Salvación

Capítulo 4

                                                                             -L

 

Después de recibir esa carta, le dije a Dominic que aceptará la invitación, todos quedaron sorprendidos en la mesa. Él no estaba de acuerdo pero la decisión es mía y todavía sigue dudoso de ir.

En este momento estoy en pijama y guardando en la última maleta las cosas que voy a llevar. Me acerco al armario para sacar más ropa cuando siento a alguien en la habitación.

Sonrio de lado.

— ¿Qué necesitas Jennifer? — Escucho un bufido, mientras busco mi lencería.

— ¿Cómo lo haces? No hice nada de ruido y no me has visto. — Me pregunta. Me volteo y la veo tirada boca a bajo en mi cama.

Yo me dirijo a la maleta que esta a su lado y meto la ropa interior.

— Años de experiencia. — Me limito a decir.

Levanta la cabeza y me fulmina con la mirada.

— Hasta papá lo a intentado y no lo a logrado y eso que él es más viejo que tú. — Me dice irritada, mientras se sienta. Yo solo me encojo de hombros y me acerco a mi librería para escoger algunos libros para leer en el viaje.

Escojo tres libros y los voy metiendo uno por uno a la maleta cuando coloco el ultimo una mano se posa encima de la mía, levanto la mirada y me encuentro con su mirada preocupada.

>>> ¿Estás segura qué quieres ir? — Suelto un suspiro. Agarro la maleta y la coloco en el suelo, me siento a su lado.

— Sí. Ya es tiempo de regresar, no siempre lo voy a poder evitar. Ustedes no van a londres por mí, eso no es justo y yo no los puedo retener a no ir. — Le digo con voz fría.

Ella solo niega y me agarra las manos.

— Tú sabes que no eres ninguna molestia ni nada Lea. Te amamos y nos preocupamos por ti, eres mi hermana mayor y yo quiero lo mejor para ti. Si no quieres ir le digo a papá y él entendera. — dice con intenciones de levantarse. Yo solo le apreto las manos y niego con la cabeza.

— No, ya es hora que vaya y me enfrente a mi pasado. No puedo evitar lo inevitable, deja de preocuparte, voy a estar bien. — La miro con seguridad, soltandole las manos para levantarme e ir y cerrar la maleta.

Oigo un suspiro y como se levanta de la cama.

— Cualquier cosa, sabes que estás a tiempo de negarte y no iremos ¿ok? — La volteo a ver y asiento mientras le regalo una sonrisa que la tranquilice.

Se voltea y sale de la habitación.

Me acerco a un ventanal enorme que esta alfrente de mi cama y observo la noche.

Vivimos en un bosque no tan alejado de la ciudad a las afueras de Rusia. Después de tanto viajar a muchos lugares en el mundo nos decidimos quedar en Rusia, es tranquilo y no hay tanto alboroto.

Levanto la vista y me fijo en la luna, esta tan brillante y tan hermosa. Me pongo a pensar en Londres todo lo sucedido y lo dejado ahí.

Agito la cabeza negando para que esos recuerdos se vayan pero ellos nunca se van. Solo espero poderme encontrar a una sola persona ahí y que ella me recuerde.

Suelto un suspiro y me alejo de la ventana y voy a el interruptor de la luz para apagarla y que la habitación solo quede con la luz de la luna. Me acerco a la cama y me recuesto en ella para después cubrirme con las sábanas.

Mañana sera un día agitado, en la noche nos vamos a Londres y debo hacer muchas cosas antes de ir al aeropuerto y con esos pensamientos voy cerrando los ojos cayendo dormida.

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Al día siguiente me levanto muy temprano y hago todos los oficios que me tocan y confirmo que llevemos todo para el viaje, hablo con Dominic y con Kelly los cuales no lo dicen pero están preocupados.

Son las cuatro de la tarde y estoy entrenando un rato.

Después de golpear por una hora el saco de boxeo, voy a las pesas y les pongo peso a las barras.

— ¿Qué pasa? — Pregunté de mientras me acostaba y empezaba a contar mientras subía y bajaba las barras con el peso.

Escucho una unos pasos acercarse a donde estoy.

— ¿Podemos hablar? — Deje las barras en su sitio y fije mi vista en Adam. Su mirada es dura, tiene puesto un traje negro y su cabello esta peinado hacia atrás. Levanto una ceja interrogante dandole entender que siga hablando.

>>> Mamá y Jennifer están preocupadas por ti. ¿Estás segura que quieres ir?— Me paro y me acerco a él, le sonrío mientras coloco mi mano derecha en su mejilla, cuando siente mi mano cierra los ojos apoyándose en esta.
Adam y yo tenemos una gran conexión, con todo los Black tengo una muy buena conexión, pero con Adam es diferente, él por nacer primero hemos vivido más cosas juntos, hemos peleado juntos, a estado ahí para mi y yo para él, desde pequeño a sido muy pegado a mi, le e enseñado muchas cosas y él a mi.

— Estoy bien, todo va a ir bien. No te preocupes que yo me se cuidar sola. — Abre los ojos y ellos brillan con amor y preocupación hacia mí.

— Yo sé que te puedes cuidar sola pero te amo y no quiero que te sientas mal yendo. — Sonrío por sus palabra y lo abrazo. Es muy raro cuando habla de sus sentimientos y siempre que lo hace es conmigo.

— Yo también te amo Adam, no me siento mal, nerviosa tal vez pero debo superar esto y con quien mejor  que contigo y nuestra familia.

Él se separa de mí y me mira con una sonrisa divertida.

— Ok, me voy a bañar para quitarme este mal olor tuyo y tú has lo mismo.— Levanto una ceja y lo miro con malicia.

— ¿Asi? Entonces no importa que te vuelva a abrazar.— Me voy acercando lentamente a él, me mira con una sonrisa.

— Nos vemos en en avión.— Grita mientras sale corriendo. Niego con una sonrisa en mis labios y me voy a bañar.

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En este momento estoy dentro del avión privado de la familia sentada al lado de una ventana esperando el despegue.

A mi lado esta Adam con su cabeza recostada en el aciento, los ojos cerrados y escuchando música. En el aciento delantero esta Jennifer dormida en el hombro de Thomas, quien esta sentado en el lado de la ventana y este solo ve el teléfono.



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En el texto hay: vampiros, hombreslobo, dioses

Editado: 23.10.2021

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