Andrés.
19 años.
Espero a que toquen la hora de salida fuera del instituto para poder ver a las personas que me han acompañado durante el tiempo que llevo aquí, quienes me ayudaron a adaptarme a pesar de la dificultad de la mudanza.
-¡ANDRÉS! - grita Clara lanzándose sobre mí en un abrazo fuerte - Debiste avisarme que ya estabas de vuelta.
Tuve que viajar fuera de Bolonia ya que mi abuelo se encontraba en el hospital y pidió que lo fuéramos a visitar, estuve fuera 15 días de los cuales el instituto me permitió faltar.
-¿Tanto me extrañaste? - pregunto besando su mejilla con cariño.
-Ni tanto, no te hagas el importante - dice separándose un poco.
-Que lástima, porque yo si - digo revolviendo su cabello claro.
-¿Podrían prestarme atención a mi también porfavor? Yo también soy amiga de ustedes - dice Aurora en tono de protesta - Porque no se confiesan ya y ponen fin a este teatro.
Directa, como siempre.
-¡Qué cosas dices Aurora! - dice Clara riendo nerviosa.
Si, estoy completamente enamorado de ella desde que la conozco y aún no me he atrevido a confesar mis sentimientos, tal vez por miedo, tal vez por cobardía.
No lo sé, tal vez no quiero perder su amistad al confesar lo que siento y si ella no siente lo mismo mi error podría arruinar nuestra amistad de años. Prefiero estar a su lado antes que perderla de todas las maneras.
-¿Nos vamos? - le pregunto a las chicas que tengo por amigas - Félix nos espera en el portón.
-¡Si! - contestan las dos al mismo tiempo.
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Tengo miedo, no sé porqué me deje convencer por estas dos.
Como me convencen tan rápido, en estos momentos es cuando me planteo el poder que tiene ambas sobre mí, más Clara que fue la que me convenció de aceptar esta locura.
-Tienen que tener cuidado, esto no es un juego - dictamino antes de empezar con esta locura - Clara, abrocha bien tu cinturón y toma el volante con seguridad.
¡Dios, ayúdame! No dejes que le pase algo a mi precioso auto.
-Coloca tu pie sobre el acelerador son presionarlo, gira la llave lentamente…
Minutos más tarde, después que le explicó a Clara y Aurora lo básico sobre las funciones y controles del auto, impresionantemente Aurora es buena y Clara sigue su propio ritmo.
-Clara no pasa nada si se apaga, es normal, estas aprendiendo algo que jamás habías hecho - trato de animarla al ver que no avanza un poco.
Con Félix y Aurora en los asientos de atrás, Clara empieza a poner en marcha el auto, estamos en una zona despejada para aprender a manejar.
-Clarita sin prisa, queremos seguir vivos - dice Aurora en la parte de atrás.
-No te preocupes ya le voy agarrando el hilo - dice sonriendo ampliamente.
-Clara, despacio - pido al ver que está acelerando más - Clara, despacio.
Vuelvo a decir cuando veo que se pone nerviosa.
-Santa María, ya me morí - dice Félix empeorando la situación.
-Felix calla por favor - pido cuando veo el nerviosismo de Clara.
-¡Andrés! ¿Qué hago? ¿Como freno? - exclama Clara ya nerviosa.
-¡CLARA! - grita Aurora…
-ME VOY A MORIR MAMAAAAÁ - grita Félix.
-¡ANDRÉS¡ - grita Clara.
Sin poder evitarlo tomo el freno de mano haciendo que el coche se detenga abruptamente mientras trato de calmar a los desquiciados que tengo conmigo y todo eso pasa a 10 km en menos de 10 segundos.
-Recuerdenme no volver a enseñarles ¡EN MI VIDA! - exclamo antes las dos locas que tengo y la gallina que nos acompaña.
-¡Yo porque! - grita Aurora en la parte de atrás - Es a esta loca que no le debes enseñar nunca.
Aquí vamos….
-¿Loca yo? ¿Quién era la que no dejaba de gritar?
Por favor Dios…. Auxilio…
-Calmense ya, no íbamos ni a 20 kilómetros, dejen el drama - dice el gallina luego de poder hablar.
-Lo dice el que lloraba hace un momento llamando a su mamá - digo con tono de gracia cuando el susto se me pasa -Bajen ya, mi auto no se merece que lo maltraten así.
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Al cabo de unas horas después del desastre, me encuentro con Félix, Aurora y Clara en los columpios de un parque.
-¿Qué planes tienen para este verano? - pregunta Félix tomando de su batido - Yo creo que visitare la playa.
-Suerte la tuya, a mi me toca visitar los viñedos con papá - contesto un poco decepcionado y no es que no me guste la cuestión era que quería pasar más tiempo con los chicos aquí en Bolonia.
-Yo iré con papá a ver los cultivos de un proyecto de la empresa - menciona Clara.
El papá tiene una empresa no tan pequeña pero conocida aquí en Italia en el campo de la agricultura, se encargan de la producción de ciertos alimentos y los distribuyen por Italia.
-¿Para qué irás? - pregunta Aurora - ¿Te convertirás en la CEO? De Andrés espero que acompañe a su padre al viñedo pero ¿Tu? Amiga no te queda, a ti te queda la cocina y la comida.
Y es verdad, Clara cocina como toda una chef y no solamente comida, los postres son su mayor fuerte.
-Para eso quiero ir, me llama la atención como es cultivar y producir la materia prima que se ocupa para cocinar - dice emocionada y me encanta ver ese brillo en su rostro porque no hay nada más hermoso que ver sonreír a Clara.
-¿Y tú qué harás? - le pregunta Félix a Aurora cuando ya dejó de atragantarse.
-Ir a fiestas, pintar y diseñar, aprovecharé el tiempo que tengo - dice limandose las uñas.
-Digno de ti - declara Félix.
Me levanto del columpio donde me encontraba anteriormente y voy directo donde Clara tomando su columpio y tirándola hacia delante y hacia atrás haciendo que agarre velocidad.
-Andres, basta - pide entre risas - Basta porfavor.
Vuelve a pedir pero hago caso omiso a su pedido.
-¡ANDRES, BASTA! - esta vez grita más fuerte haciendo que me detenga y ella salga detrás de mí por ende emprendo la huida corriendo tras unos toboganes, esquivando exitosamente las veces que intenta agarrarme.
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Editado: 19.08.2025