre temeroso. 

De verdad que lo quiero un montón. 

–¿De que te ríes ahora?

–Tu no eras así, ¿Qué te paso?

–Tu me hiciste así, mujer

–Ah, ahora yo soy la culpable

–Claro, me acostumbre tanto a todo esto, que me da miedo perderlo

–Y no lo harás –lo abrazo –deja de ser tan niña y saluda a Stella que no lo haz hecho

–Cierto –se voltea hacia mi niña que sigue platicando con Sebas –Stella, cariño ven a saludarme, te olvidas de tu propio padre

–Obvi no papi

Se baja del regazo de mi amigo y camina hacia Emir, este la coloca en sus piernas y la llena de besos al igual que ella a él. No pienso que mi niña pierda a Emir, pero tampoco pienso evitar que Andrés esté con ella y que en algún momento sepa la verdad; yo sé que ella se sentirá desubicada, pero al final sabrá como encontrarse con todo lo que se aproxima. 

–Ale, tenemos que hablar sobre la empresa –me indica sebas

–Claro, vamos al despacho

Los dejamos solos para ir a solucionar lo que espero no sean mala noticias.

–¿Qué hay de nuevo por allá? –digo sentándome en la silla detrás del escritorio

–Bueno pues, todo va de maravilla, inversionistas van y vienen, pero necesitamos proyectarnos más lejos así que me contacte con una empresa de comerciales para dar a conocer nuestro producto

–Esta súper bien, Sebas –me recargo en el escritorio –¿Y ya tienes propuestas para donde poder hacer el comercial?

–Si, tengo tres de hecho –me da tres carpetas de diferentes colores –la de color amarillo es muy conocida, así que pide el 45% de ganancias que tenga el producto

–Están locos –me rio y la aviento –y dices que es de las mejores

–Pues de cierta manera si –se ríe, pero continua –equis, la de morado pide un porcentaje más bajo, pero a mi en lo personal no me agrada, a pesar de que es buena es una empresa muy chica, siento que no llegaríamos a muestra meta de darnos a conocer más lejos

Alejo también esa y tomo la de color azul, viendo sus últimos trabajos dado en otros países, esta si me gusta, buenas estadísticas, no pide ni mucho ni poco y están trabajando en uno de joyería, mejor, cuando trabajan con joyería es porque son excelentes ya que es difícil de visualizarlos en un a pantalla para atraer gente a la compra. 

–Esta me gusta

–A mi también, aunque tengo que decirte algo de esa

–Tiene algo malo como las otras o…

–No, de hecho, yo la encuentro de lo mejor

–Entonces…

–El presidente de esta es nadie mas ni nada menos que Andrés Herrera Reyes

Vergine santa –suelto en voz baja cayendo en el respaldo del asiento

–Así es, el pobre jardinero, que hora es un maldito suertudo, es la mejor opción para trabajar

Mana, te das cuenta de que nuestro jardinerito mejoraría la empresa que hora es de su hija.

Justo me di cuenta de eso conciencia.

–Yo digo que lo vayas contactando para nuestro acuerdo




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