125

El inspector llegó a la casa de los Salvatierra.

—Felicitaciones por su boda.

—Gracias inspector, contestaron Rodrigo Y Scarlet por educación y se quedaron con él en la sala.

—Pase y siéntese. —Le dijo Rodrigo. Después el inspector le dijo a Scarlet que le contara todo lo que ella recordaba de ese día, ella resaltó que el hombre tenía un Rolex y un anillo con la cabeza de una serpiente con los ojos tallados con rubíes.

—Son joyas muy costosas las que usted describe señora Salvatierra. No parece que fuera un criminal común, y si la besó, posiblemente se trate de algún admirador secreto. ¿Tiene algún admirador que la haya acosado?

—No, soy nueva en esta ciudad, conozco a muy pocas personas.

—¿Y de Estados Unidos?

—No creo, su dialecto es de aquí.

—Importante ese dato. ¿Y sucedió algo más que recuerde o que le haya llamado la atención además de que estaba siendo raptada?

—Sí, cuando corrí para escapar, él me llamó por mi nombre, me dijo Ana Julia, aquí todos me conocen con mi nombre artístico, "Scarlet."

—¿O sea que él sabe quién es usted?

—Sí. —Después el inspector le preguntó a Rodrigo:

—Y usted señor Salvatierra ¿tiene enemigos?

—No que yo sepa.

—¿Seguro que no sospecha de alguno que quiera hacerle daño a usted o a su familia?

—No creo que a ella la hayan intentado secuestrar por mi causa, ya que ese día no estábamos casados, tampoco lo teníamos planeado.

—O sea que decidieron casarse al otro día.

—Sí. Fue algo de última hora.

—Bueno, de todos modos si llegan a sospechar de alguien me avisan. Por los momentos le recomiendo a la señora no salir sola.

Después que el inspector de marchó Rodrigo le dijo a ella.

—¿De verdad no sabes de quién se trata? ¿No será algún tipo que te conoció dónde trabajabas? —Ella lo miró con rabia.

—Si hubiera sabido que tenía que soportante habría dejado que ese tipo me llevara con él, es más, voy a salir sola a la calle para que me encuentre y al fin me lleve.

—No lo dije para ofenderte, es solo para que pienses si puede ser alguno de tus clientes.

—Pues ya ando casada con uno de mis clientes, y de paso es el peor de todos. Y tú también, le dijiste al inspector que no tienes enemigos, pero se te olvida que el hombre que tu santa Ángela dejó plantado ene el altar se está vengando de ti y de tu familia, ¿o no?

—Si lo está haciendo, pero eso nada tiene que ver contigo, ni siquiera sabe que existes.

—Me encantaría conocerlo y felicitarlo por joderte a ti y a tu odiosa familia.

—No seas ridícula.

Por la tarde Raiza y Elena fueron a reunirse con Annie en su apartamento.

—Tu debes ayudarnos Annie a liberar a mi sobrino de las garras de a mosca murta.

—Por eso no debes preocuparte Elena, sabes que no dejaré que Scarlet de quede con Rodrigo.

—Pero mi hermano está ciego por esa mujer, esta mañana pretendía echarme de la casa porque le dije de frente que ese hijo que ella espera puede ser de Israel.

—Si Rodrigo está dispuesto a enfrentarse a la familia por ella, lo mejor es que no lo provoquen, porque ella le pedirá que se la lleve a otra parte, y si se van a vivir solos nos quedará muy difícil separarlos.

—Pero a mi sobrino hay que hacerlo entrar en razón.

—Sí, pero no desafiando su fe en ella. Rodrigo lo niega, pero él conserva las esperanzas en ese matrimonio, y con cualquier cosa que ustedes hagan en contra de Scarlet, la harán una víctima delante de sus ojos, y como está ciego por ella, saldrá en su defensa y las odiará a ustedes y a todo el que se meta con ella. Lo mejor es que Scarlet permanezca en la casa y destruirla sin que Rodrigo se dé cuenta, hacerle la vida tan imposible que ella misma desee largarse y dejarlo si es posible con el niño.

—Entonces simularemos que la aceptamos y ponemos en marcha nuestro plan para acabar con esa mujerzuela.

—Sí, debemos acabar con ella, yo creo que podemos dañar su imagen aún más de lo que ya está, Rodrigo piensa que se acostó con Juan Carlos, y con el rumor de que ese hijo puede ser de Israel. —Raiza les dijo:

—Pero no debemos continuar con ese rumor porque Rodrigo nos lo va a reprochar. —Elena agregó:

—Entonces debemos inventarle cosas como que sale con otros hombres, aunque me gustaría ofrecerle dinero para que se vaya lejos lo antes posible.

—Tal vez eso funcione, dile que obtendrá ese dinero rápido, en cambio con Rodrigo deberá soportarlo por años.

—Eso haré hoy mismo.

Willy salió de la oficina y se fue a su casa a pensar en lo que había hablado con Annie temprano; se sentó en el mueble de la sala y hablando solo comentó:

—Así que Rodrigo confía tanto en la muñeca de porcelana que no hizo una división de bienes. Me pregunto si ella estará enamorada o no de él —Willy puso una sonrisa malévola—. Porque yo puedo ayudarla a liberarse de su esposo y quedarse con todo.

Tal vez dejándola viuda. Si Rodrigo llegara a morir ella sería la afortunada viuda millonaria, y yo podría convertirme en su hombre, así me quedaría con el dinero y con ella que de paso es una mujer muy hermosa.

Creo que planeando bien las cosas y con paciencia puedo hacerme su amigo y ganarme su confianza. Voy a acercarme a ella y le daré mi apoyo, ahora que todos están en su contra en esa casa ella necesita eso, un amigo que la escuche y la consuele. Mañana mismo me acercaré y le daré una palabra de solidaridad y empatía, total, ambos provenimos de la clase menos privilegiada, yo también sufro muchas humillaciones, bueno, eso le diré, que he sido una víctima de las humillaciones de la familia Salvatierra.

Después debo idear un plan para eliminar a Rodrigo, pero debo hacer algo perfecto para que la policía no sospeche de ella, porque la idea es que se quede con su fortuna, luego yo me adueñaré de todo y la haré mi mujer.