―Hablando de juegos, ¿qué les parece si comenzamos? ―propone Jota con entusiasmo.
―Sí, ya se está haciendo un poco tarde ―dice Karla.
―¿Y con qué quieren empezar? ―inquiere Mariale.
―Yo digo que con la ruleta de shot ―sonríe Rafael.
Me rasco el cuello y hago una mueca divertida.
―¿Cómo les explico que ya me está pegando el alcohol? ―interrumpo.
―¿En serio? ―me pregunta Rebeca.
―Siempre te pega rápido ―apunta Rafael causando risas.
―No es cierto, puto ―me defiendo―. No siempre.
―¿Y si nos olvidamos del alcohol y empezamos con juegos de adultos? ―La voz de Karla suena provocadora.
―Eso te gusta, ¿verdad, preciosa? ―le pregunta Jota usando un tono bastante bajo.
―Sí, claro ―repone―. Pero sabes que no es lo mismo hacerlo solo contigo que en grupo, así es mejor.
Arrugo la frente, observando de ellos a Rafa, que se ríe con Mariale como de alguna broma privada. No es de extrañar, Karla y Jota hablan sin pudor alguno.