¿Cómo le digo a mi mente que se ponga de acuerdo con mi corazón para dejar de extrañarte? Ambos batallan para ver quién te recuerda más, y el herido solo soy yo.
Mi mente me trae tu rostro cuando cierro los ojos, tu risa cuando necesito calma, y tus "te amo" en susurros cuando me encuentro en silencio. Mi corazón, por otro lado, me trae los nervios al saber que vendrías, las cosquillas en la panza cuando me abrazabas y no me soltabas, el latido acelerado cada vez que te veía, y el dolor de saber que ya no volverías.
Están empatados, ambos me están matando por igual, van a la par y no sé si sigo aquí porque mi corazón late esperando por ti, o si mi mente me mantiene cuerda con el recuerdo de tus manos en mí, o si ambos esperan a ver si regresarás.
Soy un títere de ellos, que no entienden que no quieres venir. Soy un títere de sus recuerdos y sentimientos porque no quieren entender que decidiste continuar tu vida sin mí.
I.f