©2019 Katherinne Álvarez

Porque la lluvia se llevó sus lágrimas;
Que entre el pesar y el fuego ardían,
Pues pesaroso estaba su corazón
Y su voluntad casi sucumbía.
Entonces en medio del llanto y el dolor;
Florecieron nuevos sueños y alegrías
Ya que alguien más le demostró que en el amor
Los reveses de la vida con una razón aparecían.