Ritorno

Capítulo 12.

Andrés.

Saliendo del restaurante y aún con la grata sensación de que Clara ya esté asimilando mejor mi regreso empezamos a caminar, Aurora va con clara al frente y los demás charlamos, sin previo aviso una chica de estatura pequeña choca con Clara haciendo su cuerpo tembalear, me detengo al ver lo que acaba de pasar.

—Oye, ten cuidado —reclama Aurora al ver que la chica no se disculpa.

—¿Por qué? —pregunta con cara de loca —¿Por qué te elige a ti antes que a mí?

Sin previo aviso las alarmas de mi cabeza se encienden al ver que la chica loca toma por los hombros a Clara, acto que hace que la aparte y posicionarla detrás de mí para protegerla de cualquier peligro.

—¿Porque te tiene que elegirte a ti antes que a mí? - vuelve a decir y ahí es cuando me doy cuenta lo que está por pasar.

—¿Que te pasa? Yo ni siquiera sé quién eres —reclama Clara aún detrás de mi espalda.

—No te hagas la estúpida, sabes a qué me refiero —exclama la rubia loca —intenta acercarse nuevamente y eso hace que Félix y Pablo se pongan a mi lado y Aurora detiene el paso de la chica.

—Mira chica, no sé quién eres pero no busques problemas —dice Aurora con una mano de teniéndola.

—¿Por qué a ti y no a mí? ¿Por qué? Mírate pareces una monja vestida así, simplona y sin gracia y mírame a mí, mi cuerpo es mejor que el tuyo. Te aseguro que a Lucas no le debes agradar ni un poco, todavía no puedo entender porque quiere estar contigo.

Ay Dios, eso era. Increíble, y eso que no tuve que hacer nada ya que el idiota de Lucas no pudo ni controlar a su amante. Lo que me preocupa es la reacción de Clara, nunca ha estado en esta situación, la mayoría de sus enamorados terminaban en “lo que alguna vez pudo ser” igual que yo.

—Oye idiota, quien te crees que eres… —exclama Aurora cuando siento que Clara intenta salir de donde la tengo, no pude retenerla por lo que sale a enfrentar a la chica.

—¿De qué estás hablando? —pregunta con el entrecejo fruncido —¿Quién eres?

—Talvez esto te saque de dudas —muestra un celular con fotos comprometedoras que si dan mucho de qué entender de la situación en la que se encontraban cuando fue tomada esa foto —¿Ahora sí puedes deducir a qué me refiero?

Clara se voltea a ver la reacción de nosotros y lo que pensé que haría no lo hizo, pensé que se rompería en llanto y que estaría furiosa agarrando de los pelos a la rubia loca, pero lo que hizo fue totalmente lo contrario a lo que yo había pensado y eso, la hace ver más hermosa.

—Mirate, nuestra diferencia es notoria. No sé cómo Lucas prefiere estar contigo antes que conmigo —compara en tono de burla.

Y la única que da pesar es ella por la pena ajena que está causando en estos momentos, ¿No tendrá cerebro? Como se presenta así vestida, oliendo a alcohol con la cara hecha un desastre haciendo escándalo por alguien que se nota a miles de kilómetros que no le interesa, en fin, la vida de las amantes.

—Si te refieres a que Lucas prefiere estar con una dama elegante, sencilla y con educación, haces muy notoria la diferencia entre tú y yo cariño. Yo no necesito andar detrás de las novias de los demás para tener el afecto de un hombre.

Esa sí es mi Clara, poniendo en su lugar a la rubia con clase y elegancia, me podría postrar ante ella en estos momentos pero no puedo.

—¿Cómo te atreves a decir eso? —exclama con un pobre intento de querer llevar al nivel de Clara y no solo en estatura si no en clase y educación.

—No, ¿Cómo te atreves tú? Al querer venir aquí hacer el drama en media calle diciendo estupideces que ni tú misma te entiendes. Te aconsejo que dejes de hacer eso ya que te haces ver como una pobre niña a la cual sus padres no supieron educar bien.

Si tuviera pompones de animadora al alcance en estos momentos empezaría a bailar y gritar el nombre de Clara, no solo es hermosa, es educada y no se deja intimidar por imitaciones baratas de Barbie.

Clara trata de marcharse nuevamente pero la chica la agarra del antebrazo y eso hace que mi mano se mueva automáticamente y se posicione sobre la mano de ella para que suelte a Clara, no tiene porqué tocarla.

—Suéltala —le digo con tono frío y la mirada dura haciendo que la chica suelte inmediatamente a Clara.

—Me estás lastimando —grita para llamar la atención, y me doy cuenta de que clase de persona es ya que no la estoy tocando fuerte porque estoy controlando mi fuerza, por muy desagradable que sea no tengo derecho a tocar una mujer para hacerle daño mucho menos para levantarle la mano.

—Andres, sueltala —me pide Clara poniendo su mano sobre la mía cuando la chica la suelta &No vale la pena ensuciarse las manos con eso.

A esta mujer me dan ganas de cargarla como campeona, si bien la que está más perjudicada es ella supo poner en su lugar a la imitación de Barbie sin verse afectada, aunque por dentro sé que tiene un volcán de erupción, la conozco bien.

Observo como Clara se vuelve a poner en marcha, lo que hace que los demás la sigamos dejando atrás al desastre de amante que tiene Lucas, pésimo gusto por cierto.

Al cabo de unos minutos caminando Clara nos pide que nos marchemos y la dejemos sola, cosa que no pienso hacer. Puede convencer a todo el mundo de que se encuentra bien, pero se muy bien que no es así por lo tanto decido seguirla unos metros más alejado de ella para darle su espacio, sin embargo no puedo evitar acercarme cada vez más.

—Dije que quería estar sola —dice cuando se voltea.

—Nunca dijiste que no podría caminar por el mismo camino que vas tú —contesto mientras subo mis dos hombros.

—Andres, déjame sola por favor. En estos momentos no quiero estar con nadie —confiesa con tono cansado.

—Solo sácalo, eso te hará bien —inquiero tratando de hacer que se desahogue —Sé que no tengo derecho a decir esto pero, Clara, sácalo y yo estaré aquí para escucharte.

Es mejor que se desahogue conmigo que lo guarde todo para ella, sé que si explota será mucho mejor sobrellevar esta situación, no sé cómo se siente en estos momentos pero si estuviera en su lugar se que estaría mal.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.