Darío
Me sentía cansado, salí de darme una relajante ducha, acostumbraba dormir desnudo, así que sólo llevaba una toalla enredada en la cintura. Me detuve en seco al ver a Ana sentada en mi cama, totalmente desnuda, miré en el suelo toda la ropa regada.Odiaba el desorden .
_ ¿qué haces aquí?_ ella me sonrió sin dejar de masticar chicle, Ana desde que se levantaba y creo hasta que se dormía pasaba con goma de mascar, odiaba eso.
_ creo es obvio Darío _ la vi levantarse, no me molesté en recorrer su cuerpo con la mirada, no me gustaban las mujeres que ni se respetaban así mismas, Ana insistía en entrar a mi cama pero yo me encargaría que nunca lo hiciera.
_ vete_ ella hizo un puchero.
_ déjame darte un masaje relajante y luego darte tanto placer_ apreté fuerte los puños.
_ sales por las buenas o sales por las malas, te lo repetiré nuevamente, no eres mi tipo, me gusta llevar a la cama la mujer que yo eliga y la que yo conquiste.
_ eres un estúpido Darío, tú me perteneces y los sabes.
Enarque una ceja y me acerqué para recoger su ropa y tirarsela.
_ vístete ahora de lo contrario te sacó desnuda de mi habitación, sabes que soy capaz.
Ella tomó la ropa y se empezó a vestir molesta.
_ ¿eres gay o que?_ sonreí con ironía.
_ no soy ningún chiquillo que tratará de demostrar mi hombría acostándome contigo, esa mierda no va conmigo_ la miré molestó _ yo no te pertenezco loca.
_ mi padre hizo un trato con tía Andreina.
_ Camilo no era tu padre, y mi madre no es tu tía de ningún modo, tú Ana por más que patalees o insistas en asegurar que eres una D'Angelo no lo lograrás los exámenes fueron concluyentes, no tienes nada que ver con esta familia, si sigues aquí es por la bondad de mi abuelo _ estaba impacientandome la lentitud en que se vestía, con cada gesto que hacia trataba de seducirme.
_ si crees que permitiré que cumplas el trato con esa muerta de hambre estas equivocado_ esa fue la gota que derramó el vaso, la sujeté de brazo, soltó un gritó que esperaba se hubiera tragado la goma de mascar, abrí la puerta y la saqué.
_ vuelves a joderme la vida con el trato y yo mismo te sacó a patadas de la mansión _ iba a cerrarle la puerta pero me detuve_ jodes a Inés y ni un minuto pasas más en la mansión, que no se te olvide que ella es una D'Angelo auténtica, si no has visto la foto de su madre te aconsejo la veas y te darás cuenta que esa chiquilla pecosa es la hija de Camilo e Inés.
_ no permitiré que cumplas el trato con ella Darío, la única que tiene que estar en tu cama seré yo_ tire la puerta en sus narices, Ana era un fastidio, Alexander en su emoción creyendo que ella si era Micaella, le había comentado del trato.
Busque unos vaqueros y no me molesté en ponerme una camiseta, así descalzo me dirigí al estudio, Alexander pasaba horas leyendo.
Bajé las escaleras pero me detuve al ver a... ¿Inés? No se parecía en nada a la mocosa que conocí, llevaba ropa de mujer, su corte le favorecía.
Ella me miró y frunci el ceño, sus ojos estaban vidriosos.
_ honestamente no me importa pero yo te traje a esta mansión ¿así que porque lloras?
Ella se pasó la lengua por los labios y me miró.
_ no te importa _ iba a pasar a mi lado pero se detuvo_ creo que al odiarnos podrás ser sincero_ fruncí el ceño, estaba loca.
_ no soy consejero si eso buscas.
_ no seas tonto_ entrecerré los ojos, Inés no se media a mi nadie me insultaba_ sigo pareciendo una niña.
Suspiré al parecer habían problemas en el paraíso.
_ preguntale a tu novio_ me moví pero ella se interpuso en mi camino.
_ es mi primo_ asentí, iba a girarme pero decidí responderle.
_ no, ya no pareces una mocosa, de hecho eres pasable_ me crucé de brazos_ una D'Angelo no anda lloriqueando delante de la gente del servicio, mételo en tu cabeza y no mendiga cariño.
Inés asintió, escuchamos voces, y me sobresalte al sentir como Inés se arrojó en mis brazos y juntó sus labios a los míos, era bastante torpe no sabia como hacerlo, suspiré y abrí mis labios para besarla.
_ ¡Nes! _ ella me miró con tristeza pero antes de girarse sonrió.
_ Matías pensé estabas dormido_ el tal primo venía del jardín con Georgina, ella se veía con los labios hinchados. Era obvio que el vigilante había logrado meterle mano a Georgina y eso había afectado a Inés.
_ ¿ qué rayos pasa aquí Nes?
_ tienes ojos viste lo que estaba pasando, deja de preguntar estupideces. Veo que te has instalado en la casa y haces uso de toda ella y de lo que hay en ella_ Georgina se ruborizó.
_ vuelves a tocar a Nes y te parto la cara riquillo de pacotilla _ sentí que la rabia se apoderó de mi y me acerqué a él iba a romperle la cara.
_ por favor no _ Inés se interpuso entre ambos, era obvio que ella moría por su primo y él estaba besándose con Georgina. Me encogí de hombros, lo que pasará entre ellos me daba igual. Sin decir palabra me aparté para ir al estudio, Matías e Inés me daban igual, el besó fue un momento que me tomó desprevenido, lo gracioso que detestaba a las mujeres que se arrojarán a mis brazos y había respondido a Inés para que no quedará avergonzada, sacudí la cabeza al darme cuenta que había tenido un momento de debilidad, al ayudarla.
Editado: 18.05.2018