31 de octubre.
Hoy es noche de brujas, quizás uno de los mejores días del año, o al menos para mí lo es, no es que yo sea una bruja o algo por eso estilo, simplemente el mes de octubre y este día son de lo mejor de esta época del año, sin excluir claro navidad y año nuevo.
Me termino de aplicar mi maquillaje para mi traje de Harley Queen. Ya estoy totalmente vestida, y me encantó; estoy fascinada con este disfraz, quería ponerme algo aterrador, pero al final cambié de opinión el día sábado que estaba haciendo las compras.
Estoy escuchando música de con temática de Halloween, solo puse un playlist al azar con el tema, pero realmente me estoy centrando en maquillaré bien. Hoy será quizás una noche muy larga.
Casi estoy terminando de retocar mi maquillaje blanco que me cubrirá el rostro, el rojo y azul quedaron perfecto. Solo me falta retocar lo blanco de mi rostro, aunque me veo interrumpida cuando mi iPhone vibra, es Google fotos, recordando las fotografías de hace un año... no pasan muchas cosas por mi mente, le tomo con mi mano y abro la notificación. Lo primero que me muestra es una foto en donde estoy yo, vestida de Annabelle, Kevin de Scream, Oliver de Michael Myers, mamá de Jessica Rabbit y papá de Roger Rabbit. Me causa mucha risa ver la fotografía, pero es una risa mezclada con nostalgia al ver ese momento. Oliver ese día fue un poco a la fuerza, pero al final sí logró divertirse. Ese día fue maravilloso, dieron dulces en todas las casas, además de que caminamos muchísimo, la noche fue súper larga porque iniciamos como a las 6 de la tarde, y volvimos a nuestro hogar casi a la 1 AM. Me tocó ver muchas locuras que hicieron algunas personas, algunos disfraces creados desde cero, daban miedo, y más cuando se acercó las 12 de la noche.
Suspiro después de reír y contemplar la imagen. Creo que son fotografías que difícilmente se volverán a dar, aunque nada es imposible, pero las posibilidades son mínimas.
Vuelvo a terminar mi maquillaje, sonriendo mientras retoco y recuerdo ese día.
Una llamada entrante se hace escuchar, yo alcanzo a ver el nombre de Izan y contesto, pero le coloco en altavoz.
Izan: Hola, Liz. Llegaré un poco tarde, pero aparte te estoy dando tiempo jaja. Y aún así quién sabe si estés lista.
Liz: Oye, ya casi estoy lista jaja. Menos mal que no llegaste antes, pues hubieras tenido que esperarme
Izan: Estamos conectados jaja. ¿Camila y las chicas llegarán a tu casa?
Liz: Ya han de estar cerca, ahorita no tardan en tocar al timbre. Yo estoy terminando de maquillarme, de hecho casi me falta nada para terminar.
Izan: Muy bien. Vengo con mi mejor amiga, ella nos acompañara un rato, después irá con sus amigas. ¿No hay problema?
Me quedo en silencio y estética mientras sostengo mi labial.
Liz: Sin problema. Cuando estés afuera de mi privada, me avisas.
Izan: Claro. Nos vemos, Liz.
Cuelga la llamada y yo de inmediato ruedo mis ojos. —No puedo creer que vaya a llevar a esa perra... o sea. ¿Por qué ella tiene que estar a veces? ¿Lo cuida de mí o que?—murmuró mientras me aplico mi labial, y ahora sí, estoy lista para la noche.
Giro en mi silla, con dirección a la puerta. Ahí veo recargado a mi papá, sonriendo. —Te ves hermosa... ¿pero de quién hablabas? Perdón que te pregunte, pero lo pensaste en voz alta—inquiere con una expresión curiosa.
Curvo un poco mis labios. —Es una amiga cercana a Izan, ya te había hablado de ella. Es alguien que no me quiere, pues no le agrada que yo sea cercana a su mejor amigo—me pongo de pie y camino para tomarla mochila pequeña de color rojo en la que guardaré mi iPhone, cartera y otros accesorios.
Él me escucha con atención. —¿A ella le gusta él?—pregunta.
Cierro mi mochila. —No lo sé. No que yo sepa, pero quizás estoy equivocada. Regina está muy molesta por el hecho de que Izan le dijera que no me reclame nada, básicamente me volvió a defender, pero esta vez de ella—le miró a mi padre.
Asiente. —Entonces Izan te quiere conservar, aunque también a ella... Uhm. Tienes competencia, cariño—expresa con sarcasmo mientras está por dar media vuelta.
Yo rio. —Para nada. No es mi competencia—colocó mi mochila en mi espalda, casi al mismo instante el timbre de la casa se escucha. Me asomo a la ventana, recargándome en el marco de la misma, puedo ver que hubo un cambio repentino de planes. Melissa está vestida de Maléfica, Alejandra de Cenicienta y Camila viste de Alicia, me causa risa verle así, pero le queda perfecto.
Ellas se percatan cuando me asomo por mi ventana y les veo. —¿Dulce o truco?—pregunta Camila mientras levanta su calabaza, la cual cabe resaltar es bastante grande.
Yo suelto la carcajada. —Se ven hermosas... creo que sí se merecen dulces—continuó riendo al mismo tiempo que papá abre la puerta y les aviso que ya bajaré.
Cuando llego con mis amigas, veo que papá les está entregando dulces.
—Aquí están sus dulces... son las primeras en recibir—destaca papá.
Camila con sus manos toma los costados de su vestido, y se inclina un poco, imitando la posición de Alicia, en la película. —Muchas gracias—agradece al igual que las chicas. Yo estoy por hablar, pero veo que detrás de ellas aparece Izan, aunque no está acompañado de su amiga.
Camino entre las chicas, hasta donde sé encuentra él. Izan levanta su mano y saluda de lejos a mi padre y al igual que las chicas.
—Hola... llegaste a tiempo. ¿Pero cómo ingresaste?—volteó a la puerta, y alcanzó a ver a unas personas afuera de la privada que acaban de salir.
Sonríe y está observándome, un poco impresionado. —Pues unas personas salieron de la privada y aproveché para ingresar. Regina se quedó afuera hablando por llamada...—comenta. Para después centrar su vista en mí, le siento como si quisiera decir algo, pero antes voltea a ver a las chicas, ellas están charlando con papá.