Scarlet

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Annie comenzó a sospechar que Rodrigo se estaba acostando con Scarlet y eso le molestaba; entonces buscó a Andrés para sacarle información, ya que se suponía, él conocía todos los movimientos de Rodrigo.

—Dime una cosa Andrés, ¿qué sabes de esa tal Scarlet, la has visto?

—Sí, sí la he visto.

—¿En verdad se parece a Ángela?

—Bastante.

—¿Bastante, solo eso, creí que era igual?

—A Rodrigo le pareció que es más bonita. —Annie se puso como una culebra.

—¿Acaso a Rodrigo le gusta la prostituta?

—Ella le gusta a todos, es muy hermosa, pero Rodrigo no pretende tocarla.

—¿Y tú cómo lo sabes?

—Porque quería que se acostara con Israel y conmigo, pero yo no quise, Israel si aprovechó.

—Entonces Rodrigo no desea estar con ella.

—No que yo sepa, aunque se le van los ojos cuando la ve, se nota que le gusta en serio esa mujer.

—O sea que puede que si quiera acostarse con ella.

—Bueno, es hombre, además el contrato incluye el servicio sexual.

—Nunca pensé que Rodrigo cayera tan bajo por esa mujer.

—Pero y qué, para eso le paga, ella debe complacerlo.

Cuando Annie se quedó sola analizó toda la situación, llegó a la conclusión que no haber apoyado a Rodrigo para que Scarlet estuviera en la casa había sido un gran error, entonces pensó en remediarlo de inmediato; planeo convencer a Elena para que aceptara a Scarlet en la casa y así controlar lo que pudiera suceder entre ellos.

El domingo los Salvatierra se reunieron como siempre a almorzar en familia. Raiza invitó a Annie. Ella tenía una espina con Scarlet, aunque no la conocía, le molestaba el hecho que Rodrigo pasara con ella los fines de semana sin ningún tipo de control familiar. Después que almorzaron ella se quedó con Raiza y Elena en la sala, se sentaron en el sofá a conversar, entonces preguntó:

—¿Y Rodrigo no ha llamado?

—Ayer llamó en la noche. —Dijo Elena.

—¿Y cómo está Jr.?

—Hablé con el niño, estaba muy contento, hoy van a salir al parque de diversiones.

—Con los padres de Ángela o irán solos con Scarlet?

—¿Qué quieres decir Annie? —Dijo Raiza.

—Me refiero, si Alberto y Regina también acompañaran a Jr. —Elena agregó:

—Supongo que sí, no creo que Rodrigo se atreva a salir a solas con el niño y esa mujer.

—Sí tienes razón, pero de todos modos deberías cerciorarte.

—No creo que la locura de Rodrigo llegue tan lejos.

—No sé Elena, la verdad que he visto a Rodrigo como muy... no sé cómo decirlo; sensible con respecto a Scarlet, el martes le toqué el tema y se puso de un genio. Parece que lo tiene embelesado.

—No lo creo, mi sobrino jamás se fijaría en una mujer de esa calaña, si la contrató es solo para que cuide de Jr.

—Si Elena tienes razón, Rodrigo no tiene intención de fijarse en ella, ¿Pero Scarlet? podría aprovecharse de la situación e intentará conquistarlo; es un hombre viudo, millonario, además está solo y emocionalmente vulnerable; ¿no crees que es un blanco fácil para una oportunista?

Raiza agregó:

—Annie tiene Razon, debimos haberlo pensado antes de dejar que Rodrigo se llevará a Jr.

Elena puso cara de preocupación y se levantó del sofá analizando lo que Annie acababa de decir.

—No me había fijado en esa posibilidad. —Annie se levantó y se le acercó por detrás.

—¿Te imaginas que ella aproveche que están solos todos los fines de semana para envolverlo? ya tiene experiencia con los hombres, además Andrés me contó que ella es más bonita que Ángela.

—Ya estoy empezando a creer que debimos apoyarlo cuando quiso traerla aquí, así sería más fácil vigilar los movimientos de esa mujer, ella puede aprovecharse de su parecido con Ángela y embaucarlo.

—Eso mismo pensé. Necesito que ustedes dos me den su apoyo, debemos hacer que Rodrigo traiga a Jr. de regreso, —Ella puso una expresión de desespero—. Y también que traiga a esa mujer, tendremos que soportarla para evitar que mi sobrino termine enrollado con ella.

Jr. estaba feliz alistándose para ir al parque de diversiones con sus padres. Alberto se había ido a su casa de campo y Regina no quería salir, así que solo iría Scarlet con Rodrigo y el niño.

Delante de la gente ellos eran el matrimonio feliz divirtiéndose en el parque con su pequeño hijo. Al anochecer, cuando sus cuerpos agotados ya no podían seguir la velada, regresaron a casa. Regina como cualquier abuela amorosa había ordenado tenerles lista la cena, aunque ellos estaban hasta la coronilla de todo lo que habían comido en la calle.

—¿Cómo estuvo el paseo? —Le preguntó Regina a Jr.

—Me divertí mucha abuela, me subí con papá a los carros chocones y mamá me acompañó en los avioncitos.

—Entones me imagino que te divertiste mucho.

El niño le contó todo a la abuela mientras que Scarlet lo observaba sonriendo, su rostro se veía lleno de alegría. Rodrigo se quedó mirando a Scarlet sin que ella se percatara de ello, le parecía que estaba tan feliz; pensó dentro de sí:

"Se ve tan feliz y tan hermosa, no creo que esté fungiendo, ella en verdad disfruta de las cosas que hace mi hijo"

***

Elena le contó a Braulio la conversa que tuvo con Annie el día anterior.

—Mujer ¿por qué te dejas meter esas tontas ideas en la cabeza? no creo que Rodrigo a estas alturas de la vida se venga a fijar en una mujer alegre como esa.

—Tal vez tengas razón, pero no está de por demás vigilar los movimientos de esa intrusa.

—¿Y qué vas hacer? no me digas que te vas a mudar Miami solo para cuidar de Rodrigo.

—Sabes que detesto ir Miami, creo que lo mejor será aceptar que esa mujer venga a esta casa.

—¿Entonces le dirás a Rodrigo que traiga de regreso a Jr.?

—Por supuesto que sí, y mantendré a esa mujer lejos de mi sobrino.

Andrés fue a la oficina de Rodrigo.

—¿Adivina qué?

—¿Qué?

—Alejandro está intentando quitarnos el contrato de Villa Rosada.




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