Rey Malvado

CAPITULO 50 EN ESTA HISTORIA NADIE SALVA A NADIE

Cuando estas destinados para el dolor, ser feliz solo es un sueño

Flasback

Fiorella tenia hambre, y aunque ya habia podido lidiar con esto, ya el dia anterior por la mañana se habia comido el ultimo pan, por lo que ya llevaba mas de 36 horas sin pasar bocado y empezaba a experimentar mareos y nuevamente iria a para a un hospital publico para que la hidrataran y esto solo incrementarias sus deudas.

Asi que entro a aquel minimercado con la intencion de tomar dos barras de chocolate y cereal para al menos tener proteinas para su amiga y para ellas y asi se aguantaran hasta que cobrara su quincena de la lavanderia donde trabajaba y Sharon encontrara empleo pues en estos momentos se encontraba desempleada.

Al menos ya era un avance el hecho que no vivieran en la calle sino en un humilde apartamento en la zona marginal de Milan, pero ya ese mes pudieron cancelar el alquiler y su despensa estaba totalmente vacia.

LLevaba puesta una chamarra con capucha y jeans desgastados, unos tenis que habian visto mejores dias que encontro en un container.

Disimulo por un instante caminando por los pasillos pero estaba muy pendiente de divisar donde estaban las camaras.

En la calle se aprende de todo y en su paso por ella convivio con chicos que sabian los mil y un trucos para robar, pero ella jamas quiso hacerlo, sin embargo hoy lo haria por primera vez y solo esperaba no ser atrapada.

Finalmente vio el momento apropiado, un pasillo solo, sin camaras, pocas personas en la tienda y cajeras ocupadas en un chisme de novios infieles.

Respiro profundo para calmar sus nervios y rapidamente se enbolsillo las dos barras de chocolate y cereal, las cuales tenia la intencion de reponer cuando cobrara su quincena.

Lo que no se dio cuenta es que si era observada por alguien.

Fiorella se enfilo ahora a la salida pero antes de cruzar, un sujeto le llama.

Es el guardia de seguridad

Su corazon se llena de susto, se gira y sabe que ha sido descubierta.

- Vuelvete, necesito requisarte- exigio el hombre.

Pero lo que jamas pudo imaginar que alguien saldria en su ayuda.

- Es idea mia o juzgas a la chica por su apariencia, eso se llama prejuicio.

- Estoy en mi derecho de revisar-se defiende el malencarado hombre.

- No has revisado a ninguna de las otras personas que han salido, lo que confirma mi teoria, revisala y si no tiene nada yo como abogado puedo entonces levantar un expediente en contra de l la politica discriminatoria de este lugar y perderas tu empleo.

El tipo literal cambio la cara y termino cediendo.

- Se puede ir.

Fiorella que seguia muda salio rapidamente, sin darle tiempo a agradecer a aquel extraño,

Por lo que quedo afuera esperando al sujeto para darle las gracias.

Tan pronto salio se dirigio directamente a ella y le regalo una sonrisa que lleno un vacio que habia en su corazon.

Tenia 19 años y no se habia enamorado.

Tenia muchas otras prioridades como llegar a fin de mes con las facturas x pagar, la comida, los servicios, el pago del hospital donde adeuda una buena suma por varias veces que ha estado hospitalizada debido a su desnutricion.

- Estabas esperandome-pregunta y ella nota que se le hace unos hoitos hermosos y sus ojos brillan.

- Queria darle las gracias- le expreso sintiendo una gran empatia a quien ahora veia como su salvador.

El sujeto la miro con detalle. notando su palidez, su delgadez, su pelo quebradizo.

- Se que robaste, dos barras de chocolate ¿porque solo eso?- señalo pues el si la habia visto cometer el robo.

Totalmente avergonzada bajo la mirada y respondio.

- Para comer

Confirmada su teoria que esta chica vivia en condiciones pauperrimas, pobreza extrema y por eso su delgadez mostrando signos de denutricion.

- Estas muy delgada, ¿desde cuando no comes?-le pregunto intrigado.

Sintiendose mas mortificada pues a pesar de vivir en la miseria, no queria inspirar lastima de nadie.

- Debo irme- dijo presta para irse.

Pero el sujeto la detuvo diciendole:

- Iba  a cenar y no me gusta comer solo, ¿podrias acompañarme?

Fiorella se quedo perpleja e iba a negarse, pero el la toma de la mano e insiste:

- No va a pasarte nada, conmigo estas a salvo.

!Que gran mentira!

Que descubriria mas tarde.


De esa salida supo que el se llamaba Angelo Diamonte, tenia 25 años, le gustaba surfear y tenia una vida acomodada.

- No comes mucho-  detallo el viendo que probaba de la lazaña pocos bocados.

- Estoy acostumbrada a comer raciones pequeñas- indico a modo de disculpa por nada le diria que tenia un desorden alimenticio a consecuencia de años de tener una alimentacion deficiente.

Al salir del restaurante el insitio en llevarla a su casa.

Al llegar su sopresa fue que el le dijo:

- Nos volveremos a ver Fiorella, tengo muchos planes para ti.

En aquel momento ella no malicio nada, seguia siendo tan ingenua a pesar de haber vivido en la calle y haber visto muchas cosas, salvarse de caer en la prostitucion o que la violaran.

Pero la maldad a veces se disfraza tras una fachada de bondad y lo descubriria pronto.


Angelo la invito a salir en varias oportunidades e incluso se aparecio un dia con una bolsa de mercado.

Sharon estaba feliz por su amiga pensando que habia encontrado el amor y alguien que cuidaria de ella.



#2492 en Novela romántica

En el texto hay: jefe, asistente, ogros

Editado: 28.11.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.