Suave soplo, brisa que revela las olas del mar,
Traslada el susurro del sufrimiento de mi alma.
Toma de mis labios las palabras vacías de mi ánimo desolado.
Corazón traicionero, que buscaba en tus ojos el inconsciente de lo perdido.
De un amor vacío y sin sentido.
El murmullo de las hojas escritas de cada libro leído,
Y el llanto derramado en cada párrafo.
Crudo amor, te pregunte tantas veces si creías en mí.
Y nunca halle una contestación sincera.
Yo si creía en ti…
Cada silaba de tu boca ingrata y prematura fue incierta.
Tiempo... tiempo lejano y paradójico.
Recuerdos mentirosos en fotografías sombrías y guardadas en un cajón oxidado.
Ese amor y dolor perdido, estará en mi memoria.
Cada noche... En soledad.
Esperando a la luna como compañera,
Y testigo de lo que fue tu amor fingido.